Análisis de Sonic & All-Stars Racing Transformed (PS3, Xbox 360, PC)
Los amantes de los juegos de karts están de enhorabuena, en menos de un mes nos van a llegar tres propuestas de mucha calidad, y cada una ofreciendo algo distinto. El primero en salir ha sido LittleBigPlanet Karting, exclusivo de PlayStation 3, que como mayor baza cuenta con la posibilidad de crear circuitos y disfrutar los realizados por otros usuarios, y hoy llegan a las tiendas F1 Race Stars, un juego notable como os explicamos en su análisis y que cuenta con el reclamo de la popular Formula 1, y este Sonic & All-Stars Racing Transformed, con todo el carisma que aportan los personajes de Sega.
Se trata de una continuación directa de Sonic & Sega All-Stars Racing, un juego de 2010 desarrollado por los ingleses Sumo Digital y que parecía un clon más de Mario Kart solo que con Sonic y sus amigos, y al final resulto ser un divertido título de carreras, con bastante personalidad y que triunfó entre el público.
Ahora llega su secuela que como mayor novedad trae la transformación de los vehículos, corriendo por tierra, mar y aire, algo que pudimos ver el año pasado en Mario Kart 7, aunque aquí se explota más y mejor.
Sonic, Tails, Knuckles, Amy Rose, Metal Sonic y Doctor Eggman y Shadow de la saga Sonic; AiAi y MeeMee de Super Monkey Ball, Amigo de Samba de Amigo, Beat y Gum de Jet Set Radio, B.D. Joe de Crazy Taxi, Gilius Thunderhead de Golden Axe, Vyse de Skies of Arcadia, Joe Musashi de Shinobi, Ulala y Pudding de Space Channel 5, Nights y Realaa de Nights into Dreams, Ralph de la nueva película de Disney que se estrenará estas Navidades, Rompe Ralph!, y Danica Patrick, una piloto estadounidense de NASCAR, que todavía no sabemos muy bien qué pinta aquí, son los personajes que podemos controlar, además de nuestro avatar en la versión de Xbox 360 y las consolas de Nintendo.
No todos están disponibles desde el principio, y los tendremos que ir desbloqueando en el modo Tour Mundial. Cada uno cuenta con un vehículo con características propias, indicadas en velocidad, aceleración, manejo, turbo y All Stars –un ítem especial, el mejor de todo el juego-. Las diferencias entre unos coches y otros son evidentes, aunque con el transcurso de las carreras ganamos puntos de experiencia y desbloqueamos nuevas configuraciones. Un total de siete: la estándar, equilibrada, manejo, turbo, aceleración, velocidad máxima y una especial llamada modificación de consola. Así podremos, si no queremos cambiar de personaje, adaptarnos a todo tipo de carreras.
La jugabilidad es muy sencilla, como corresponde a este tipo de juegos de velocidad arcade con karts. Con el gatillo derecho aceleramos, con el izquierdo derrapamos/frenamos, y con un par más de botones usamos los objetos y el retrovisor. También tenemos el stick derecho con el que hacemos acrobacias en el aire, algo bastante importante, ya que si realizamos una o varias acrobacias correctamente, al pisar el suelo activaremos un turbo automático, al igual que con los derrapes. En general se controla muy bien, aunque no nos parece tan preciso como otros títulos de karts que alcanzan la excelencia en este aspecto.
Como bien sabéis los aficionados a la saga Mario Kart y de juegos similares, la diferencia en las carreras la marcan los derrapes y los turbos que nos proporcionan, así como los ítems que recogemos, que nos pueden amargar una recta final o bien dar un vuelco a una carrera que creíamos perdida. Aquí tenemos unas bolas de hielo que se pueden usar para golpear e incluso congelar a los rivales, además de destruir obstáculos, los peces globos que dejamos a modo de minas, un cohete de fuegos artificiales, un guante que se coloca en la parte trasera del vehículo y que evita golpes, un tornado que arrasa con el rival más cercano, un coche bomba teledirigido, o el All Stars, el mejor ítem del juego, que nos hace invencibles y más rápidos durante un valioso tiempo. Casi todos se pueden lanzar hacia adelante o hacia atrás y como veis no son demasiado originales ni nada que no hayamos visto antes, aunque sí nos ha gustado que no desequilibran demasiado las carreras, y son menos injustos que por ejemplo en Mario Kart.
La diferencia en la jugabilidad respecto a otros juegos de karts y la primera entrega de esta saga la pone el subtítulo Transformed, ya que durante las carreras al pasar por unos arcos azules nuestro vehículo se transforma, en lancha, coche o avión. Estos momentos están muy bien resueltos y ofrecen las mismas posibilidades que cuando corremos sobre tierra, también se puede derrapar en el agua y en el aire, aunque esto último es un tanto raro. Y no solo los vehículos se transforman, también lo hacen los circuitos, lo que en la primera vuelta era un puente, puede que en la segunda vuelta se haya destrozado y tengamos que volar por el aire o navegar por el agua, lo que le da mucho dinamismo y espectacularidad a las carreras.
Cuando volamos no debemos perdernos ninguno de los portales que nos proporcionan turbo, e intentar coger algún ítem, aunque al volar en cualquier dirección, se hace complicado dar a los rivales. Cuando vamos por el agua entra en juego la dinámica de esta, ya que hay olas y podemos aprovecharlas para dar un salto, realizar una acrobacia, y que al caer activemos un turbo. Las tres situaciones –tierra, mar y aire- funcionan muy bien en una misma carrera, y se mezclan con naturalidad, haciendo las carreras muy espectaculares. Hay circuitos con mucha agua, otros en los que vamos un gran tiempo por el aire, pero en general están muy bien compensadas las tres circunstancias.
Los circuitos son sin duda uno de los puntos fuertes del producto, y donde se realizan los mejores homenajes al universo Sega, algo que encantará a los más nostálgicos. Hay varios circuitos basados en juegos de Sonic, uno precioso de Panzer Dragoon, Jet Set Radio, After Burner –uno de nuestros favoritos-, Super Monkey Ball, Samba de Amigo, Skies of Arcadia –muy espectacular- , del olvidado Billy Hatcher, Shinobi, Nights, Burning Rangers, House of the Dead y Golden Axe, que no nos cansamos de correr gracias a su genial música.
Como ejercicio de nostalgia los circuitos funcionan a la perfección, no tanto otros aspectos del juego como los personajes, un poco desaprovechados y con una selección un tanto cuestionable, apenas sin detalles o características propias, como podrían ser ataques personalizados, o un pequeño modo historia que relacionara sus historias. Tampoco nos premian con artes conceptuales, o un poco de historia de Sega y de los juegos y personajes que aparecen, y creemos que en esto flaquea bastante, y es algo a lo que le se podría haber sacado mejor partido.
El modo principal para un jugador es Tour Mundial, cinco tours con distintas competiciones en las que podemos ganar hasta tres estrellas en cada una, dependiendo de si jugamos en fácil –velocidad clase c-, normal –clase b- o difícil –clase a-. Con estas estrellas, desbloquearemos nueva carreras, personajes y eventos, y ya os decimos que no es sencillo acabarse muchas de las competiciones en tres estrellas, en nivel difícil. Lo bueno de este modo es que no solo corremos carreras, sino que tenemos todo tipo de competiciones que lo hacen muy variado.
Desafío derrape, en el que tenemos que pasar por todos los puntos de control antes de que se acabe el tiempo, ganando segundos extra derrapando en determinadas zonas, Versus, enfrentamientos uno contra uno en los que tenemos que derrotar a varios rivales seguidos, Desafío turbo, una carrera contrarreloj en la que realizando turbos detenemos el crono, ¡Ataque de tráfico! en el que hay que esquivar oleadas de vehículos y pasar por cada punto de control a tiempo, Carrera de anillos, pasar por todos los anillos para no perder tiempo, Carrera de combate, una carrera de supervivencia en la que solo contamos con tres vidas, Persecución, un enfrentamiento contra un tanque a base de misiles, o Sprint, batir un tiempo determinado en una vuelva.
Como veis una gran variedad de carreras dentro de Tour mundial, que para completar al 100% nos tiraremos bastantes horas, ya que no es fácil superar todos los retos en difícil. Luego tenemos otros modos más clásicos como Gran premio, una serie de copas con cuatro carreras cada una, al estilo Mario Kart, Crono, que consiste en batir las mejores marcas de cada circuito, o Carrera única, simplemente echar una carrera en cualquiera de los circuitos desbloqueados.
Pero como siempre pasa en este tipo de juegos, el gran protagonista es el multijugador, ya sea online hasta para 8 jugadores-, como local a pantalla partida para cuatro jugadores. Podemos jugar carreras, Arena de combate, una lucha con ítems en una arena, Carrera de combate, en la que contamos con tres vidas para llegar a la meta, Atrapa a los Chao, una especia de captura la bandera dentro de una arena, y Carrera turbo, una carrera sin objetos, pura conducción.
Estamos ante un juego de karts muy robusto, sólido y completo; un buen número de personajes y circuitos, muchos tipos de carrera, un buen multijugador tanto local como online, y además sus circuitos son muy imaginativos, y el hecho de ser tan pronto un coche como un avión o una lancha le da al desarrollo de las carreras mucho dinamismo y variedad. Puede que no tenga una jugabilidad tan precisa como un Mario Kart, algo que notarán los más expertos, y en ocasiones puede ser un poco caótico, pero es divertido como el que más, y encima tiene bastante personalidad.
Técnicamente ya os comentamos en anteriores impresiones que la fluidez de la acción dejaba mucho que desear, un aspecto que tendría que ser corregido y mucho en el producto final. Pues por suerte así ha ocurrido, y tiene una tasa de imágenes por segundo bastante estable, que pese a alguna pequeña caída, nunca llega a estropear la jugabilidad. Nos hubiera gustado que fuera a 60 fps claro, algo que le sienta muy bien a cualquier arcade de velocidad, pero no es así, y tenemos que valorar que al menos se mantiene casi siempre estable. También debemos destacar que aunque juguemos con cuatro jugadores a pantalla partida la fluidez no se resiente, un gran trabajo en este aspecto.
Es colorido, es bonito, y algunos circuitos son muy espectaculares. En general los modelados son muy simplones, así como los elementos de los propios circuitos y todas las texturas, y tiene un antialising mejorable, pero es muy espectacular como cambian los escenarios en cada vuelta, destruyéndose diferentes partes, y por ejemplo las físicas del agua están bastante conseguidas. En el lado más negativo, los largos tiempos de carga antes de cada carrera, por lo que recomendamos y mucho su instalación en el disco duro.
Cuenta con voces en castellano, mejor dicho voz, la del narrador de las carreras, un tanto estridente pero simpática al fin y al cabo, y la música es uno de los aspectos más destacados de todo el juego, ya que ha corrido a cargo de Richard Jacques, el prestigioso músico británico conocido por haber participado en algunas de las mejores bandas sonoras de los juegos de Sega, como Sonic R, Headhunter o Metropolis Street Racer. En esta ocasión ha cogido los temas más representativos de los juegos originales donde transcurren los circuitos, y ha realizado unos remix casi siempre acertados, por ejemplo el de Golden Axe es sencillamente genial. Como ya hemos dicho el juego como homenaje a Sega flaquea, y echamos de menos la posibilidad de desbloquear y escuchar la banda sonora, o incluso los temas clásicos para recordar cómo eran.
Un impecable juego de karts
Sonic & All-Stars Racing Transformed es exactamente lo que se espera de este tipo de juegos; una jugabilidad sencilla, precisa, adictiva y divertida, muchos circuitos y personajes, modos de juego variados, un buen multijugador, un aspecto colorido y simpático, y buenas melodías que amenicen las carreras. Nos hubiera gustado que fuera mejor como homenaje a Sega, algo que solo cumple en el caso de los circuitos, o que incluyera alguna especie de modo historia, pero realmente como juego de karts o arcade de velocidad cumple y con nota. Y por si fuera poco sale a la venta desde el primer día a un precio reducido de 39,95 € en Xbox 360 y PlayStation 3, que lo hace muy, muy recomendable, sobre todo si tenemos pensado jugar junto a unos amigos o familiares.