Análisis de Comic Workshop eShop (Nintendo 3DS)

Los títulos orientados al arte o que han tenido el arte como uno de sus núcleos principales tienen ya cierta tradición en las consolas Nintendo. Desde luego, han pasado ya unos años desde que Mario Paint debutó en Super Nintendo y más recientemente hemos tenido las diferentes entregas de Art Academy, que han tenido en la interfaz táctil de Nintendo DS (y más recientemente 3DS) su principal bastión. Miiverse y Art Academy: SketchPad en Wii U son un eslabón más en la cadena que nos trae hasta este Comic Workshop.

El usuario ya no puede, por tanto, sentirse sorprendido ante una propuesta de esta índole, y menos en una consola portátil como la de Nintendo. En este caso se trata de una aplicación y no un videojuego.

Dicho de otra manera, se nos ofrece un conjunto de herramientas orientadas a dibujar (el original se planteaba una herramienta para dibujar manga en la portátil) sin un componente lúdico en forma de retos como los que habría en un videojuego tradicional.

Comic Workshop es una herramienta interactiva para Nintendo 3DS que nos otorga todo un conjunto de recursos para poder dibujar y crear sobre la pantalla táctil de la portátil. Los usuarios que no hayan tenido mucho contacto con herramientas de dibujo digitales quizá se sientan abrumados en un primer momento por las opciones y posibilidades de configuración, así que es recomendable pasar por los tutoriales para descubrir cuáles son los límites de la aplicación.

Algo que nos ha gustado de la aplicación es que ofrece 28 tutoriales que podemos recorrer en el orden que deseemos. Así, si alguien ya tiene una idea aproximada de cómo funcionan ciertas cosas, puede ir directamente a lo que la interesa. Los tutoriales son necesarios para conocer la aplicación, pero haberlos hechos obligatorios o secuenciados sin opción de saltarnos partes habría sido un error terrible en el flujo y proceso de aprendizaje. Y es que hay que tener algo muy claro: aunque el usuario sepa dibujar bien, necesita adaptarse a estas herramientas, hacerse con ellas para conseguir un buen manejo.

Una de las cuestiones lógicas pasa por plantearse si esto es un entretenimiento glorificado o si llega al nivel de las aplicaciones profesionales que hay para ordenador. Ni una cosa ni la otra. Como la lógica hace sospechar, Comic Workshop no tiene todo el potencial de Photoshop, ni lo pretende. Su potencial está en ofrecer algo más que los sistemas básicos de dibujo, suficientes herramientas para conseguir buenos resultados e intentar ser tan accesible como sea posible. Creemos que es una herramienta apropiada para aficionados que busquen algo más, pero -por supuesto- no va a satisfacer las necesidades de un dibujante profesional (si bien es cierto que esto no hace que pueda disfrutar de sus opciones).

La realidad del mercado, sin embargo, es mucho más compleja. Un usuario que pueda estar interesado en una aplicación de este tipo probablemente ya tenga alguna de funciones similares en tableta o incluso en teléfono móvil. Aquí es donde se hace evidente una carencia peculiar: pudiendo aprovechar el potencial de imagen 3D de la consola, Comic Workshop no integra los recursos para que haya un efecto tridimensional en los dibujos que se creen. Esto podría haber sido un factor diferencial clave para los usuarios. Su nombre nos lleva al medio impreso, al cómic, sí, pero estamos creando en una pantalla y no son pocas las tiras cómicas que hoy en día se crean y consumen de forma enteramente digital. Por esta razón, creemos que haber integrado alguna funcionalidad para aportar profundidad a las imágenes creadas habría sido ese extra necesario para destacar sobre los demás ya no en Nintendo 3DS, sino en el mercado de dispositivos consumo.

Si dejamos de lado esa carencia, los que nos encontramos es la posibilidad de trabajar de forma muy sencilla con capas, formas predefinidas, un amplio rango de lápices, colores, etc. No va a hacer que dibujemos mejor mágicamente, por supuesto, pero sí nos da una inmensa libertad creativa para conseguir nuestros objetivos de forma sencilla. Las opciones de configuración incluyen también el tamaño del lienzo sobre el que se dibujó y la posibilidad de asignar nuestras herramientas más comunes a los botones frontales X e Y de la consola para no tener que lidiar tanto con los menús.

Los dibujos que se crean en Comic Workshop se pueden exportar fácilmente gracias a la tarjeta SD. Resulta muy cómodo pasarlas al ordenador y desde ahí ya publicarlas o imprimirlas donde queramos. Su interfaz, en líneas generales, es muy amable pero no se ha traducido al castellano por lo que el usuario se encuentra con una cantidad no ingente aunque sí bastante grande de textos. Esto puede resultar un poco complicado en algunas situaciones para los usuarios más pequeños o aquellos que no estén mínimamente familiarizados con los términos en inglés que se usan en este ámbito. La ventaja es que luego se usa casi todo por memoria, pero suponemos que la ausencia de textos en español es un contratiempo para un sector de los usuarios potenciales. Además, y con independencia de eso, consideramos siempre que la traducción es más que recomendable una muestra de respeto por los clientes. En este caso concreto, comprendemos que se trata de un título con un potencial de ventas limitado que llega de una empresa japonesa (Collavier) que no cuenta con los recursos de las corporaciones más grandes; esto no impide que las traducciones sean algo de gran importancia.

Conclusiones

Comic Workshop no es una aplicación profesional, pero es un conjunto de herramientas eficaz y amable con el usuario que permite conseguir buenos resultados con escaso esfuerzo y una curva de aprendizaje que nos parece modesta y asumible. Dicho de otra manera, podemos usar nuestra Nintendo 3DS de manera efectiva para crear sobre la marcha y aprovechar sus elementos integrados (bocadillos, rellenos, pegatinas, etc.) para conseguir rápidamente resultados muy eficientes. Echamos en falta un elemento distintivo, es decir, que se haya aprovechado la ocasión para permitir dibujar con profundidad. Es cierto que se orienta muy especialmente a usar los diseños creados en entornos donde no hay imagen 3D por defecto (como ordenadores) e incluso la impresión en papel, pero insistimos que nos hubiera gustado poder aprovechar todas sus herramientas para crear contenidos tridimensionales que hubieran podido sacarle jugo a la imagen 3D de la portátil.

Los aficionados a dibujar serán quienes más sepan disfrutar de una aplicación como esta. Sus tutoriales están orientados más bien a aprender a usar todo su potencial (capas, pinceles, etc.) y no tanto a dominar o perfeccionar técnicas de dibujo. Esa es la principal diferencia con, por ejemplo, la serie Art Academy. Aquí se trata de llegar a un público que ya se siente cómodo dibujando y que quiere centrarse, además, en la estética del universo de las viñetas. De este modo, Comic Workshop es una solución suficientemente completa que no puede ser una alternativa a un conjunto de herramientas (tanto en software como en hardware) profesionales, pero sí permitirá pasar un buen rato, ser creativo y conseguir buenos resultados en una máquina como la portátil de Nintendo.