Análisis de F1 Career Challenge (PS2, Xbox)
La Fórmula 1 está más de moda que nunca en nuestro país, a raíz de la explosión de la joven promesa (podríamos decir que ya consagrada) que es Fernando Alonso. Resulta inevitable, pero basta con que algún deportista español logre algún triunfo para que inmediatamente pase a ser el centro de atención de la prensa del país durante bastantes días. Es algo que a los fans de ese deporte en concreto (en este caso la fórmula 1) no gusta demasiado, pues de golpe se ven inundados de aficionados que poco antes casi ni sabían lo que eran estas carreras de bólidos ultra-veloces. Sea como fuere, la F1 está de moda, y eso es lo que cuenta. Y en F1 Career Challenge, el nuevo juego de EA Sports, podremos controlar a Alonso, sí, aunque no en la escudería Renault de la que actualmente forma parte, pues uno de los aspectos que hay que resaltar del juego es que no incluye la presente temporada 2003, para desilusión de muchos. ¿Por qué? Pues simplemente porque ésta pertenece a Sony, quien con Formula One 2003 supone el principal rival del juego que nos ocupa hoy, que no goza de los pilotos oficiales de esta temporada, pero propone una apuesta original que puede atraer a muchos seguidores.
Dicha característica es la inclusión de las cuatro últimas temporadas oficiales del campeonato del mundo de fórmula 1, por lo que además de poder pilotar a Alonso a bordo de su Minardi, también podremos controlar a los otros dos pilotos españoles (catalanes) que actualmente ya no están en primera línea, como son Marc Gené y Pedro Martínez de la Rosa. En cualquier caso, encontraremos todos los pilotos que han pasado por el circuito las cuatro últimas temporadas, pues el juego sí dispone de la licencia de éstas. Y la propuesta más original que F1 Career Challenge nos ofrece es la posibilidad de llevar a través de estos cuatro años a un piloto novato (que podremos crear a nuestra medida) a convertirse en el flamante campeón del mundo: ni más ni menos que el modo Career (Carrera), que supone el pilar básico sobre el cual el juego se sostiene. Dicho modo empieza con la creación de un personaje, con la elección de su aspecto, de su casco y de su atuendo.
Acto seguido, nos ponemos al mando de un monoplaza para realizar las pruebas que nos llevarán a convertirnos en un piloto oficial de fórmula 1 (si es que algún equipo nos ficha). Dichas pruebas están estructuradas en diferentes apartados, que debemos ir superando lo mejor que podamos. Cuando las hayamos completado todas (algo que costará bastante, puesto que algunas de ellas son francamente difíciles), llegará el momento de la verdad: diversas escuderías harán una oferta por nosotros, y deberemos aceptar la que más nos guste. Lógicamente la calidad de las escuderías que nos propongan irá relacionada con nuestro nivel al completar las pruebas anteriores, de tal manera que si nuestro rendimiento es magnífico podremos empezar en un equipo relativamente bueno, pero si por el contrario superamos las pruebas tras muchos intentos estaremos relegados a los equipos con menos presupuesto y recursos. De cualquier manera, lo importante es que ya seremos pilotos oficiales de fórmula 1, y es aquí donde empieza el juego de verdad.
Así pues, primero debemos poner a prueba el coche, y luego empezará ya el campeonato, en su temporada 1999 y con nosotros como principal novedad. A través de una PDA nuestro equipo nos irá informando de lo que se espera de nosotros; lógicamente no empezarán exigiéndonos que acabemos primeros, sino que la dificultad y exigencia irá aumentando con el tiempo. Además, si mejoramos notablemente, otros equipos harán ofertas por nosotros, lo que sin duda nos ayudará a conseguir nuestra gran meta: el campeonato del mundo. La simulación en este sentido será total, habiendo de disputar los entrenamientos, los entrenamientos oficiales y, cómo no, la carrera, en todos los circuitos del campeonato. La única pega es la excesiva "frialdad" del modo, ya que toda nuestra comunicación con la escudería será a través de una simple PDA, cuando en realidad se podría haber exprimido mucho más el camino de ser un novato a la gloria en cuatro años. Aunque, en definitiva, nos muestra como para lograr algo hay que trabajar muy duro, no acaba de ser todo lo perfecto que la idea debería haber sido.
En cuanto a los demás modos de juego, son escasos hasta el punto de reducirse a dos: la Carrera Rápida, que permitirá escoger la temporada que queramos (desde 1999 hasta 2002) y correr una carrera en el circuito que queramos con el piloto que queramos, algo que sin duda atraerá a los que sean verdaderos fanáticos de la fórmula 1 desde hace más de dos meses. Por la otra parte encontramos el gran apartado multijugador, que pese a no presentar innovadores modos, permite jugar hasta cuatro jugadores (mediante multitap, claro está) en una misma pantalla, lo cual puede ser sumamente divertido si los cuatro dominan el juego, cosa que, por cierto, quizá les cueste algún tiempo de aprendizaje.
Porque F1 Career Challenge no es ni un simulador puro, por lo que no necesitaremos horas y horas de fracasos para tomar una curva bien, ni un arcade total, gracias a lo cual tampoco ganaremos carreras durante nuestra primera partida. De hecho, la inteligencia artificial de los demás coches en carrera es algo a destacar, puesto que incluso chocarán entre ellos o se sacarán de la pista, y en los niveles más exigentes nos obligarán a emplearnos a fondo para no ser reducidos cual tortuga renqueante. Volviendo al tema del control, como hemos dicho será indicado para cualquier tipo de jugador, de forma que los aficionados a este tipo de juegos pronto le podrán sacar el jugo, mientras que los no iniciados con un poco de práctica aprenderán a controlar decentemente estas bestias monoplazas. Lo que sí podría tomarse en consideración con respecto al control es el hecho de usar el botón X como acelerador, algo que hace realmente cansadas las carreras largas pues debemos mantener pulsado el botón la mayoría del tiempo. Lo ideal sería, a falta de los estupendos gatillos de Xbox (para este tipo de juegos), usar los botones L2 y R2 como acelerador y frenos, quedando los botones "principales" relegados para acciones esporádicas como el cambio de marchas o las cámaras seleccionables. Sea como fuere, el control es bastante preciso y responde a la perfección, solamente desconcertando en las ocasiones en las que el coche inexplicablemente patina al iniciar una curva. La sensación de velocidad está muy conseguida, y la vista interior del piloto asegura una magnífica visión de la pista así como una recreación fiel de lo que se debe vivir dentro de uno de estos bólidos.
En cuanto a los gráficos, pese a no haber evolucionado en demasía (por no decir en nada) con respecto a la versión anterior del juego, lo cierto es que cumplen con creces. Los circuitos se encuentran un poco vacíos por lo que a decorados respecta, pero las pistas en sí y sobre todo el diseño del exterior e interior de los coches están realizados magníficamente. Destacan los reflejos sobre la parte delantera de nuestro coche o nuestro propio casco, y detalles como el "motion blur" que se ha añadido en determinados puntos del juego. Por lo que atañe a la fidelidad de recreación, resulta casi perfecta en los bólidos y muy aproximada en los circuitos, cambiando algunas partes de ellos sin motivo aparente. Lo que le resta puntos al apartado son las escasas escenas de vídeo, ubicadas generalmente en el box del equipo, pero que bien podrían considerarse de un juego de PSX, pues muestran un nulo trabajo por parte del equipo desarrollador en ellas. En este aspecto podríamos volver a hacer mención a la frialdad del modo Carrera, con las noticias acerca de nuestra evolución y futuro presentadas de una forma muy distante, cuando este aspecto del juego podría haber dado mucho más de sí. Sin embargo, los gráficos durante las carreras al final es lo que decide la balanza, y hay que decir que en este caso F1 Career Challenge luce realmente bien. Y también debemos destacar los efectos climáticos, realmente sorprendentes y que afectarán a nuestra vista y a la respuesta de nuestro coche considerablemente. Sonoramente nos encontramos con la casi total ausencia de música durante el juego, por lo que el apartado queda reducido a las secas indicaciones (en inglés) durante la carrera, que se antojan pocas e insuficientes, y al ruido de los bólidos, que pese a no resultar convincente del todo raya a un buen nivel y varía dependiendo de la cámara que estemos empleando.
En definitiva, nos encontramos ante un juego notable, que puede y de hecho proporcionará diversión a todos los fans de la fórmula 1 que se hagan con él, especialmente si no han jugado a anteriores entregas, pero que al fin y al cabo resulta algo insuficiente teniendo en cuenta lo que hubiera podido ser. En otras palabras, sabe mal que la licencia 2003 (y la de los próximos 3 años) se le escapara a Electronic Arts, y que no hayan pulido todo lo que debieran el principal atractivo del juego, el modo Carrera. Probablemente sea el último juego de F1 a cargo de EA Sports que veamos en algún tiempo, a no ser que el año que viene actualicen el juego que nos ocupa y lo mejoren. Sin embargo, objetivamente se trata de un gran juego, que va a entretenernos durante muchas horas, y que además incorpora un interesante multijugador para cuatro jugadores que promete alargar la vida del juego una pizca más. Pero aún así tenemos la sensación de que de haberse hecho las cosas con más esmero se podría haber logrado un juego sobresaliente. Pero otra vez será.