El anuncio de Secret Level por parte de Prime Video sorprendió a propios y extraños, más y cuando comenzó a acumular gran talento en forma de actores de la talla de Arnold Schwarzenegger y Keanu Reeves, que prestan sus voces a uno de los episodios de esta espectacular serie que captura y encapsula de forma meritoria un buen puñado de atractivos y fascinantes universos, sagas y personajes del ocio digital.
Es esta fascinación la que, a través de una poderosa narrativa animada, la que nos permite explorar lo digital y lo interactivo de nuestro hobby a través de una nueva expresión audiovisual en formato de múltiples cortometrajes. Sí, Secret Level, es una ambiciosa serie antológica que demuestra ser un canto de amor a los videojuegos y a quienes los juegan. Concebida y producida por Tim Miller, el creador de Love, Death + Robots, esta propuesta para adultos -importante esto último- se sumerge en los mundos de algunos de los videojuegos más populares, hilando historias originales que celebran tanto la cultura gamer como las posibilidades del medio animado. En Vandal hemos podido ver la serie en adelanto y os contamos qué nos ha parecido sin spoilers de ningún tipo.
El hechizo de lo digital y los videojuegos es más tangible que nunca: Secret Level de Prime Video y Tim Miller hace justicia al legado de Love, Death + Robots
Secret Level es, ante todo, la apuesta de Tim Miller, un cineasta en cuyo currículo abarcan desde el éxito inesperado de Deadpool con Ryan Reynolds hasta su citada colaboración con Netflix en el también revolucionario producto antológico que es Love, Death + Robots y que bien podría ser el germen de esta ficción que nos ocupa. En otras palabras: es un nombre que, a día de hoy, es un sinónimo de creatividad y riesgo. Miller ha sabido aprovechar las libertades del formato antológico para ofrecer una exploración visual y narrativa sin restricciones, transformándolo en un laboratorio donde géneros como la ciencia ficción, el terror y la fantasía cobran nuevas dimensiones. Con Secret Level, Miller no solo expande este legado y reafirma su gran talento como realizador y productor, sino que también constata su obsesión por las narrativas directas e intensas.
El conjunto de episodios se plantea como una contundente obra que trasciende el simple homenaje para convertirse en una reflexión sobre el impacto de los videojuegos en la cultura contemporánea. Esta afirmación puede parecer un tanto exagerada, sobre todo ahora que estamos acostumbrados a las críticas en términos absolutos -todo es una obra maestra o una mierda, sin paliativos ni escalas de por medio-, pero es el poso que nos deja tras pasar un buen tiempo con estos episodios y saboreándolos debidamente. No, no es una serie perfecta, ni mucho menos, y hay una cierta disparidad entre los capítulos -como ocurría en la también brillante Star Wars: Visions-, pero el balance es positivo.
Cada episodio, respaldado por un reparto que haría envidiar a cualquier superproducción de Hollywood, ofrece una mirada a los mundos digitales que han capturado la imaginación de millones a lo largo de múltiples sagas, consolas y dispositivos. Figuras icónicas como Arnold Schwarzenegger, Keanu Reeves y Gabriel Luna encabezan un reparto que conjuga la nostalgia cinematográfica con la actualidad televisiva y del videojuego, uniendo a veteranos del cine de acción con estrellas emergentes y voces reconocidas del mundo del entretenimiento interactivo. Sólo hay que mirar los títulos de crédito que acompañan a los capítulos de Secret Level para hacernos una idea de la enorme cantidad de talento que hay detrás de la ficción de Prime Video.
La inclusión de nombres como Laura Bailey, una de las actrices más veneradas en el ámbito del doblaje y conocida por su trabajo en The Last of Us Part II o La leyenda de Vox Machina, refuerza la idea de que esta serie no solo celebra a los videojuegos como producto de entretenimiento, sino también como un arte multifacético que involucra tecnología, actuación y narrativa. Además, el propio formato se presta a ello, ya que se presta a la variedad estilística, deslumbrándonos con episodios que mezclan lo hiperrealista con lo estilizado, una de las marcas de identidad de Miller desde sus días en Blur Studio. Eso sí, debemos decir que, al contrario que Love, Death + Robots, donde sí había una mayor propensión al riesgo visual y artístico, la gran mayoría de cortos de esta ficción ahonda en un estilo de animación más conservador.
En Secret Level, Miller también cuenta con el evidente toque de Dave Wilson, amigo y colaborador del primero, así como productor ejecutivo de la serie. Wilson, conocido por su destreza visual como director de Bloodshot -lo único salvable de aquel inefable proyecto con Vin Diesel- y supervisor de efectos en proyectos como Avengers: Age of Ultron, aporta una perspectiva técnica que complementa la visión narrativa de Miller. Su corto, el basado en Warhammer 40.000: Space Marine 2 -que cuenta con el mismísimo Titus de protagonista- es uno de los más viscerales y espectaculares. Sentarse a ver Secret Level es entrar una agradable disociación lúdica, que nos ha parecido increíble, como hacía tiempo que no veíamos, sobre todo si acabamos dejándonos llevar por las diferentes historias de la pléyade de videojuegos que tienen representación en pantalla.
Un universo de videojuegos a través de miradas muy diferentes: Secret Level encapsula un buen número de historias a la perfección
Pero, ¿qué juego o universos toca Secret Level? Pues un montón. Lo cierto es que la producción de Amazon Studios goza de distintas adaptaciones de videojuegos, desde el universo postapocalíptico con mechas de Armored Core, pasando por un cúmulo de héroes de PlayStation en PlayTime, con la aparición de Kratos de God of War o los luchadores de Helldivers II. También tenemos las aventuras en templos perdidos de Spelunky, las luchas de artes marciales de Sifu o la aparición de la fantasía de espada y brujería de Dragones y Mazmorras. Incluso el desaparecido Concord de PlayStation y Sony tiene su segmento, en un capítulo en el que podemos hacernos una idea de lo que este universo podría haber sido.
También hay espacio para Unreal Tournament -los más veteranos del lugar pueden estar contentos, se hace justicia al shooter con un montón de guiños- y Mega Man, en un corto que recoge de forma inteligente el espíritu de la saga de Capcom. Más flojas nos parecen las adiciones de Crossfire -en una secuencia extendida de acción que parece sacada del acto final de The Equalizer II de Denzel Washington-, Honor of Kings, el MOBA de Tencent o la inclusión de New World, el juego de rol multijugador de Amazon, que aunque cuenta con una historia inteligente, no dice demasiado a nivel de personalidad artística ni deja demasiado poso en el espectador. Son productores de la serie, así que alguna concesión debe haber.
Pero sin contar Exodus -el nuevo juego de acción y rol AAA en el que la humanidad busca un nuevo hogar-, el corto que más nos ha sorprendido por lo arriesgado de su interpretación es el relativo a Pac-Man. Hablamos de un episodio que hace una adaptación muy oscura y alegórica del famoso comecocos que no dejará indiferente a nadie. En otras palabras: es raro de narices pero brillante.
Una serie que respira amor por los videojuegos y que demuestra la relevancia del ocio digital: Amazon se pasa el juego con Secret Level
Secret Level, que se estrena el 10 de diciembre en Prime Video, cuenta con una premisa y un pedigree creativo que la posicionan como una de las mejores series del panorama actual. Es curioso que sea Amazon, plataforma que ya estrenó la notable Fallout a comienzos de año, la que nos vuelva a presentar una producción que sienta un precedente en el género de las adaptaciones de videojuego y que, además, supera las expectativas que teníamos puestas en ella. Creemos que puede igualar el éxito de Love, Death + Robots, algo que no es moco de pavo, sobre todo si os recordamos que aquella serie ganó premios Emmy.
En un mundo donde los videojuegos han superado al cine y la música en ingresos y relevancia cultural, una serie como Secret Level no solo está destinada a ser un entretenimiento de calidad, sino también un recordatorio del poder transformador de los mundos virtuales. La nueva ficción de Prime Video tiene el potencial de convertirse en un nuevo estandarte para la animación antológica. Se han pasado el juego.
