Análisis de FIFA 14 (PS3, PSP, PS2, PC, PSVITA, Wii, Nintendo 3DS, Xbox 360)

FIFA llega una vez más a las tiendas como favorito en su particular y épica competición contra Pro Evolution Soccer por ser el mejor juego de fútbol del mercado, y de nuevo gana el partido, aunque con una edición que es muy continuista respecto a la del año anterior. FIFA 14 tiene pocas novedades y muestra algunas facetas algo envejecidas, pero es más divertido que nunca gracias a las mejoras hechas en la jugabilidad y los disparos a puerta.

Desde FIFA 09, edición revolucionaria que le hizo ganarse el favor del público y crítica, FIFA ha ido mejorando cosas, y poco a poco ha compaginado su excelente simulación con un carácter más aleatorio e imprevisible, intentando hacerse menos simulador y más juego, algo que le faltaba y que el año pasado intentó corregirse, introduciendo un factor de azar en todos los lances del partido. Esta edición de 2014 perfecciona ese cambio incluido en el juego del año pasado, logrando que los pases y controles tengan ese punto imperfecto, pero sin las estridencias de FIFA 13, y mejorando los tiros y la física del balón, una asignatura pendiente que la saga llevaba un tiempo arrastrando. El resultado es el FIFA más divertido de la generación, y probablemente el mejor, aunque se nota que no hay demasiadas novedades más, ya que el equipo está comenzando a centrar sus esfuerzos en dominar desde ya el fútbol de las siguientes consolas.

Un sistema de juego que llega a su culmen

A lo largo de estos años triunfales de FIFA, EA ha gestionado muy bien el éxito de su juego de fútbol y añadido novedades cada año que iban subiendo el listón y realizando pequeños cambios, como dirigiendo el rumbo de la saga hacia su objetivo sin que cada título supusiese una ruptura con el anterior. FIFA 14 mantiene esta senda, y aunque no incluye ninguna novedad muy promocionable aparte de los nuevos tiros (llamados, con bastante gancho, "Pure shots"), sí que perfecciona las facetas nuevas de años anteriores. El Impact Engine está más pulido que nunca, tras su espectacular debut en la edición 12, y se nota mucho más la inercia y la velocidad en carrera cuando los jugadores chocan, y el sistema de aleatoriedad "control al primer toque" del año pasado se beneficia de este año extra de desarrollo, mostrándose ahora muy equilibrado.

Esto significa que esa aleatoriedad ya no tiene "picos", como el año pasado, cuando a veces un balón disputado se elevaba varios metros, o un tiro salía exageradamente mal. Ahora es mucho más razonable, y en vez de resultar eso mismo, un sistema de aleatoriedad impuesto, lo que consigue es darle mayor realismo a las jugadas ya que esas imperfecciones son ligeras y esperables, y no tan chocantes. Hacen el juego mucho más divertido, ya que muchas veces una jugada nos saldrá bien o será un chasco gracias a ese control sutil que logramos hacer, o a esa lucha por la pelota que se decide por centímetros.

Con todas las facetas de juego depuradas y un sistema de tiros con el mejor balón que ha tenido la saga FIFA, quizás el cambio que más se nota está en el control. Se han pasado los regates al stick derecho, sin tener que pulsar un botón para hacerlos y ahora el botón L2/LT sirve para ir más lento y proteger el balón, con el R2/RT para correr,logrando como comentábamos hace unas semanas un curioso símil con los juegos de coches. El ritmo de juego ha cambiado, pero realmente no a la hora de correr o pasar el balón, sino sobre todo cuando lo estás controlando. Los jugadores ya no giran y se mueven tan rápido, no es tan fácil maniobrar en corto ni darse la vuelta, y se nota mucho más cuando un jugador es torpe.

También se nota más cuando es una estrella. El afán de EA Sports por darle a los mejores jugadores un tratamiento especial hace que Cristiano, Messi, Falcao y demás jugadores top tengan animaciones características, algo que siempre es de agradecer y se disfruta viendo, tanto a la hora de correr y tirar como en las celebraciones de los goles, y que sus habilidades se noten más que nunca en el terreno de juego. En vez de hacer a los demás jugadores peores, los buenos jugadores son verdaderamente desequilibrantes y pueden decidir partidos.

Poca innovación y novedades

En conjunto, a nivel jugable FIFA es más divertido que nunca, pero también es la entrega que menos cambios tiene respecto a su edición anterior. Mejora en todo a FIFA 13, y se da ese curioso efecto anual al comparar el FIFA con la versión del año pasado, que ésta te parece malísima. Pero se nota que EA Sports ha asumido pocos riesgos, que la nueva "guerra" está en PlayStation 4 y Xbox One, y que los FIFA de PS3 y Xbox 360 van a pasar más temprano que tarde a ese estado de "versión definitiva y permanente" que cambia de jugadores y músicas cada año, y poco más, en el que está la versión PS2 (que todavía existe y vende) desde hace más de un lustro.

Esto no es necesariamente malo, ya que el juego es difícilmente mejorable en lo jugable, pero se echan en falta novedades en el resto de los modos de juego y en el sistema de tácticas. Este último sigue igual que siempre, con el "micromapa" del campo que nos enseña a nuestros jugadores de diferentes colores según sean defensas, centrocampistas o delanteros, y que desde hace tranquilamente una década necesita una revolución. Los modos de juego también se mantienen más o menos igual que en la edición 13, aunque todo el producto se beneficia de cambios en los menús, y esto hace que modalidades como el Modo Carrera sean más fáciles de jugar. En este último destaca un nuevo sistema de ojeadores, llamado "Red global de traspasos", que intenta que busquemos promesas en diferentes países del mundo para descubrir grandes jugadores (y grandes gangas).

A nivel visual FIFA 14 sigue manteniéndose fuerte pero se nota cierto envejecimiento, sobre todo si se compara con el salto que ha dado Pro Evolution Soccer con su nuevo motor gráfico. FIFA 14 no se ve mal ni mucho menos, sigue teniendo un genial sistema de animaciones, un motor físico robusto y, esta vez, una física del balón más realista. Pero la mejora respecto al juego del año pasado es más difícil de percibir que nunca, y se nota que esta generación ya no da para más en FIFA, y que los esfuerzos de los desarrolladores se centran en el nuevo motor EA Ignite para la próxima generación de consolas. Sigue llamando la atención el gran nivel de detalle y de trabajo en los estadios, habiendo más recintos que nunca, y lo bien que se combinan las animaciones, sin saltos abruptos.

El apartado sonoro sigue contando con una nutrida banda sonora de temas actuales, y el gran equipo de comentaristas que de nuevo hacen gala de un extensísimo repertorio, no solo para narrar las jugadas con bastante precisión, sin que se noten frases genéricas, sino también dando un poco de contexto a cada equipo e incluso a la rivalidad que pueda existir entre ellos. Este repertorio de Manolo Lama, Paco González y compañía se combina con una gran ambientación de los estadios, con los cánticos de las aficiones reaccionando a lo que sucede en el terreno de juego.

Una edición demasiado continuista, pero tan buena como siempre

Juzgar FIFA 14 es complicado, porque por una parte el juego es mejor que la edición del año pasado, y de nuevo el mejor juego de fútbol existente, pero por la otra destaca la poca cantidad de novedades que han añadido en la versión de este año, algo que quizás decepcione a muchos. Los fans de FIFA, los que pasan horas y horas a lo largo del año jugando con FIFA Ultimate Team o compitiendo online, tienen de nuevo una compra obligada, ya que se van a encontrar con el FIFA más pulido y divertido de la generación, lo más cercano a una "versión maestra" de FIFA para PlayStation 3 y Xbox 360.

En cambio, los que se compran un juego de fútbol para jugar de vez en cuando, sin pasar tantas horas con él a lo largo del año, quizás tengan menos motivos para hacerse con esta edición de FIFA. Es un juegazo de fútbol, pero muy parecido al anterior, y no hay ninguna novedad rompedora en la jugabilidad ni en los modos de juego. Se nota, y mucho, que la vista de EA Sports está puesta en el FIFA de nueva generación, y esta época dorada de FIFA comienza a despedirse con su mejor versión hasta la fecha, pero con menos innovación que nunca.