Análisis de Rogue Legacy (PS4, Xbox One, Switch, PSVITA, PS3)
Los roguelike, juegos de acción y rol que se desarrollan en mazmorras que se generan de manera aleatoria -valga la rápida explicación-, son uno de los géneros más recurrentes para la escena independiente en los últimos años. Propuestas para todos los gustos y colores que unos veces con más acierto, y otras con un poco menos, consiguen tenernos pegados a la pantalla con escenarios y peligros imprevisibles en cada partida.
Hace poco más de un año disfrutamos y mucho de Rogue Legacy para PC, un juego del que destacamos en nuestro análisis, por encima de todo, su capacidad para engancharte, para decir ""venga, solo una más", "esta es la última", y ver cómo pasan las horas sin que puedas soltar el mando, uno de los juegos más adictivos de todo 2013, puro vicio. Aunque se ha hecho un poco de rogar ahora llega a las consolas PlayStation –PS4, PS3 y PSVita-, con todas sus virtudes intactas y muy pocas novedades, muchas de ellas casi imperceptibles para la mayoría de los mortales.
Lo primero que hay que destacar es que llega con Cross-Buy y Cross-Save, lo que quiere decir que realizando una única compra podemos disfrutar de las tres versiones, y que puedes compartir entre ellas el mismo archivo de guardado, por lo que en casa puedes jugar en PS4 y PS3, y cuando tengas que salir puedes continuar tu progreso en PS Vita. Un juego que se adapta como un guante a la portátil de Sony, ya que se presta a muchas partidas pero muy cortas; otro título independiente que insufla oxígeno a esta consola desgraciadamente desaprovechada, a la que sus propios padres parecen estar dando de lado.
Puro vicio
Pese a que lo recomendamos con mucho entusiasmo en su momento, creemos que Rogue Legacy no tuvo la repercusión que se merecía, y todos los que ya lo habéis disfrutado, podéis dar buena fe de ello, de su indiscutible calidad y capacidad para viciar como el que más. Por sus características pensábamos que sería perfecto para jugar en consola, y que esto le daría una segunda oportunidad para ser más relevante, y esperamos que así sea, porque la obra de Cellar Door Games, a la que ya dedicamos un montón de horas hace un año, nos ha vuelto a enganchar como la primera vez, lo que dice mucho y muy bueno de este juego.
Con ingredientes que recuerdan a juegos como Dark Souls, The Binding of Isaac, Spelunky y clásicos como Castlevania o Ghosts'n Goblins, en Rogue Legacy tenemos una aventura de acción y plataformas que se desarrolla en un castillo en el que cada vez que entras, su estructura se genera de manera aleatoria, por lo que cada partida es imprevisible, y no sabemos lo que nos vamos a encontrar. Tanto es así, que además antes de entrar el castillo tenemos que elegir entre uno de los tres héroes disponibles, que también se generan de manera aleatoria cada vez.
La muerte es permanente, cada vez que nos matan volvemos a la pantalla de título, y tenemos que volver a elegir un héroe, uno de los descendientes del anterior personaje. Un legado familiar un tanto problemático, ya que estos tienen diferentes características físicas, rasgos o enfermedades, que hacen que cada heredero tengas sus pro y sus contra. Gigantismo, lo que representa un personaje el doble de grande de lo normal, enanismo, lo contrario y que nos permite meternos por lugares estrechos, miopía, que no nos deja ver demasiado bien a unos pocos metros, visión en blanco y negro, un problema de flatulencias, que no necesita mucha explicación, síndrome de Tourette, por lo que soltamos todo tipo de improperios cada vez que nos golpean, psicosis, que nos hace ver enemigos donde no los hay, y un larguísimo etcétera de rasgos, algunos con influencia directa en la jugabilidad, y otros no tanto o ninguna, pero que son graciosos o curiosos.
Cuando la diñamos el siguiente heredero conserva el oro de su padre, pero tenemos que gastarlo antes de entrar al castillo, ya que hay que darle a Caronte todo nuestro dinero para que nos deje entrar en él. El oro lo podemos gastar en diferentes mejoras permanente para los personajes, que se mantienen de heredero en heredero. Mejoras de armamento y armadura, de salud, fuerza, magia, coraza y un larguísimo etcétera, además de desbloquear nuevas clases de personaje, con sus propias habilidades especiales.
Por tanto, hay que gastar todo el dinero antes de entrar al castillo si no queremos perderlo, y el objetivo en cada nueva incursión es amasar el suficiente para que cuando nos maten, podamos adquirir una nueva mejora, y así ir siendo cada vez más poderosos y poder explorar más partes del castillo. El objetivo último es vencer a los cuatro jefes de las correspondientes zonas (castillo, torre, bosque y mazmorra), para así poder acceder al definitivo enfrentamiento contra el jefe final, y pasarnos el juego, algo que no es nada fácil.
La progresión es bastante lenta, a no ser que seáis especialmente habilidosos, y solo para pasarnos la primera zona nos tiraremos unas cuantas horas. En el castillo además de muchos enemigos y trampas también encontramos otras sorpresas, como jefes intermedios o minijuegos, y pese a que no dejan de ser una serie de salas que se ubican en diferente orden en cada partida, el diseño de niveles no se llega a hacer demasiado repetitivo, y hay una gran variedad de estancias. Sí el de los enemigos, poco variados, junto a un plataformeo poco pulido, mejorable, el control no es muy fiable. También aunque hay diferentes armas secundarias que consumen maná, a lo Castlevania, se echa de menos tener más armas principales, solo combatimos con espadas, y además con un único tipo de golpe, no estaría mal que se fueran desbloqueando diferentes técnicas o ataques
Estos defectos pueden sonar demasiado graves, junto a unos gráficos con diseño artístico simpático pero no demasiado inspirado, pero a la hora de la verdad no consiguen dañar o manchar todo lo bueno que tiene Rogue Legacy, principalmente su capacidad para ser adictivo hasta extremos peligrosos, gracias a su genial sistema de progresión. Cada vez que elijamos un personaje, con sus pros y sus contras, nos comeremos la cabeza en cómo gastar el dinero, qué mejoras adquirir, que cada vez son más caras, teniendo que sopesar más las decisiones. Es rara la partida en la que no sacamos algo en claro, en la que no conseguimos alguna mejora, y siempre queremos jugar una más.
No se ha aprovechado el año que ha transcurrido desde su lanzamiento en PC para implementar novedades de consideración, aunque sí se han realizado algunos ajustes jugables, para equilibrar la dificultad, se ha añadido el contenido extra que fue llegando a PC mediante parches, como nuevas salas, jefes, rasgos y una nueva clase, y en PS4 utiliza el registro de actividad para mostrar a nuestros amigos tu número de defunciones, los enemigos derrotados, el oro obtenido y otros detalles curiosos. También hay una lista completa de logros, algunos nada fáciles, incluido uno de platino. Y esta versión sí está traducida al castellano, a diferencia de la de PC, que se lanzó solo en inglés.
Una de las mejores compras que puedes hacer este verano para tu PlayStation
Si ya lo tildamos el año pasado como uno de los juegos del verano, ahora en las consolas PlayStation se vuelve a convertir en un título muy recomendable, para estar enganchados un buen número de horas. Un simpatiquísimo roguelike de plataformas y acción que aunque mejorable en algunos aspectos, es divertido y adictivo hasta el final, como deberían serlo todos los buenos juegos. Genial en PS3 y PS4, imprescindible si quieres darle algo de comer a tu hambrienta PS Vita.