Análisis de Bit.Trip Presents Runner 2: Future Legend of Rhythm Alien (PC, Xbox 360)

Commander Video está de vuelta y dispuesto a correr todo tipo de alocadas maratones para nuestro disfrute. La saga Bit.Trip cuenta ya con numerosas entregas de muy diferente índole, aunque todas ellas se caracterizan por su buena música y su sencillez jugable. Sin lugar a dudas, la más destacada de todas hasta la fecha ha sido Bit.Trip Runner, un juego en el que nuestra única preocupación era evitar todo tipo de obstáculos y enemigos mientras nuestro personaje avanzaba automáticamente de forma imparable por los niveles. Todo ello además venía aderezado por unos gráficos muy resultones que homenajeaban los juegos retro, una banda sonora que iba al ritmo de nuestros saltos y acciones y una dificultad que sabía cómo retarnos y frustrarnos a partes iguales.

Por tanto, no resulta extraño que tras este éxito, el anuncio de su segunda parte fuera recibido con los brazos abiertos por parte de los fans, aunque no fueron pocos los que se mostraron escépticos y decepcionados al descubrir que Commander Video abandonaría su estética retro para ofrecernos gráficos actuales en 3D. No es la primera vez que el cambio visual de una saga genera controversia ni será la última (el pobre Dante sabe bien de lo que hablamos), pero lo que sí que podemos aseguraros es que todos estos temores carecen de una base sólida, ya que Bit.Trip Presents... Runner 2: Future Legend of Rhythm Alien (a partir de ahora nos referiremos a él únicamente como Runner 2) ha resultado ser todo un juegazo que mantiene y mejora enormemente la base del original sin perder nada de su esencia.

Nuevos gráficos, misma esencia

Si ya jugasteis a Bit.Trip Runner sabréis perfectamente lo que os vais a encontrar, ya que su propuesta jugable se mantiene intacta: evitar chocarnos con cualquiera de los numerosos obstáculos que saldrán a nuestro paso mientras Commander Video avanza automáticamente por ellos. Todos los movimientos del original se mantienen, es decir, el imprescindible salto, el agacharnos para deslizarnos por el suelo, la patada para romper estructuras no demasiado sólidas y la barrera para repeler proyectiles. A estos hay que sumarle ahora la posibilidad de pegar patadas y saltar mientras nos deslizamos, bailar, planear ligeramente y correr sobre unas barras de metal o avanzar colgándonos de ellas.

Este incremento en el número de movimientos de nuestro incansable héroe aumenta considerablemente la variedad de situaciones jugables, ya que todos ellos nos servirán para sortear un tipo de obstáculo u otro y será necesarios usarlos para avanzar. El único que no nos resultará imprescindible será el de baile, aunque este será de gran importancia para todos aquellos que busquen aumentar su puntuación, ya que cada vez que bailemos ganaremos un extra de puntos bastante jugoso. Eso sí, durante el segundo que dura esta animación no podremos saltar ni agacharnos, por lo que estaremos totalmente expuestos.

Los controles por su parte responden perfectamente, siempre y cuando juguemos con mando, ya que con teclado pueden hacerse muy cuesta arriba ante la enorme pérdida de precisión que sufriremos y a lo incómoda que resulta la distribución de sus teclas (y no, no hay opción para configurarlas a nuestro gusto). Esto es algo de lo que nos advertirá el propio juego nada más iniciemos el programa, indicándonos que es "altamente recomendable" jugar con mando.

Por otro lado, uno de los aspectos que más se han mejorado respecto al original lo encontramos en el diseño de sus niveles, el cual es sencillamente fantástico. Ahora se incluyen múltiples caminos, salidas alternativas, secretos por descubrir, rutas distintas, multitud de nuevas trampas y elementos interactivos como ventiladores, loopings o bandas de turbo, etcétera. Runner 2 se las apaña para plantearnos nuevas situaciones constantemente durante sus más de 100 niveles y evitar así cualquier sensación de aburrimiento o monotonía, algo digno de elogiar si tenemos en cuenta lo limitada que es a priori su propuesta jugable.

La dificultad también ha sido otro punto que se ha revisado cuidadosamente. Elegir entre fácil, normal y difícil ahora modificará por completo cada una de las fases, cambiando la disposición de obstáculos hasta tal punto que una misma pantalla nos parecerá completamente distinta de una dificultad a otra, algo que a su vez nos animará a rejugarlas. Además, cada una de ellas hace honor a su nombre y podremos comprobar fácilmente cómo fácil es un paseo por el campo, normal es un reto bien medido y difícil es la opción perfecta para sacarnos de nuestras casillas al obligarnos a medir al milímetro cada uno de nuestros movimientos con situaciones realmente complejas y exigentes (os recomendamos encarecidamente apostar por esta dificultad a todos aquellos que queráis revivir las frustraciones de la primera entrega).

La curva de aprendizaje es otro aspecto que se ha medido perfectamente para irnos presentando cada nuevo movimiento o elemento jugable poco a poco, de modo que tengamos tiempo para acostumbrarnos a cada uno de ellos antes de introducir otro nuevo, por lo que notaremos cómo el juego va aumentando gradualmente la exigencia de sus desafíos a medida que mejoramos y ganamos soltura con el mando.

Algo que alegrará a muchos será la existencia de puntos de control dentro de las propias fases, lo que nos evitará tener que repetir las pantallas desde el principio en caso de que nos golpeen, suavizando enormemente los niveles de frustración que llegaba a provocar su primera parte. Sin embargo, si queréis un desafío de verdad y alcanzar la máxima puntuación posible, tendréis la opción de saltároslos para ganar un extra de puntos muy considerable, aunque tened en cuenta que si hacéis esto y falláis antes de llegar a la meta os tocará repetirlo todo.

En cuanto a su duración, esta variará sensiblemente dependiendo de lo que queramos completar. Si simplemente nos basta con superar sus 100 niveles, lo que vendría siendo la "historia" principal, apenas tardaremos menos de cuatro horas en dificultad normal. En cambio, si lo que buscamos es conseguir el 100% de cada nivel sin saltarnos un solo objeto, desbloquear todos los personajes, fases y trajes, y encontrar los 25 cartuchos dorados (estos nos llevarán a unas pantallas especiales con estética retro y donde a diferencia del resto del juego, no tendremos vidas infinitas), tenemos vicio para más de 15 horas, ya que nos obligarán a rejugar muchos niveles y a explorar todas sus rutas. Si encima sois de los que os picáis fácilmente para intentar conseguir la máxima puntuación y así aparecer en lo más alto de las tablas clasificatorias, el contador de horas puede dispararse exponencialmente, ya que la capacidad de pique y enganche de este juego no es algo que deba tomarse a broma.

Entrando ya en el terreno gráfico, no se trata de un título que vaya a poner a prueba nuestros equipos, aunque sí que resulta muy agradable a la vista gracias a una dirección artística muy llamativa (que tal y como ya hemos dicho, abandona la estética retro a excepción de ciertos niveles y alguna que otra sorpresa que no desvelaremos) y a una paleta de colores muy bien escogida. Los niveles se sienten muy vivos y siempre veremos todo tipo de elementos móviles, tanto en los fondos como en primer plano, lo que ayuda a transmitir mucho dinamismo a las partidas, algo que le viene fenomenal considerando el tipo de juego ante el que nos encontramos. A todo esto hay que sumarle unas animaciones muy logradas que consiguen dotar de mucha personalidad a los extravagantes personajes que controlaremos durante la aventura (todos ellos son iguales a nivel jugable).

Finalmente, en lo que respecta al sonido, decir que Gaijin Games vuelve a sorprendernos una vez más con una portentosa banda sonora que va al ritmo de todo lo que hacemos. Resulta especialmente gratificante avanzar por los niveles mientras vamos "haciendo música" por cada obstáculo que evitamos, salto que damos u objeto que recogemos. Además, cada vez que conseguimos un multiplicador de puntos aumentará el ritmo y la instrumentación de la canción del nivel en el que nos encontremos, por lo que generalmente terminaréis, algo que nos dará una motivación extra para conseguirlos y no saltárnoslos. Por último, destacar el genial trabajo llevado a cabo por Charles Martinet, el actor de doblaje habitual de Mario y otros conocidos personajes de Nintendo, quien en esta ocasión borda el papel de narrador.

Conclusiones

Runner 2 es sin duda alguna un título tremendamente adictivo y uno de los mejores juegos independientes que podréis encontrar actualmente. Divertido a rabiar, con una jugabilidad a prueba de bombas y con un apartado sonoro que por sí solo ya hace que bien merezca la pena su compra. No os dejéis engañar por su nuevo apartado gráfico, ya que mantiene todo lo que hizo grande a su primera parte y mejora la fórmula hasta niveles insospechados.

Si buscáis un juego que simplemente os ofrezca pasar un gran rato, sin complicaciones ni artificios que os distraigan de la puramente jugable, no os equivocaréis al apostar por la nueva aventura de Commander Video, la cual viene a recordarnos que la diversión siempre será lo más importante en un videojuego, algo que por desgracia muchas compañías parecen olvidar a día de hoy.