Análisis de Lords of Football (PC)
Reconozcámoslo: a casi todos los aficionados al fútbol, nos atraen los jugadores y deportistas de élite más polémicos y especiales. Aquellos que viven vidas apasionantes, tienen carisma y atraen a las masas de una forma casi hipnótica. Proporcionan un cariz único, una dimensión extra a un ya de por si emocionante deporte. Son pequeños y brillantes diamantes en bruto en un panorama deportivo que parece estar dominado por anodinos y falsos referentes morales, que aunque tienen buena intenciones, acaban hastiando al aficionado de a pie por su asfixiante condición proselitista.
Captar la esencia del fútbol, no es tarea fácil, y a día de hoy, en el mundo del videojuego, gozamos de diferentes títulos que adaptan, con un variado y amplio rango de éxito, los aspectos que rodean al deporte que mueve el mundo. Por una parte, tenemos los principales simuladores, FIFA y PES, que copan y acaparan casi toda la atención del respetable, y que año a año, libran su particular batalla por ver cual de los dos domina el mercado.
Dentro del mundo del PC, y aunque la simulación de los dos citados títulos de EA y Konami también busca su ración, la estrategia y la gestión, lo cierto es que gozan de más representantes y adaptaciones.
Ya sea capitaneando el banquillo de un club de tercera división, a comandar una escuadra campeona de Europa, la mayoría de los juegos de fútbol actuales, siguen un determinado patrón homogéneo. Es por eso, que cuando aparece un juego como Lords of Football, es imposible no sentirse atraído por su propuesta. ¿Hacernos cargos de una serie de jugadores fiesteros en cualquiera de las grandes ligas europeas? ¿Entrenarlos? ¿Hacerlos jugar el partido, después verlos irse de fiesta y que luego amanezcan siendo portada de las revistas del corazón? "¿Qué clase de juego es este?", pensaréis. Bienvenido al duro mundo del futbolista de élite.
Entrena, juega y celebra hasta que el cuerpo aguante
Las máximas de José María Gutierrez Hernández -el famoso jugador de fútbol español anteriormente conocido como "Guti"-, son también las premisas básicas de este curioso simulador para PC. Los primeros pasos en Lords of Football, nos llevarán a que creemos y elaboraremos un plan de gestión y control en un club europeo, escogiendo cualquiera de los equipos y conjuntos disponibles -aunque ninguno tiene licencia oficial, como ya os podéis imaginar, nos encontraremos simpáticas versiones del F.C Barcelona, del Real Madrid o del Espanyol-, permitiéndonos a su vez, la modificación total o parcial de casi todos los elementos disponibles -desde el escudo a los colores, pasando por el nombre o el aspecto de sus jugadores-. Todo ello, bajo el prisma de un editor completo, intuitivo y fácil de usar.
De esta manera, y aunque podemos trastear en casi cualquier parámetro posible que esté en nuestra mano, los equipos y clubs, así como los jugadores incluidos de serie, intentan simular y representar a los homólogos reales que todos conocemos, amamos y animamos. Pensad en un jugador de un determinado club importante, y lo más probable, es que cuente con su versión en Lords of Football -sí, hay versiones de Cristiano Ronaldo y Messi, las hay-. Y si no se parecen, pues les cambiamos el aspecto. Así de sencillo.
Nuestro papel en Lords of Football será el de manager de club, y porqué no decirlo, tutor absoluto de los jugadores, ya que tendremos que estar muy encima de ellos en el día a día si queremos coronarnos y convertirlos en ídolos de masa como campeones de la Copa de Europa -y de paso, el campeonato de liga nacional al que estemos inscritos-. Suena serio, pero realmente, Lords of Football, nos presenta su humorística, accesible y curiosa propuesta jugable de una manera paulatina, aunque directa.
A efectos prácticos, Lords of Football es un "Sims futbolístico" con todo lo bueno -y lo malo- que ello implica, ya que, como jugadores, estaremos de forma omnipresente en el devenir de nuestro club y en el cumplimiento diario de las tareas de los futbolistas implicados, así como, a posteriori, en su vida privada. Así, en el juego de Geniaware, podemos gestionar y dedicarnos a casi cualquier aspecto deportivo y social posible -desde fichar o traer nuevos jugadores, a jugar partidos-, encargándonos de guiar las vidas deportivas y privadas de nuestros jugadores. El centro neurálgico de la jugabilidad en Lords of Football es una suerte de ciudad deportiva y sus alrededores, donde trabajaremos día a día mientras nos preparamos para la siguiente jornada de partido, y donde tras entrenar, los jugadores irán a tomarse unas copas y disfrutar de su tiempo libre.
En ella, en la ciudad deportiva, cogeremos y moveremos con el cursor a los deportistas que queramos de un lado a otro, haciéndolos trabajar de forma constante en los entrenamientos. Los entrenamientos sorprenden por su amplio rango de tareas -aspecto que nos esperábamos mucho más parco de lo que ha acabado siendo-, que van desde el ensayo de pases y jugadas específicas, al balón parado o aéreo, pasando por sesiones de tonificación muscular en los gimnasios o tratamientos de lesiones con el fisioterapeuta. Las instalaciones deportivas irán aumentando y mejorándose en función de nuestros éxitos, con lo que más nos vale ser eficientes y rendir a un buen nivel en las competiciones y partidos oficiales si queremos disfrutarlas. El tiempo de cada sesión de entrenamiento en la ciudad deportiva de Lords of Football es muy limitado, así que hay que planearlo todo de una manera estratégica e inteligente.
Según el trabajo realizado en estas sesiones -que a la postre, avisamos, pueden hacerse muy repetitivas-, nuestros jugadores gozarán de mejores y perfeccionadas estadísticas y atributos, a fin de que veamos siempre una evolución directa y contrastable en nuestra escuadra. No olvidemos que el objetivo es ganar en los partidos, y que es en esa fase de la jugabilidad, donde nos jugamos el devenir de nuestra partida en general. Si fracasamos, nos costará mucho levantar el vuelo -al menos que estemos en un club grande de presupuesto holgado-.
La fase más deportiva -esto es, aquella que concierne a los partidos de fútbol propiamente dichos-, es la que marcará la diferencia. Podemos escoger a los once jugadores que creemos que están para competir en el partido, y tendremos, de forma directa o indirecta -según nos apetezca, podemos simular el resultado del partido o jugarlo en tiempo real-, la posibilidad de establecer estrategias y cambios tácticos durante el transcurso del mismo.
Esta última opción encandilará a los más puristas, ya que podrán ir desde el control de los pases y centros de los jugadores, al control de la defensa y los contraataques, que pasarán ahora a ser de nuestra incumbencia. Pero en la práctica, las acciones son algo confusas y complicadas de realizar -no tanto por la tarea en sí, como por la poco acertada interfaz-, y desgraciadamente, no suelen surtir el efecto buscado.
Por ejemplo, en los desmarques en las jugadas de ataque, los jugadores tienden a realizar el fuera de juego de forma automática, con lo que deberemos estar muy atentos y obligarle a encomendar acciones muy concretas o jugadas sin balón en los pies.
Los partidos están, por otra parte, pobremente recreados, tanto a nivel técnico como en cuanto a "simulación", siendo verdaderos tedios de noventa minutos. Nos costará mucho habituarnos y acostumbrarnos a ellos, y la mayoría de las veces, optaremos por simularlos. Tampoco serán excesivamente difíciles. Una vez tengamos un cierto nivel de plantilla, con atributos mejorados, y necesidades cubiertas -ahora entraremos en más detalle sobre ello-, la mayoría de los partidos serán un mero trámite al que nos enfrentaremos con una más que notoria superioridad deportiva. Lords of Football es un título relativamente fácil, carente de verdaderos retos.
Por último, está el elemento jugable más interesante de toda la propuesta de Lords of Football: la vida privada de nuestros jugadores más allá del club. Original, divertida y muy entretenida, Lords of Football nos permite seguir, como si fuéramos un espía o detective, a los jugadores de nuestra plantilla en su día a día y tiempo libre tras cumplir con su jornada laboral. Tras machacarse en los entrenamientos, y trabajar en el césped durante el partido de la jornada, los jugadores se irán a los restaurantes más caros, pasando por los casinos a los locales de copas de moda y buscarán la compañía de las más fiesteras y juerguistas mujeres del lugar. Pese a que las horas de ocio y recreo serán esenciales para garantizar un buen trabajo deportivo en el terreno de juego, habrá que tener extremo cuidado para que nuestra escuadra de deportistas no caiga en el vicio, el exceso y la adición.
Si nos despistamos -cosa más fácil de lo que parece en un principio- podemos acabar con varios jugadores -que tienen sus propias personalidades y carencias personales- en la más absoluta desgracia. Así pues, al igual que tenemos beneficios y características mejoradas si entrenamos, podemos pasar a tener verdaderos problemas en los atributos de los jugadores, que se nos pueden... Ir por el desagüe. Eso sí, en un momento podemos encandilar y curar "las desgraciadas" vidas de estos avatares deportivos, mandándolos al psicólogo para que lo trate -terapia mediante-. Esta fase del juego tiene su punto, y sin lugar a dudas, es la más divertida y curiosa de todo Lords of Football, con un componente de humor increíble. Los jugadores estrella serán, paradójicamente, aquellos que más propensos a los vicios sean.
Desgraciadamente, Lords of Football, no ofrece nada más. Sí, hay una cierta parte de gestión de plantilla y fichajes, pero es anecdótica. Tampoco lo pretende, ya que realmente es un simulador social deportivo -por así decirlo-, pero la falta de opciones que se destila, así como su mediocre terminación técnica, echan a perder la poca fórmula jugable interesante que pueda atesorar. Y es que el apartado técnico, a medio camino entre los juegos de Los Sims de la generación pasada y los juegos de gestión deportiva más mediocres -la interfaz es un problema pavoroso a nivel de diseño-, nos jugará malas pasadas, con bajadas constantes de frames en la tasa de cuadros por segundo o texturas y modelados muy deficientes en los más diversos ámbitos de las recreaciones en tres dimensiones. No exige un gran PC o equipo para disfrutarlo, pero el trabajo de optimización debería haber sido mucho mejor, ya que no hay ningún elemento especialmente complejo de recrear o reproducir para aguantar semejantes problemas técnicos. Puntuales, cierto, pero muy evidentes. La banda sonora y el audio tampoco ofrece nada del otro mundo. Lords of Football está traducido al castellano, y sale a precio reducido.
Conclusiones finales
Lords of Football es un juego fallido. Atesora ciertos elementos entretenidos y curiosos y ofrece, al mismo tiempo, una mezcolanza jugable de lo más original. Pero la puesta en escena deja mucho que desear, con tres fases de juego muy descompensadas entre sí por mecánicas repetitivas y poco pulidas, que acabarán hastiando hasta al jugador más receptivo. A todo eso, le sumamos un pobre apartado técnico y una falta de modos de juego alternativos evidente.
¿Qué es entonces Lords of Football? Haciendo un símil, lo compararemos con aquella estrella joven y talentosa de un cierto equipo de talla e importancia mundial, que un día parece deslumbrar, pero que acaba siendo engullida por la fama y el paso del tiempo, cayendo por consiguiente, en el más despreciable de los olvidos.