En las navidades de 2010 el famoso de gorila de Nintendo volvió por todo lo alto con Donkey Kong Country Returns, un sobresaliente título para Wii que nos pareció uno de los mejores juegos de plataformas de la última década. Desarrollado por los norteamericanos Retro Studios, que no saben hacer otra cosa que no sean juegazos, dejaban de lado después de muchos años la saga Metroid Prime para marcarse un plataformas divertido, adictivo y desafiante, recordándonos a los mejores años del género en las consolas de 16 bits.
Ahora dentro de muy poco, el 24 de mayo, en el ecuador del "año dorado de 3DS", este genial plataformas va a visitar también los circuitos de la portátil de Nintendo, que cada vez tiene un catálogo más completo y sobresaliente, y que va a verse incrementado y de qué manera en los próximos meses.
Donkey Kong Country Returns 3D está siendo desarrollado por Monster Games, un estudio de Minnesota en el que la compañía nipona ya ha confiado varios trabajos, como Excite Truck para Wii y Pilotwings Resort para 3DS.
Ayer pudimos probar esta conversión para 3DS y certificar que se ha hecho un gran trabajo a la hora de trasladar el juego original, se mueve y se ve de manera muy similar a como lo recordábamos en Wii, es cierto que su tasa de imágenes no es tan fluida -ya no se mueve a 60 fps-, y que al igual que en otros muchos títulos de esta portátil, hay más dientes de sierra de la cuenta, sin llegar a igualar a la nitidez de la versión de sobremesa. Pero lo que es más importante, su genial jugabilidad no solo se mantiene, sino que además el control se ha visto mejorado.
Esto se debe a que la acción de rodar, que en Wii teníamos que realizar agitando el mando, ahora se hace pulsando un botón, lo que es mucho más cómodo y fiable. Era un movimiento bastante importante y de uso habitual, que nos permitía dar saltos más largos, y que en Wii nos jugó alguna que otra mala pasada, algo que ya no ocurrirá en esta versión de 3DS.
Se mantienen las mismas fases del original más un mundo completamente nuevo, con 8 fases. Este aparecerá cuando hayamos completado la aventura, y como os podéis imaginar son fases desafiantes, a la altura del tramo final de un plataformas que era bastante complicado. En unos últimos años en los que los videojuegos cada vez son más fáciles, Donkey Kong Country Returns sorprendió a muchos, y tenía picos de dificultad bastante altos, no imposibles para un jugador habitual, pero sí muy complicados para un usuario casual, sin tanta experiencia o habito.
Pensando en este usuario, se ha incluido el llamado modo nuevo, pensado no solo para los jugadores menos hábiles, sino también para el formato portátil, en el que muchas veces juegas partidas cortas y en cualquier parte, sin la comodidad del hogar. Un modo en el que se rebaja la dificultad en general, aumentando por ejemplo el número de veces que podemos ser golpeados, pasando de dos a tres corazones, tanto para Donkey Kong como para Diddy Kong.
También se han incluido nuevos ítems que facilitan las cosas, como el barril DK portátil, que puede traer de vuelta a la acción a Diddy Kong en cualquier momento, el globo verde, que te devuelve al nivel si te caes al vacío, o el parachoques, que te protege de hasta dos golpes cuando vas montando en el barril cohete o en la vagoneta minera. Por lo demás en este modo nuevo las fases son exactamente iguales, solo que con todas estas "pequeñas" ayudas, además de permanecer la superguía, ese cerdo al que podías recurrir para que te mostrará cómo pasarte la fase.
No os asustéis los más hardcore del lugar, el modo original, el juego tal y cómo fue concebido en Wii, permanece, solo tenemos que elegirlo al empezar a jugar, modo nuevo o modo original. Esto quedará registrado en uno de los tres archivos de guardado, y una vez comenzada la partida, no podremos cambiar la dificultad, por lo que si queremos cambiar de modo, tendremos que empezar la partida en un nuevo archivo.
Podremos jugar a dobles mediante conexión local, y sigue presente el modo espejo que se desbloqueaba al acabar la primera fase del Templo dorado, y hay una serie de extras en forma de galerías: Galería de imágenes, música, vídeos y dioramas, esto último son distintas escenas del juego en forma de objeto tridimensional, que podemos contemplar en todo su esplendor gracias al efecto 3D estereoscópico de la consola.
Respecto a esto, decir que el 3D funciona bastante bien, el título original ya contaba con diferentes planos y mucha profundidad en los escenarios, algo de lo que se aprovecha bastante bien el 3D. También es cierto que al ser un plataformas de tanta precisión y que pone nuestros nervios a flor de piel, movemos la consola más de la cuenta, perdiendo el 3D con facilidad, por lo que imaginamos que mucho preferiréis jugar con él desactivado. Fue curioso que probamos Donkey Kong Country Returns 3D después de jugar a la demo del nuevo Zelda, y en el juego del gorila la imagen se desdoblaba con muchísima facilidad, algo que no nos pasó nunca con la nueva aventura de Link. Lo que nos demuestra que no es tanto un problema de nuestros ojos o de la consola, sino de la destreza con la que los desarrolladores aplican el efecto.
Un soberbio plataformas se suma al catálogo de 3DS
Es raro que a estas alturas un amante de los plataformas en dos dimensiones haya dejado la oportunidad de jugar a Donkey Kong Country Returns, a no ser que no tuviera una Wii claro. Y también es raro que un usuario de 3DS no haya tenido antes una Wii. Con esto queremos decir que muchos ya jugamos el título de Wii en su momento, y nos hubiera encantado una aventura completamente original, con nuevas fases y situaciones, manteniendo esta misma jugabilidad y aspecto gráfico. Aunque sabemos que a más de uno no le va a importar volver a disfrutar casi tres años después de este excelente juego, una nueva excusa para volver a jugarlo. Si tienes una 3DS, te gustan los plataformas y lo dejaste pasar en Wii, tírate a por él de cabeza cuando se ponga a la venta el próximo 24 de mayo. Si este no es tu caso, y simplemente te apetece volver a jugar semejante juegazo, que sepas que estamos ante una gran conversión, que mantiene intacta toda la esencia del original.
