Análisis The Silver Case 2425, la colección policíaca de Goichi Suda (Switch)
Son cientos los videojuegos que nunca llegarán a manos de los jugadores porque quedaron olvidados en un antiguo sistema y no recibieron traducción. De vez en cuando suceden milagros que consiguen rescatar algunos de ellos, pero dado su riesgo de publicación esto no suele ser lo normal. Uno de esos milagros fue el que consiguió Playism al convencer a Goichi Suda para traer de vuelta tanto al nuevo como al viejo público dos de los primeros juegos de su carrera, lanzados en Japón hace dos décadas.
Fue así como hace cinco años empezaron recuperando la novela visual The Silver Case, un remaster a cargo de Active Gaming Media de aquel juego de 1999 para la primera PlayStation. Tiempo después harían lo propio con la secuela The 25th Ward: The Silver Case, que fue lanzada únicamente para dispositivos móviles en 2005 y que esta vez llegaría a PlayStation 4 y Steam. Ahora ambos juegos han sido por fin recopilados en uno solo para Nintendo Switch bajo el título The Silver Case 2425.
Los orígenes del saltamontes
A finales de los 90 las visual novels eran todavía un género de moda en Japón. El creativo Goichi Suda acababa de dejar Human Entertainment para fundar su propia compañía, Grasshopper Manufacture. El primer juego que desarrolló al mando de la misma fue este The Silver Case, un juego muy heredero de lo que había dirigido en Human Entertainment con Moonlight Syndrome y Twilight Syndrome. Aquí la temática no llegaba al terror puro que mostraban aquellos, pero sí que planteaba una historia de detectives en la que los casos giran sobre un enfoque de thriller bastante macabro. Aquella sería la semilla de juegos como Flower, Sun and Rain o Killer 7, que sí llegaron a Occidente y empezaron a darle un reconocimiento internacional. A pesar de que ese primer juego no cruzó las fronteras, sí que tuvo una secuela planeada para PlayStation 2 con la empresa japonesa Genki, pero se pasó a móviles.
The Silver Case 2425 es una colección que incluye los dos juegos mencionados, pero lo cierto es que más allá del logo y el nuevo arte promocional, no presenta novedades que no tengan por separado sus respectivos remasters; nada más abrir el juego se despliega un menú que nos deja elegir entre uno u otro. Hubiésemos preferido algún tipo de aliciente en forma de extras que conecten ambos títulos, aunque veremos que el mero hecho de que vengan juntos ya hace que se retroalimenten suficiente.
La historia del primer juego se sitúa en el ‘24 Ward’, el último de los veinticuatro barrios de la región de Kanto, levantado en los años noventa cribando a la población. Nuestro personaje será un nuevo agente al que podemos poner nombre y que se verá rodeado por una serie de casos de homicidio que investiga la Henious Crime Unit y vinculados con Kamui Uehara, un conocido asesino en serie que actuaba hace años. En la unidad se encuentra el núcleo de personajes del juego, formada por miembros memorables como Tetsugoro Kusabi, Sumio Kodai o la agente Chizuru Hachisuka. Los diálogos están muy bien escritos y toca de lleno temas como la moral, la psicología, la política o el sexismo. En general presenta una trama sólida y adulta que es propia de este tipo de aventuras.
El estilo gráfico de The Silver Case es uno de sus principales atractivos, mezclando una interfaz con un diseño refinado de textos, viñetas ilustradas, escenas CGI y entornos 3D en primera persona. El control se realiza solamente en estos escenarios, por los que nos movemos e interactuamos con puntos señalados de los que no podemos salir. Además del desplazamiento y la inspección de objetos existe la posibilidad de hablar, utilizar ítems y por supuesto salvar la partida. Este menú se cambia haciendo uso de la cruceta, pero los comandos nos han resultado un tanto engorrosos a estas alturas.
En cuanto a la remasterización en sí, Active Gaming Media transformó la pantalla original de 4:3 a un aspecto panorámico y adaptó la interfaz de usuario para alcanzar la alta definición. Además, en el proceso se mantuvieron las ilustraciones originales, así como las escenas CGI —quizás la parte que parece menos remasterizada—, siendo la mayor carga de trabajo los nuevos entornos 3D del juego. En este aspecto gráfico es muy fácil que pensemos que no ha mejorado demasiado, pero es totalmente intencional. El bajo poligonaje de las viñetas tridimensionales no es el mismo que lucía en PlayStation, han decidido rehacerlo de nuevo pero sin dejar el estilo low poly surrealista. Lo que sí es cierto es que esto se contradice un poco con las opciones que incluye para alternar entre la interfaz y los contenidos CGI del original y los del remaster, donde la mayor diferencia está en la cinemática que abre el juego, pudiendo cambiar entre la nueva con remix de Akira Yamaoka y la original con la música de Masafumi Takada. En el resto no veremos demasiado añadido más allá de la posibilidad de acelerar el texto.
La música es de los apartados más destacados del juego, compuesta originalmente por el eterno colaborador del estudio, Masafumi Takada. Durante la exploración y los diálogos escuchamos una original mezcla de downtempo con vibráfonos, pianos y sintetizadores, y fragmentos como el tema principal o el tema de Kusabi recuerdan mucho a las películas de Takeshi Kitano. Solamente cuatro de las piezas han sido remezcladas por Akira Yamaoka, entre ellas la intro y la selección de capítulo. Los efectos de sonido están logrados, destacando el característico sonido de tecleo para los textos, y la principal ausencia como siempre en estos casos es la localización al español, viene en un inglés difícil.
Una secuela más extraña
The 25th Ward: The Silver Case parece un juego más moderno desde el primer momento. Es cierto que salió seis años después del original, pero también lo hizo para un soporte mucho más limitado en aquel momento —recordemos cómo eran los teléfonos móviles hace 15 años— y el remaster de los dos juegos se hizo casi a la vez. En ese sentido, parte con cierta ventaja por estar mejor actualizado. La historia se vuelve un poco más rara y retorcida con el nuevo complejo ‘25 Ward’, aunque manteniendo el sistema Film Window de textos, así como personajes de la 25th Henious Unit Crime, siendo ahora Mokutaro Shiroyabu y la agente Shinko Kuroyanagi los miembros que destacan en la trama.
En este tuvieron que hacer desde cero toda la interfaz, buscando encajar con The Silver Case en un similar formato de viñetas panorámico, en lugar del aspecto 1:1 que tenía en móviles. Aquí en los entornos 3D notamos un poligonaje mucho más suave y agradable, a pesar de que tampoco es ningún portento gráfico, pero sí que justifica mejor ese estilo low poly. Los comandos de novela visual se han refinado también, siendo mucho más intuitiva la forma de seleccionar los caminos —mediante piezas geométricas en el extremo de la pantalla al que queramos acceder— e incorporando figuras poliédricas para las acciones: un tetraedro para las opciones de hablar, mirar y guardar o un dado de 10 caras para introducir combinaciones numéricas, algo que ocurría a menudo para aprovechar las teclas del móvil.
El juego se divide en tres grandes capítulos que están seccionados en partes más pequeñas, un esquema algo diferente al de The Silver Case, que alternaba entre los casos del modo Transmitter y los informes del modo Placebo, una especie de ‘cara B’ de la historia que complementa los puntos de vista. Aquí se compuso una nueva banda sonora de triphop para la ocasión, a cargo de Akira Yamaoka, Erika Ito y Tomohisa ‘Baiyon’ Kuramitsu. En este caso no se ha añadido la opción de acelerar los textos ni de alternar entre la vista del juego original —debido al rediseño—, pero sí incluye la misma opción para bajar la calidad de los polígonos, dejando claras las intenciones de no utilizar gráficos punteros.
Conclusiones
The Silver Case 2425 es la mejor forma de disfrutar los dos clásicos de Grasshopper Manufacture en su localización al inglés, juegos perfectos para el modo portátil de Nintendo Switch incluidos en un solo pack. Juntos nos pueden llegar a durar fácilmente unas 30 horas de juego, teniendo ambos una duración similar a pesar de que hay más cosas por hacer en la segunda parte fuera de la historia principal. Aun así, la falta de novedades hace que no podamos recomendarlos a quienes tengan ya las ediciones individuales de PS4 y PC, pero en caso de no poseerlas… aquí hay dos aventuras notables que si bien pertenecen a un género nicho que no gustará a todo el mundo, es un milagro que regresen.
Hemos realizado este análisis con un código de descarga que nos ha proporcionado Bandai Namco.