Análisis de Guilty Gear Xrd -Revelator- (PS4, PC, PS3)
Los amantes de los juegos de lucha no podemos estar más de enhorabuena en esta generación de consolas. En menos de tres años hemos asistido a la llegada de grandes exponentes del género como son Killer Instinct, Street Fighter V, Mortal Kombat X, Naruto Shippuden: Ultimate Ninja Storm 4 (que aunque no sea el más técnico y equilibrado no deja de resultar muy disfrutable) y BlazBlue: Chrono Phantasma Extend. Y la cosa parece que no va a quedar ahí, ya que Tekken 7 y The King of Fighters XIV están en camino, y NetherRealm ya se encuentra trabajando en Injustice 2, de modo que parece que vamos a tener combates para todos los gustos durante años.
Pero probablemente, nuestro gran favorito hasta la fecha sea Guilty Gear Xrd -SIGN-, un título tan espectacular como técnico y profundo que ha devuelto a lo más alto una saga que muchos echábamos enormemente de menos gracias a un apartado técnico rompedor y a un sistema de combate frenético y con infinitas posibilidades.
Por desgracia, su lanzamiento europeo no fue demasiado bien tratado, llegándonos tarde y mal: solo en digital y a precio de novedad, y sin incluir personajes descargables, los cuales nunca aparecieron en PlayStation Store para que los pudiéramos comprar. Por suerte, esta lamentable situación no se ha vuelto a repetir con Guilty Gear Xrd - REVELATOR-, su primera revisión que al mismo tiempo sirve de secuela argumental, aunque está mucho más cerca de ser una versión "Super" del juego del año pasado que de una segunda parte como tal.
Refinando la perfección
Al tratarse de una actualización "premium", nos encontramos con que tenemos la misma fórmula jugable que en SIGN, es decir, cuatro botones de ataque principales (Puñetazo, Patada, Heavy Slash y Slash) y el botón de DUST, formando así la base que luego nos dará pie a poder poner en práctica todo tipo de movimientos únicos y especiales de cada personaje para desencadenar combos de todo tipo, así como mecánicas tan importantes como los "cancels", los movimientos potenciados, las técnicas definitivas, las paradas, los agarres, etcétera. Y todo ello sin olvidarnos de lo fundamentales que son los medidores de tensión (la energía necesaria para ejecutar ciertas técnicas) y BURST (imprescindible para poder cortar un combo o potenciarnos).
Evidentemente, se ha aprovechado la ocasión para ajustar y equilibrar todo lo posible a la plantilla de personajes, de forma que tendremos que volver a estudiar a nuestros personajes para descubrir sus nuevas posibilidades de combo, qué movimientos son ahora más efectivos y cuáles han perdido utilidad, invitándonos a que aprendamos a jugar con ellos nuevamente.
Hablando de personajes, esta vez tenemos de serie a toda la plantilla del juego original (incluyendo a Leo Whitefang y Elphelt Valentine, los dos descargables con los que nos quedamos sin poder jugar en Europa), así como seis nuevas incorporaciones, una cifra que nos sentimos en la obligación de matizar, ya que no todos estarán disponibles por la simple compra del producto.
De entrada nos encontraremos únicamente con la recién llegada Jack-O y con el regreso de los veteranos Jam y Johnny, mientras que si reservamos el juego nos ofrecerán de forma gratuita a Kum Haehyun. Si no nos aprovechamos de la promoción, nos tocará pagar por él. Por otro lado, Raven podrá ser desbloqueado tanto jugando como pagando por él. Finalmente, la última combatiente, Dizzy (una de las grandes favoritas de la saga), todavía no está ni siquiera disponible y llegará como DLC en un futuro.
Considerando la cantidad de novedades que incluye el juego respecto a SIGN por los 54,95 euros que cuesta, y que las más jugosas son precisamente la llegada de los nuevos combatientes, se nos antoja como una decisión muy poco acertada por parte de Arc System Works el añadir personajes a través de contenidos descargables de pago y que no estén todos disponibles desde el primer día, ya que por su precio de base solo nos aseguraremos cuatro de ellos.
Independientemente de las políticas de mercado, lo cierto es que los cuatro que hemos podido probar nos han encantado. Todos ellos aportan algo único y especial al juego, con unos estilos de combate muy marcados, tremendamente originales en ciertos casos y con los que nos lo hemos pasado en grande descubriendo sus secretos y aprendiendo a sacarles partido a su ingente cantidad de posibilidades.
Jack-O se ha convertido rápidamente en una de nuestras nuevas favoritas de la saga, gracias a su peculiar estilo de juego, consistente en colocar generadores de enemigos que van subiendo de nivel (y que se pueden arrojar) mientras realizamos combos de todo tipo desde múltiples distancias y presionamos a nuestro rival para no dejarle reaccionar. Además, su diseño y sus animaciones son todo un espectáculo (muy cómico en ocasiones) digno de ver.
Por otro lado, el reencuentro con Jam y Johnny no podría haber sido mejor. La primera tiene que ir obteniendo cargas para desencadenar sus movimientos más poderosos, obligándonos a jugar con mucha cabeza nuestras cartas, mientras que el segundo es un poderoso luchador eminentemente cuerpo a cuerpo que cuenta con unos proyectiles perfectos para iniciar combos y defenderse en las largas y medias distancias.
En lo que respecta a Raven, se trata de un combatiente tremendamente ágil y con un estilo de combate basado principalmente en el lanzamiento de unos proyectiles móviles realmente molestos para sus enemigos como este esté siendo controlado por manos expertas. Por desgracia, no hemos tenido la ocasión de probar ni a Kum Haehyun ni a Dizzy (esta última por motivos más que obvios, ya que no está ni terminada), por lo que no podemos ofreceros nuestras impresiones sobre ellos.
Entrando en lo que son sus modos de juego, no nos encontramos tampoco grandes novedades, ya que no se ha incluido ninguno que sea realmente nuevo. De entrada, para un jugador tenemos un divertidísimo y entretenidísimo tutorial para aprender las bases, así como desafíos y un completo Modo Entrenamiento donde pasaréis un gran número de horas a poco que busquéis mejorar. También regresa el Modo Arcade con el interesantísimo añadido de que ahora la dificultad se adapta a cómo juguemos, subiendo cuando ganamos y bajando cuando perdemos.
El Modo M.O.M, donde personalizar y mejorar a nuestros personajes equipándolos con medallas también está de vuelta y tampoco falta a la cita el Modo Historia, continuando desde el mismo punto en el que lo dejó SIGN (eso sí, es recomendable jugar primero al Modo Arcade). Aunque el argumento de la saga nos parece muy interesante, nos ha vuelto a decepcionar enormemente que esta modalidad no nos permita jugar en ningún momento, de modo que volveremos a limitarnos a ver una película sin poder librar batallas.
También se ha añadido un nuevo minijuego de pesca donde podremos obtener muchos coleccionables, como elementos para personalizar nuestro perfil o colores para los personajes, complementando así la habitual galería de extras donde podremos invertir nuestro dinero a cambio de todo tipo de desbloqueables, como personajes jugables, packs de voces o canciones.
El multijugador online funciona genial y las únicas partidas en las que hemos sufrido lag ha sido por motivos de conexión y no porque el código de red funcione mal. Lo mejor de esta modalidad es que se han añadidos unas renovadas salas para hasta 64 jugadores con una presentación impecable a modo de salón recreativo, permitiéndonos que interactuemos con otros usuarios y nos retemos unos a otros a disputar combates. Como era de esperar, podremos jugar tanto por diversión como partidas igualadas con las que intentar ascender puestos en los marcadores.
Gráficamente volvemos a estar ante el mismo portento visual que supuso su predecesor. Todo está modelado en 3D, incluidos los propios personajes, aunque la presentación a modo de juego de lucha 2D emulando las animaciones y el estilo de las entregas clásicas de la saga hace que esto nos resulte imperceptible más allá de cuando se producen giros de cámara para resaltar los momentos más espectaculares.
Además, el cel shading que se ha usado es una auténtica pasada y en todo momento nos parecerá el estar viendo un anime en vez de un juego de lucha, y todo ello sin olvidarnos de lo buenas que son todas las animaciones de los personajes y la cantidad de efectos gráficos de calidad que ponen en pantalla. Un auténtico festín visual. Los escenarios están un poco por debajo del resto del conjunto, aunque lucen bastante bien y tienen una gran dirección artística. Lo malo es que hay muy pocos nuevos y la mayoría son revisiones de los del anterior juego, pero con otra iluminación.
Por último, tenemos una banda sonora que reutiliza casi todo los temas de SIGN (lo cual no nos parece mal, ya que esta es de lo mejor que hemos escuchado en el género) y añade unas pocas canciones de una calidad sobresaliente, ambientando cada batalla de un modo sin igual. Por otra parte, decir que los efectos son bastante buenos y el doblaje esta vez nos llega únicamente en japonés, con textos en inglés.
Conclusiones
Guilty Gear Xrd -REVELATOR- es uno de los mejores y más completos juegos de lucha que podemos encontrar actualmente. Si te perdiste SIGN y te gusta el género, se trata de una compra imprescindible que no puedes dejar escapar, aunque si este no es tu caso y te hiciste con su predecesor en su momento, la cantidad de novedades que introduce nos parecen muy escasas para el precio por el que se vende, por lo que nuestra recomendación es que os hagáis con él solo si sois jugadores muy competitivos y tenéis pensado luchar por internet durante los próximos meses, ya que es a quienes va dirigida esta actualización. De otro modo, quizás prefiráis esperar a una rebaja antes de dar el salto.
Hemos realizado este artículo con una copia digital de la versión final de PS4 que nos ha proporcionado BadLand Games.