Madame Web no tiene salvación. Es el gran fracaso de Marvel y Sony, uno de los primeros batacazos de 2024 y un filme que promete hacer huella en el sentido negativo en la historia del cine. La cinta con Dakota Johnson, que ha sufrido un montón de cambios en su producción, no ha conseguido levantar el vuelo tras su traumático estreno en cines. Mejor suerte ha tenido Bob Marley: One Love, que sigue reinando en la taquilla gracias a la falta de competencia, recaudando más de 120 millones de dólares en todo el mundo, cubriendo los gastos de un presupuesto menor -de unos 70 millones- y dándole vida a una producción que ha superado las expectativas de Paramount.
Madame Web no funciona y se constata el fracaso: Sony tiene un problema con su universo de Marvel
No hay duda: One Love ha sido un éxito de taquilla casi por sorpresa, recaudando más de 71,1 millones de dólares en Estados Unidos y más de 120 millones de dólares a nivel mundial. Teniendo en cuenta que el presupuesto de Paramount para el filme ha sido de alrededor de 70 millones de dólares y el estudio sólo se queda con aproximadamente la mitad de las ventas de entradas, tendrá que seguir cantando unas semanas más, pero va por el buen camino. La secuela de la película de anime, auspiciada por Sony y Crunchyroll, Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba – To the Hashira Training, que en Vandal hemos visto en adelanto, no ha comenzado nada mal, con más de 28 millones de dólares en todo el mundo como explican en Variety.
Es cierto que las ventas de entradas son ligeramente mejores que las de su predecesor, Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba — To the Swordsmith Village pero muy por detrás del éxito de 2021, que se estrenó en mitad de la pandemia y arrasó en los cines. Pero el fracaso sigue siendo Madame Web.
La cinta de Sony ha caído al cuarto puesto en la taquilla, una caída del 61% con respecto a su estreno inicial, y se perfila, sin remedio alguno, como el segundo gran fracaso en los blockbusters estrenados este año, después de la comedia de espías de Matthew Vaughn con Henry Cavill, Argylle, que costó 200 millones de dólares y ha recaudado sólo 86 millones de dólares en todo el mundo. La producción basada en el personaje de Marvel ha citado más de 80 millones -sin contar publicidad-, por lo que los números no salen.
Sony tiene un grave problema, está atrapada en una red de araña de películas de gran presupuesto basadas en personajes de Marvel y Spider-Man que no ha logrado encontrar el punto exacto de interés de cara al público.