Francis Ford Coppola, que se recupera del fracaso histórico de Megalópolis con una nueva película, lleva varios meses criticando duramente el estado de la industria de Hollywood, afirmando que no hay espacio para la creatividad, algo en lo que Sean Penn está de acuerdo. Volviendo la vista atrás, y tras el arrollador éxito de El padrino, Coppola no tenía intención de dirigir su secuela, pese a las persistentes demandas de Paramount Pictures. Pero al final, accedió, pese a sabiendas de que su relación con el estudio no sería algo fácil. Y lo logró: El padrino: Parte II se consolidaría como una obra maestra para muchos, considerada incluso "la mejor secuela de la historia". Pero ahora se arrepiente en cierta manera de una controvertida decisión.
Francis Ford Coppola pide disculpas por la tendencia en Hollywood que provocó El Padrino: Parte II
El cineasta intentó zafarse de la producción proponiendo a Martin Scorsese como director para la segunda entrega, llegando incluso a exigir un salario exorbitante que, para su sorpresa, Paramount aceptó. Coppola utilizó todo tipo de estrategias para esquivar el proyecto, pero al final el estudio cedió a muchas de sus demandas, logrando traerlo de vuelta a regañadientes.
Pero curiosamente, de entre todas las decisiones que tomó en torno a la secuela, hay una en particular que Francis Ford Coppola lamenta profundamente: añadir Parte II al título de la película.
Coppola, que reconoce que inspirado en las grandes producciones rusas de Eisenstein, como Iván el Terrible: Parte I y Parte II (La conjura de los boyardos), pensó que este guiño podría ser motivo suficiente para que el estudio se echara atrás en su empeño por seguir adelante. Pero no fue así. En una reciente entrevista con The Washington Post, el ahora director de la fallida Megalópolis reflexionó sobre el impacto de esta decisión. La etiqueta "Parte II" no solo fue aprobada por el estudio, sino que marcó el inicio de una tendencia que continúa vigente en la industria cinematográfica y cambio la manera de producir en su conjunto.
"Soy el idiota que inició los números en las películas de Hollywood. Estoy avergonzado y pido disculpas a todos", confesó Coppola. Sí, aunque las secuelas existían en el cine, la práctica de numerarlas o dividirlas en "partes" era mucho menos común, y siempre se buscaba un título alternativo como 'Las nuevas aventuras' o 'El regreso', que intentara apelar a la existencia de una primera parte. Coppola jamás imaginó que esta elección acabaría siendo adoptada como un estándar por los grandes estudios y que, a día de hoy, persistiría como uno de los males que aquejan a la industria cinematográfica en su conjunto. No tenemos que mirar muy atrás, ya que Dune: Parte dos o Wicked: Parte dos -que se estrena el año que viene- demuestran que la nomenclatura ha venido para quedarse.