Análisis de King's Bounty: Legions (iPhone)
Pocas franquicias han perdurado tanto a lo largo de los años como King´s Bounty. Nacida en 1990, ha ido pasando por distintas plataformas, contando con diversos remakes y actualizaciones, y propiciando alguna que otra secuela. Durante tiempo, King´s Bounty ha sido considerada la saga que inspiró a la serie de juegos de Might & Magic, y de hecho, en numerosas recopilaciones y colecciones, se han incluido a ambas sagas como parte de una misma "cronología" o historia -no sin acaloradas y casi infinitas discusiones por parte de muchos de los aficionados enfrentados de sus respectivas franquicias-, ya que su creador, Van Caneghem participó y desarrolló durante un tiempo las dos. Sea como sea, y sobre todo si eres un amante de la estrategia más fantástica y medieval, reconocerás que King´s Bounty se ha hecho con un nombre propio dentro del género -y más raíz de aquella excelente entrega y continuación "revival" que salió en 2008-.
Ahora, y como parte de una continua reestructuración por mantener la herencia de estos juegos viva durante el mayor tiempo posible entre las nuevas generaciones de jugadores, nos llega una vívida, original y exclusiva entrega para el iPad, que condensa y adapta de manera brillante, las bondades de King´s Bounty como videojuego.
Legiones y estrategia
King´s Bounty: Legions es un juego que, al contrario que otras adaptaciones y versiones para iOS, destila -tanto en aspecto como en jugabilidad- casi el mismo tipo de delicioso y añejo aroma de su saga principal. Aquí no hay excesivos cambios o radicales cortes en la profundidad de la estrategia o el juego en sí mismo. Sí, obviamente hay elementos simplificados y otros que han desaparecido, pero son pequeños costes y precios a pagar por disfrutar de un título pensado en exclusiva para el tablet de Apple. King´s Bounty: Legions nos invita a compaginar, crear y equipar a un grupo de criaturas, soldados y magos, destruir a los enemigos que nos planten cara e impartir justicia allá por donde vayamos. Todo ello, desde la pantalla del iPad. Ya sea contra la I.A o contra otros jugadores -King´s Bounty: Legions incorpora un modo multijugador PvP y PvE-, nos pasaremos gran parte del juego luchando y entablando estrategias.
Para ello, y antes de empezar, se nos invitará a sincronizar nuestra cuenta de Facebook para ayudarnos a encontrar jugadores y obtener recompensas extras en forma de dinero, gemas y unidades especiales. No es esencial hacerlo -de hecho, no es exclusivamente necesario jugar de forma online-, pero si queréis avanzar un poco más rápido, no es mala opción. King´s Bounty: Legions es un juego free-to-play, y como es habitual en este tipo de títulos, hay que tener en cuenta que debemos gestionar una serie de recursos y elementos de forma inteligente, sobre todo si no queremos quedarnos en la estacada. Desde la estamina a las gemas, pasando por el oro, todo, o casi todo en King´s Bounty: Legions tiene un coste.
Antes de hablar largo y tendido de los pros y contras de un sistema así, nos centraremos en desengranar un poco el entramado jugable de King´s Bounty: Legions. El juego, nada más arrancar, nos ayudará a localizarnos en su atiborrada y completa interfaz. Siguiendo de manera casi obligada sus pasos, visitaremos por primera vez el campo de batalla, y aprenderemos a manejarnos sobre él. El terreno de batalla de King´s Bounty: Legions se divide en una serie de casillas en forma de hexágonos, donde reposarán nuestros combatientes, y por las que se irán moviendo y luchando cuanto toque. King´s Bounty: Legions es un juego que basa su combate en un intercambio de golpes y movimientos por turnos, con lo que en cada turno, podemos desplazar a nuestros integrantes y hacerlos luchar.
Cada personaje y unidad tiene un rol diferenciado, y como es lógico, un papel dentro de la escuadra. Podemos tener arqueros, unidades de infantería, unidades de combate pesado, magos... Todas ellas gozan de unos ataques únicos y particulares, así como de una serie de habilidades, que con el número necesario de gemas, pueden mejorarse. Así, en un par de combates, veremos cómo luchan en según qué escenario, y cómo se desenvuelven contra según el tipo de unidad a la que nos enfrentamos. El equipamiento de cada unidad es otro factor a tener en cuenta, ya que si la equipamos correctamente, y la avanzamos y mejoramos con ahínco cada cierto tiempo, podemos tener verdaderos escuadrones invencibles o piezas de valor incalculable.
En King´s Bounty: Legions, los combates se pueden llegar a resolver en pocos minutos, siempre y cuando, tengamos en cuenta los soldados, magos y criaturas que tenemos a nuestro mando. Son muchos los factores a considerar -número de casillas que se desplazan, contraataque disponible en caso de que nos ataquen, cantidad de unidades que disponemos, valoración de ataque o defensa...- y un movimiento en falso, puede llevarnos a entregar la batalla sin remisión. Los primeros escarceos serán muy sencillos, limitándonos a atacar con todo y sin apenas remisión, ya que las unidades enemigas serán débiles y de poco poder mágico, pero más tarde, podemos encontrarnos con verdaderos compendios de criaturas y soldados dispuestos a hacernos sudar la gota gorda delante del iPad.
Multitud de opciones
King´s Bounty Legions tiene una interfaz atiborrada y llena de opciones y texto -en inglés- y aunque al principio nos costará lo suyo entenderla, tras un par de misiones y tareas, comprendemos su mecánica a la perfección. La pantalla principal, nos lleva a un mapa en tres dimensiones, donde podemos acceder a casi todo el juego en sí mismo. En ella, podemos desde aceptar y declinar misiones, a comprar y desbloquear nuevas unidades y soldados o personajes o crear objetos y equipamientos, pasando por la omnipresente posibilidad de pertrecharlos y terminando por la opción de desplazarnos por el mapa. Cada vez que se nos encomiende una misión, la aceptaremos en la pantalla principal, dándonos una descripción del objetivo y la recompensa total.
Esto nos ayudará a discernir con claridad si la misión merece la pena, y si la experiencia que nos ofrecen es interesante o si el desplazamiento de la unidad es asumible. Al tener en cuenta que King´s Bounty: Legions es un juego free-to-play, hay ciertos elementos que nos pueden chocar y frenar en nuestro avance diario, como la cantidad de estamina que podemos gastar -que se irá regenerando a mayor lentitud según el uso-, el número de oro para contratar soldados y unidades o las omnipresentes y útiles gemas, verdaderas artífices de los avances en el juego, y que escasean sobremanera.
Conseguir una escuadra de magos, arqueros, soldados y demás criaturas de fuerza y reputación comprobada, no es fácil. De hecho, y aunque sea en un punto lejano en el tiempo, habrá ocasiones en las que nos encontremos atascados, y nos veamos obligados, en mayor o menor medida a comprar algún objeto o cantidad de elementos para avanzar correctamente y enfrentarnos a un mayor número de enemigos por partida. Eso sí, el devenir del juego está muy ajustado, y su curva de dificultad está pensada al milímetro, para que, a no ser que seamos excesivamente torpes o derrochones, no nos quedemos atascados a las primeras de cambio. Hay siempre varias misiones a elegir, de dificultad y recompensa variada, y nos tocará a nosotros si ir paso a paso, o intentar subir dos escalones de golpe aun arriesgándonos a perderlo casi todo -las unidades mueren en el campo de batalla, y para volver a tenerlas, deberemos contratarlas desde cualquiera de los puntos de encuentro de mercenarios habituales-.
King´s Bounty es un juego muy grande. Tiene una infinidad de opciones y configuraciones de personaje, así como de objetos, tipos de unidades y factores -como las auras, unas habilidades que nos permiten tener efectos beneficiosos para nuestro jefe de escuadra y que nos ayudarán en forma de bonificaciones extra en las batallas-, que son más que suficientes como para tenernos probando combinaciones, cambios y estrategias en función de nuestra pericia y tiempo. Si a ello le sumamos un modo multijugador que recoge e integra todas las funciones del modo principal, sumándole modos de juego únicos -como Asalto, donde tenemos que derrotar y atacar a los fuertes de los enemigos-, lo cierto es que tenemos juego para rato, y lo que es mejor, en diversas facetas.
En el plano técnico, King´s Bounty: Legions, no destaca sobremanera, pero funciona a la perfección. Nos permite elegir la resolución -el juego en el iPad retina luce de maravilla-, y nos brinda texturas en alta definición, algún que otro modelado resultón y una serie de efectos gráficos interesantes. En líneas generales respeta el estilo artístico de la saga, con algunos diseños de criatura similares, escenarios de corte parecido y unos cuantos personajes de apariencia clásica en la franquicia. Los menús son también idénticos o muy parecidos, con lo que la sensación de estar jugando a una entrega de King´s Bounty nunca se pierde. King´s Bounty: Legions, para nuestra desgracia -sobre todo en un juego con tanta cantidad de texto y reglas- no goza de una traducción al castellano.
Conclusiones finales
King´s Bounty: Legions, tras su última gran actualización, es un juego todavía más completo. Respeta a la saga original -una de las más queridas por los jugadores-, y añade cambios para hacer del título un juego más fluido en pantalla táctil -el control y la interfaz son parecidos, pero están pensados de forma clara para el iPad- y lo riega con una cantidad de opciones abrumadoras en el plano más estratégico. King´s Bounty: Legions es un juego muy largo, completo y complejo, lleno de posibilidades. Pese a ser un título free-to-play de naturaleza evidente, brinda al jugador horas de diversión tanto en su campaña normal como en su vertiente online competitiva y cooperativa. Teniendo en cuenta las pegas citadas en el análisis, la verdad es que King´s Bounty: Legions es un juego más que recomendado, sobre todo si sois de los fanáticos de la franquicia original y buscáis algo de corte muy similar -por no decir idéntico- para vuestro tablet.