Malas y alarmantes noticias sobre el espionaje industrial que China habría realizado a algunas de las empresas más poderosas del mundo y que ha sido destapado por Bloomberg.
Al "chip espía" que se encontraba en los servidores de Amazon o Apple hay que añadir ahora una nueva puerta trasera que, según este medio, el gobierno chino habría logrado colar en una importante teleoperadora de los Estados Unidos.
Según este nuevo informe, el pasado agosto esta empresa de telecomunicaciones descubrió un chip espía en un puerto Ethernet de uno de sus servidores, permitiendo a los hackers tener una puerta trasera para sacar información confidencial de la "teleco".
La empresa no sabe los datos que China habría podido sustraer a través de este chip pero, tal y como ocurría con los anteriores casos, todo apunta a que el gobierno chino sólo buscaba información privilegiada de las empresas como nuevos proyectos u otro tipo de datos confidenciales, y no información alguna de sus usuarios.
El servidor comprometido también fue fabricado por Supermicro y ensamblado, a priori, en una de las fábricas chinas en las que el gobierno del país asiático tenía trabajadores infiltrados para poder añadir estos "chips espía".