Nota: Este avance e impresiones proceden de la versión final del juego, que ha estado en posesión del redactor 3 días antes de la publicación de este avance.
Seis años después, Mario, el personaje más carismático del mundo de los videojuegos, ha vuelto en una nueva aventura. Super Mario Sunshine acaba de salir en el mercado del son naciente, vendiendo más de 400.000 unidades en menos de una semana (y por consecuencia siendo el juego más vendido de la misma), del mismo modo que ha incitado el aumento de ventas de la consola, que esta semana ha llegado a vender 27.000 unidades (el triple de lo que suele ser habitual).
Y como no podía ser de otra manera Vandal On-line se ha hecho con una copia de tan esperado juego para ofrecéroslo a vosotros, nuestros lectores, en primicia.
La historia de Super Mario Sunshine (SMS) es algo más compleja que la de los Mario de toda la vida (aunque no mucho, tampoco penséis eso). Tras salvar a la princesa de las garras de Bowser, nuestro héroe prepara la maleta para tomarse unas merecidas vacaciones en la playa con su adorada Peach. El destino está fijado; Dolphic Island es el objetivo de tan deseado descanso. Según se dirige el avión a tan hermosa isla con forma de delfín, ven que no todo va como debería ir. Nada más aterrizar el aeroplano descubren que la isla entera está sucísima, llena de pintura y desordenada; según varios testigos presenciales el autor de tal ingente desastre no es ni más ni menos que el propio Mario, por lo que tras arrestar al fontanero bigotudo, meterle en prisión y hacerle un juicio, deciden que debe limpiar toda la isla y encontrar al culpable. De nuevo, se acabaron las vacaciones.
Aquí es donde nosotros entramos en el papel principal, debemos encontrar al culpable de los delitos y arreglar todos sus destrozos, y hacer otras misiones que nos manden los habitantes de la isla. Según esto, el juego parece muy entretenido pero un simple clon de Mario 64 y con apenas novedades, la diferencia reside en que ahora contaremos con una inestimable ayuda que nada tiene que ver con la famosa capa de Super Mario World, las distintas gorras del Mario 64 o las flores multicolor que te conceden la habilidad de arrojar bolas de fuego: En este juego, Mario contará con un Water pack, un aparatito retenido a la espalda del fontanero que será nuestro mejor amigo durante el transcurso de la historia. Gracias a él podremos realizar innumerables movimientos jamás vistos en un Mario. La principal misión del cachivache es expulsar agua a presión, lo que nos facilita la tarea de limpiar toda la isla. Del mismo modo podremos cambiar los cabezales del Water Pack para realizar aún más acciones, lo que nos recuerda enormemente al cambio de gorras de Mario 64.
Ya metidos en el tema de los movimientos de Mario en SMS queremos centrarnos un poco más en ellos porque, si bien no lo parece, han cambiado bastante más de lo que se cree. En SMS ya no podremos usar la habilidad de agacharse, lo que es una gran pérdida ya que el mortal tan espectacular que hacía el fontanero hacia atrás en Mario 64 se ha perdido con él. Otros brincos también han desaparecido, como lo era el famoso salto largo (el salto al estilo "Carl Lewis" para que nos entendamos), que tampoco sigue presente en esta secuela. Por el contrario, otros saltos siguen ahí, como es el triple salto o el lanzamiento en plancha (éste ha sido mejorado), y se han añadido muchos nuevos como el salto con giro que se realiza dando vueltas al stick seguido de la pulsación del botón A. También los cabezales del Water Pack ayudan a la creación de nuevos movimientos. Cuando por ejemplo estamos sujetos a una cuerda podemos ayudarnos con un chorro de agua para dar vueltas y más vueltas con el fin de llegar más lejos de lo que llegaríamos saltando sobre la misma. También podemos mezclar las habilidades del instrumento con las del propio Mario, de este modo, cuando usemos el salto del giro, si mantenemos presionado el botón R –el cual nos habilita la expulsión de agua con el Water Pack- echaremos chorros de agua hacia todas las direcciones dañando a cualquier enemigo que se encuentre a una distancia más o menos cercana. Todos estos movimientos están mucho más cuidados que los de Mario 64; son mucho más precisos y más fáciles de elaborar.
La mecánica del juego no es tan original como Mario 64 ya que es ciertamente parecida; ahora deberemos viajar a lo largo de inmensos mundos, todos ellos realmente grandes y bellos recolectando los 120 Shines –el equivalente a las estrellas de M64-. Para ello tendremos que usar las habilidades del Water Pack con el objetivo de limpiar toda la pintura de la isla y hacer otras sub-misiones que también se verán recompensadas con un sol dorado. Otra forma de conseguir tan codiciado tesoro es el recolectar las monedas azules, que serán cambiadas por shines en la tienda por un amable mapache. Todos los escenarios en los que nos veremos inmersos serán extremadamente grandes, y con muchos secretos que deberemos descubrir. La mayoría de ellos estarán ambientados en las playas de la isla por lo que la variedad de los mismos se estima muy pequeña e infinitamente menor a la que gozaba Mario 64 –donde podíamos encontrar desde desiertos, a un mundo de lava pasando por las formidables zonas heladas- pero sí encontraremos rasgos y guiños (como una pantalla en la que encontraremos muchas llamaradas y con monstruos de fuego o una casa llena de fantasmas) que conmemoran a esos variados mundos de Mario 64. De todas formas, SMS seguirá teniendo niveles originales como el del parque de atracciones -donde podremos incluso darnos un pequeño viaje en la montaña rusa- o el puerto. También montaremos a lomos de enormes pájaros de madera o efectuaremos trepidantes carreras sobre pequeños calamares. Esto es tan solo un pequeño aperitivo de lo que nos encontraremos en la nueva aventura de la saga Mario, y una muestra de que la imaginación sigue presente en la cabeza del señor Shigeru Miyamoto.
Otra gran novedad respecto a Mario 64, que alegrará a más de uno, es que ahora sí podremos manejar a Yoshi (en el anterior únicamente le veíamos tras acabar el juego con las 120 estrellas, pero nos quedábamos con las ganas de montar sobre él como en Mario World). En SMS, Yoshi, con sus tiernos gestos y sus graciosos sonidos, no sólo nos servirá como "vehículo" sino que será una pieza fundamental a la hora de resolver puzzles ya que sus habilidades son indispensables para abrir nuevos caminos, pantallas y conseguir shines. Su salto es bastante mayor que el de Mario, por esa razón montar sobre Yoshi nos será de gran utilidad para llegar a sitios que nos resultarían inalcanzables sin él, del mismo modo que nunca deberemos olvidar su larga lengua o su habilidad de transformar a los enemigos en bloques de colores. Tampoco deberemos descuidar su línea porque debido a los grandes sacrificios que tiene que hacer para llevar al gordo de Mario de aquí para allá, su estómago puede quedar vacío, por lo que deberemos alimentarle si no queremos quedarnos sin él.
Gráficamente no es nada malo pero tampoco es ningún prodigio. Los puntos flacos del juego son las texturas, hay algunas bastante malas como las de las paredes, aunque, en mi opinión, lo que verdaderamente empaña el apartado técnico del juego son las ralentizaciones, cada vez más comunes según va transcurriendo la historia. Sin embargo todos estos contras se ven contrastados por unos gigantes escenarios, un excelente uso del motion blur, aplicado para dar la sensación de calor, y un agua más detallada y realista que la de Wave Race: Blue Storm. Siempre hay otros detalles igualmente impresionantes como los reflejos del agua que disparamos con el Water Pack u otros pequeños pero magnos detalles como el reflejo de Mario en los charcos del suelo o el reflejo del famoso espejo mostrado en el video promocional de este último E3. Musicalmente sigue la línea de todos los Mario, con sinfonías alegres y más veraniegas que nunca, destacan dos temas que seguramente den una alegría a los incondicionales de la saga.
En definitiva, SMS no es un juego extremadamente original ni tampoco da el salto que vimos de Super Mario World a Mario 64 pero sí corrige muchos fallos de su antecesor y reafirma que Miyamoto sigue en su línea; Super Mario Sunshine es una dignísima secuela del que era, posiblemente hasta ahora, el mejor plataformas 3D de la historia. Este nuevo juego es más grande, más bello, más difícil y más largo que Mario 64. Pese a seguir teniendo unos pequeños fallos, será de nuevo un estandarte entre los plataformas 3D y un modelo a seguir por todos los juegos de plataformas. ¿Ha superado entonces SMS al ya mítico Mario 64? Esa es una difícil cuestión que cada cual deberá responder. Su salida en el mercado americano está prevista para el 26 de Agosto, mientras que en Europa lo tendremos a principios de Octubre.