Ana Rosa Quintana, quien dominó las mañanas de Mediaset durante 18 años, vuelve a su franja horaria original tras un paso por las tardes que no cumplió con las expectativas de audiencia. Su regreso, a partir del 3 de febrero, busca ser un impulso para las cifras de Telecinco, realmente catastróficas en los últimos meses, especialmente desde la desaparición de 'Sálvame', un programa que sustentaba gran parte de su parrilla. Este cambio refleja también el deseo de la presentadora de retornar a un entorno donde se siente más cómoda.
Telecinco toca fondo en sus audiencias y ahora busca apoyarse en la mítica Ana Rosa Quintana y su vuelta a las mañanas para revitalizar su parrilla
Telecinco está prácticamente hundida. En su intento por llenar el vacío dejado por 'Sálvame', Ana Rosa no logró competir con Sonsoles Ónega de Antena 3. Otros programas como 'El diario de Jorge' y 'Reacción en cadena' también han fracasado en atraer espectadores de todas las edades, lo que ha dejado a Telecinco en una posición desfavorable, especialmente en el acceso prime time donde 'La Revuelta' y 'El hormiguero' dominan con mano de hierro.
La restructuración matinal no será completa; Ana Terradillos y Joaquín Prat mantendrán sus programas, 'La mirada crítica' y 'Vamos a ver', respectivamente. La cadena describe esto como una "remodelación de la franja matinal". Aunque <i>'TardeAR' continuará sin Ana Rosa, bajo la conducción de Frank Blanco y Verónica Dulanto, su productora, Unicorn Content, seguirá controlando gran parte de la programación de Telecinco, desde la mañana hasta la tarde.
Las audiencias de 'TardeAR' han sido decepcionantes, con cifras que no superan el 10%, llegando a un mínimo del 7,7% recientemente. En contraste, Sonsoles Ónega mantiene una audiencia estable, a menudo superando el 10% de share. Este cambio podría estabilizar las mañanas para Telecinco, pero deja la tarde en una situación precaria. Por la noche, aunque los realities como 'Gran Hermano' tienen su público, la ausencia de un competidor fuerte contra 'El Hormiguero' y 'La Revuelta' dificulta el arrastre de audiencia hacia sus programas de prime time.