Ahora me ves 3 ha ejecutado su mejor truco en años: plantarse en lo más alto de la taquilla y eclipsar sin despeinarse al despliegue pirotécnico de The Running Man de Glen Powell y al segundo fin de semana de Predator: Badlands, el aclamado reinicio del mítico cazador interestelar.
No está nada mal para una saga que llevaba desde 2016 sin asomar la chistera. La tercera entrega ha recaudado 21,3 millones de dólares en Estados Unidos y un solvente botín internacional de 54,2 millones en 64 territorios, sumando un total global de 75,5 millones. Un auténtico soplo de aire fresco para Lionsgate.
Ahora me ves 3 vence y The Running Man tropieza en taquilla y queda muy por debajo de las previsiones más conservadoras
Y lo necesitan. El estudio venía de encadenar tropiezos como Ballerina o Good Fortune, pero este éxito podría marcar un cambio de rumbo justo antes de estrenos clave como The Housemaid en diciembre o los pesos pesados de 2026: Michael y The Hunger Games: Sunrise on the Reaping. Ruben Fleischer, curtido en Venom y Zombieland, dirige esta nueva aventura en la que regresan Eisenberg, Harrelson, Fisher y Franco, ahora acompañados por un relevo generacional diseñado para atraer a nuevos espectadores.
En contraste, The Running Man ha sufrido un varapalo serio: segundo puesto y 17 millones en su debut, muy por debajo de lo esperado para una producción de 110 millones. Ni el tirón de Powell ni la firma de Edgar Wright han logrado evitar un estreno frío que recuerda al tropiezo de Last Night in Soho. De hecho, los analistas ya hablan de un film “muerto en el agua”.
Mientras Predator: Badlands se hunde un 68% en su segunda semana y Keeper, el nuevo intento de terror indie de Osgood Perkins, apenas roza los 2,5 millones, la taquilla estadounidense cierra el fin de semana con 75 millones totales. Un respiro mínimo antes del huracán que se avecina con Wicked: For Good, llamada a reanimar definitivamente un otoño para olvidar.















