Con las discusión siempre presente de si se puede considerar o no que este juego es independiente, dados sus grandes valores de producción y el tener detrás una compañía tan importante como Microsoft, lo que es seguro es que Ori and the Blind Forest es una aventura de plataformas que ha enamorado a todos aquellos que lo han probado, con dos motivos de peso tan fuertes como su precioso apartado audiovisual y su cuidada jugabilidad, con un control muy preciso y cuidado.

Una aventura a lo metroidvania que se puede completar en unas pocas horas pero que deja un recuerdo muy grato, y que demuestra que un juego descargable no necesita reinventar la rueda para llamar la atención de todos y ser considerado unánimemente como un gran título. Seguiremos la pista a Moon Studios que esperamos nos vuelvan a sorprender con un juego tan bueno como este.