Análisis G.I. Joe: Wrath of Cobra, los 'auténticos héroes americanos' vuelven a la acción (PC, PS5, Xbox Series X/S, Switch)

Mientras que Transformers ha mantenido su popularidad de manera bastante constante durante décadas –gracias a los taquillazos de Michael Bay-, otra de las muchas licencias de Hasbro no han tenido la misma suerte. No es que G.I. Joe desapareciese por completo, siempre ha sido un objeto para coleccionistas y ha tenido varios intentos por reinventar a estos "verdaderos héroes americanos" –en el cine, con G.I. Joe: The Rise of Cobra, G.I. Joe: Retaliation, Snake Eyes y se prepara el crossover entre Transformers y G.I. Joe-, pero es cierto que el espíritu patriótico norteamericano ya no es tan fácil de exportar al resto del mundo.

Hay abundantes videojuegos con la licencia aunque ninguno realmente exitoso o bien valorado. G.I. Joe: Wrath of Cobra es un intento más serio por llevar a estos personajes a un género que últimamente está cobrando fuerza y dándonos algunas alegrías: el beat’em up. La idea no es mala: esa acción "yo contra el barrio" y los G.I. Joe comparten una comunidad de jugadores nostálgicos que ronda los 30 y 40 años, así que Wrath of Cobra tiene muchas papeletas para triunfar donde otros videojuegos no lo han conseguido. ¿Está a la altura del recuerdo de esas tardes frente a la televisión con la serie animada? Depende. No es mal juego, pero la competencia es muy sólida y el juego de Maple Powered Games es muy justito en ambición.

Hora de ajustar cuentas con Destro, Serpentor, Baroness y el Comandante Cobra

El vídeo de introducción, muy al estilo de la popular serie de los 80, nos presenta el malvado plan de Cobra, que está relacionado con un ejército de clones y el robo de monumentos icónicos de todo el mundo… o al menos esa es la premisa inicial, porque desde un principio nos dejan claro que este plan esconde más. Lástima que no profundice demasiado porque estos héroes y villanos daban para potenciar la narrativa, pero en los beat’em up nos suele valer una disculpa como esta para poner en marcha al equipo compuesto por Duke, Roadblock, Scarlett y Snake Eyes, y saltar a la acción en solitario o en cooperativo para hasta cuatro jugadores –en local, por ahora-.

Del gameplay poco os podemos descubrir a estas alturas: avanzar por escenarios con oleadas de enemigos, repartir puñetazos y patadas a granel, uso puntual de algunas armas de gran poder, carreras, bloqueos –y recompensa si lo ejecutas en el momento preciso- y un ataque especial. Es similar a multitud de sagas del estilo, pero con los guiños a la licencia en vehículos, enemigos, jefes y localizaciones, lo que puede ser más que suficiente para el fan incondicional de G.I. Joe.

Los soldados de Cobra nos dejarán "desinteresadamente" un armamento que incluye rifles, ballestas, lanzagranadas y algún arma un poco más futurista. La munición es limitada y una vez agotada puedes lanzar el objeto contra los enemigos. Es interesante que Wrath of Cobra potencie este equipamiento, como hizo The Punisher –rescatado estos días en Marvel vs. Capcom Fighting Collection: Arcade Classics- y no tanto las armas blancas; es algo que tiene sentido por la licencia, pero a veces da la sensación de no estar bien implementado porque portar un arma te limita mucho y el equipamiento cae con facilidad.

Hay pequeños detalles que no están bien resueltos en cuanto a reacción de enemigos, cajas de impacto –golpes imprevisibles de grandes enemigos…- o los instantes de invencibilidad, que nos pueden dejar vendidos dentro de una melee; esto provoca picos de dificultad en un juego que no es excesivamente complicado –hay niveles de para elegir- pero sí puede provocar que tu barra de salud quede tiritando por recibir múltiples impactos. De manera superficial Wrath of Cobra "funciona", aunque no tiene el pulido de los mejores exponentes y eso saltará a la vista para los jugones experimentados en los beat´em up.

G.I. Joe: Wrath of Cobra se inspira en los clásicos y por esa razón tiene un mínimo de calidad del que otros títulos de G.I. Joe carecían, aunque a los mandos se siente bastante simple y no creemos que el jugador más exigente vea algo realmente interesante o novedoso. Es un diseño que tal y como lo ha planteado la desarrolladora se puede hacer repetitivo –fases un poco largas-, aunque siempre puedes probar diferentes personajes con pequeñas diferencias en características y especial. Por suerte, Maple ha acompañado el modo principal –de unas dos horas- con varios extras.

A lo largo de la partida podemos conseguir la "moneda" del juego, unos disquetes que sirven para comprar modificadores e incluso dos personajes más, Gung-Ho y Ripcord, lo que al menos es un incentivo para repetir y así obtener cambios en aspecto o gameplay: muertes de un golpe, sistema de aleatorización, duplicar número de enemigos, etc. Eso sí, te enfrentarás a mucho grindeo por el alto coste de estos bonus. También hay un modo arcade -más dificultad, medidor especial alternativo- y un "avalancha de jefes" o Boss Rush.

G.I. Joe: Wrath of Cobra redondeado con un aspecto gráfico muy colorido y retro, similar a los juegos de Las Tortugas Ninja. Nos parece que habría sido más apropiado una estética de cómic tipo Streets of Rage 4, pega más para el espíritu de la licencia o la serie de animación, pero tampoco se le pueden poner muchas críticas a la apuesta por el pixel-art. La banda sonora es buena y en ella participa Tee Lopes, conocido por Sonic Mania, TMNT Shredder's Revenge, Streets of Rage 4 - Mr. X Nightmare.

Los planes de futuro

Merece la pena destacar que Maple ha anunciado la ruta postlanzamiento, que además de las versiones para Nintendo Switch, PlayStation y Xbox, pasa por DLC gratuito que añadirá nuevos personajes (Shipwreck, Lady Jaye y Timber), multijugador online, modificadores, el modo Lightning -enfrentarse a enemigos más rápidos-, baja gravedad y más. Son novedades importantes y esto nos hace pensar si quizás se habría beneficiado de un retraso para pulir jugabilidad y añadir todas las funciones que prometen para los próximos meses.

Conclusiones

Como decíamos al principio, desde los 90 no había tanta oferta en los beat’em ups como ahora; el mercado ofrece clásicos y novedades, con joyas que poco tienen que envidiar a las vacas sagradas. G.I. Joe: Wrath of Cobra no comete ningún fallo excesivamente grave y desbloquear todo el contenido nos entretendrá durante un tiempo razonable, pero claro, la competencia es feroz y se nos ocurre un montón de alternativas más interesantes que no llevan el nombre de G.I. Joe. Al menos, la licencia siempre ayuda a pasar por alto más fácilmente las limitaciones, y ese encanto es parte del valor de Wrath of Cobra.

Hemos realizado este análisis gracias a un código proporcionado por ICO Partners.