Análisis de Zone of the Enders HD Collection (PS3, Xbox 360)
No conseguimos recordar con exactitud qué colección de juegos fue la primera en formar parte de uno de estos recopilatorios en alta definición, pero la cuestión es que están de moda. Funcionan bien en ventas, son sencillos de hacer y gustan al público, lo cual los convierte en productos ideales.
También, y como suele ser habitual, una gran idea es proclive al desgaste, y por ello hemos pasado de decisiones acertadas como la optimización de ICO y Shadow of the Colossus a lanzamientos más cuestionables como el de la primera y tercera parte de Dragon Ball Z Budokai.
Pero bueno, no queremos iniciar una discusión sobre qué juegos merecen o no una revisión.
Hoy tenemos con nosotros el recopilatorio de los dos Zone of the Enders, una saga que comercialmente pasó sin pena ni gloria por PlayStation 2, y que pese a haber sido creada por Hideo Kojima, el padre de Metal Gear, no tuvo un éxito acorde con su calidad. Si bien es cierto que el original no fue un juego sobresaliente, su secuela, bautizada con la coletilla "The 2nd Runner", gozó de al menos un apartado técnico apabullante, de los que te hacían plantearte la veracidad de ese espectáculo de luces y partículas funcionando a 60 frames por segundo.
Para los que no sepan muy bien de qué van estos juegos, podríamos sintetizarlo como una mezcla entre un shooter de mechas en tercera persona, como los Armored Core o el olvidado Omega Boost de Polyphony Digital, y un juego de Kojima, con el cuidado habitual que tienen sus proyectos en lo relativo a guión y desarrollo de personajes.
Se ha contado con High Voltage Software en la programación, y como motivación extra para el usuario, se ha incluido la demo de Metal Gear Rising: Revengeance, que podéis ver aquí, al estilo de lo que se hizo precisamente con el ZOE original y la demo de Metal Gear Solid 2. Así que ahora que conocéis el cómo y el porqué, vamos a repasar brevemente cada uno de los dos títulos y a contaros qué ha mejorado y -lamentablemente- empeorado con el lavado de cara, porque no todo ha sido para bien.
Zone of the Enders, el origen
El en su día injustamente conocido como el "juego de la demo de MGS 2", fue todo un soplo de aire fresco. Se trató de un producto con unos valores de producción altísimos, rivalizando en dirección artística con los mejores animes de mechas, como el archiconocido Gundam, y un argumento sólido que colocó los cimientos para su genial segunda parte.
La historia de este ZOE gira en torno a Leo Stenbuck, un quinceañero atormentado que sobrevive como puede en Antilia, una colonia que orbita en un satélite de Júpiter. Después de unos desagradables sucesos donde sus amigos mueren aplastados por un robot, Leo huye hasta caer por accidente en la cabina de un Orbital Frame conocido como Jehuty. Dentro de este mecha, el joven protagonista descubre que tiene un gran potencial para el combate, que aprovecha para enfrentarse al ejército BAHRAM.
Aunque aparentemente sea un guión sencillo, si por algo destaca ZOE es por lo bien explicado que está todo. Es un juego con marcado sello Kojima, con un ritmo y una narrativa similar a los Metal Gear Solid y un cuidado exquisito para explicar la trama mediante secuencias y conversaciones. De hecho, uno de los detalles más entrañables que va madurando conforme se desarrolla la aventura es la relación entre el protagonista y ADA, la inteligencia artificial que opera dentro de Jehuty. Esta relación recuerda inevitablemente a John Connor y su protector en la segunda parte de Terminator, humanizando poco a poco al impecable androide.
Jugablemente ZOE es muy intuitivo, con un control fácil que permite enfrentamientos ágiles y frenéticos como en cualquier buen beat’em up, y unos jefes finales que necesitan un pequeño estudio desde lejos para reconocer sus puntos débiles y cómo atacarlos.
El principal problema de este juego radica en su monotonía, ya que su desarrollo es demasiado simple. Es cierto que el control ha envejecido bastante bien, sufriendo alguna que otra tara con la cámara cuando intentamos recoger objetos o enfocamos un combate contra varios blancos, pero sigue siendo igual de repetitivo que en su día. Hay pocos ataques y variedad de enemigos, por lo que deambularemos de un área a otra constantemente para derrotar a los mismos mechas del primer escenario, con la salvedad de que van subiendo de nivel a la vez que nosotros.
Zone of the Enders es un juego notable en muchos apartados y limitado en otros, y como decimos, pone la primera piedra para una segunda parte que es la principal culpable de que se espere con muchas ganas el anuncio de una nueva entrega.
The 2nd Runner, o cómo deberían ser todas las secuelas
Nos recibe con un "Produced by Hideo Kojima" bien grande, augurando algo importante, como en las mejores galas. Y no nos equivocamos, porque esta secuela de ZOE es un ejemplo de cómo se hace un videojuego.
Argumentalmente cambiamos a Leo por Dingo Egret en un contexto similar debido a lo accidental del encuentro con Jehuty, con el ejército BAHRAM de nuevo entrometiéndose y unos secundarios con mayor presencia. Pero lo mejor de todo es que la historia fluye mucho mejor que en el original gracias a un ritmo vertiginoso. Si en el primer ZOE se recurría demasiadas veces a la vista en primera persona desde la cabina del Orbital Frame, aquí se intercalan numerosas secuencias anime que le dan un aire mucho más entusiasta y frenético al argumento.
Ya no solo mejora la narrativa, sino que todos los aspectos dan un salto cualitativo que en su día nos dejó con la boca abierta. Primero, el apartado técnico, que multiplica por cien el número de enemigos en pantalla y añade efectos Cell Shading para las explosiones. Y segundo, la jugabilidad, más rápida y acorde con el ritmo general del juego.
También por supuesto se añadieron más armas, se aumentó la zona de juego y se trabajó con más ahínco en hacer de esta secuela un producto más completo, alcanzando un nivel muy alto que por fin le dio la personalidad necesaria para colgarse el título de juego de culto.
A día de hoy sigue siendo un juego tan divertido y genial como antaño, donde destacan desde los enfrentamientos con decenas de unidades al estilo REZ, marcando objetivos y disparando la carga de misiles, hasta las impresionantes luchas contra los jefes finales.
De hecho, si el primer ZOE no ha envejecido nada mal, éste lo ha hecho aún mejor, y consigue que nos quedemos con ese sabor de boca que dejan las grandes producciones japonesas, actualmente de capa caída.
Un lavado de cara mejorable
Todos nos alegramos por el rescate de una saga tan particular como esta, pero podría haberse hecho mejor. No podemos quejarnos de sus extras, como los obligados logros y trofeos, el manual de instrucciones integrado, la intro exclusiva creada por el estudio Sunrise o la ya nombrada demo de Metal Gear Rising. Si nos quejamos es por los problemas técnicos que tiene el juego.
Tenemos como precedente la remasterización de los primeros Silent Hill y su irregular apartado técnico, con algunos detalles bochornosos. Vale que en este ZOE no se llega a esos niveles, pero sí encontramos bajones constantes en la tasa de frames, que en la versión de PlayStation 3 se sitúa por debajo de los 30, algo inadmisible para un juego que fluye con soltura en su predecesora a 60 fotogramas por segundo. Además de estas bajadas existen parones repentinos (ya presentes en el original) en la acción, pequeñas congelaciones en la imagen que son bastante molestas. Sucede más en el primer juego, pero igualmente estropean la remasterización.
Evidentemente, las texturas han sido mejoradas, y aunque algunos escenarios parezcan muy vacíos (sigue siendo un juego de la anterior generación), luce bien y suena mejor, ya que la banda sonora sigue siendo tan buena como siempre, con su electrónica machacona para los combates y temas cantados como "Beyond the Bounds", todo un clásico. Un aspecto importante que hay que comentar es que los dos juegos llegan con subtítulos en castellano, algo que no ocurrió en su día con el primer ZOE.
Como conclusión, este Zone of the Enders HD Collection es un buen producto, pero se ve paliado por esas carencias en el apartado técnico que hemos mencionado. Viene con unos extras suculentos y una edición limitada que incluye la banda sonora y un libro de ilustraciones. Así que para todo aquel que quiera descubrir el motivo por el que se suspira por una tercera parte, o para aquellos que quieran recuperar sensaciones, este Collection es sin duda una buena compra, sobre todo porque llega a nuestro país a precio reducido.