Joe y Anthony Russo, responsables de Vengadores: Endgame, son artífices de algunas de las películas de Marvel más importantes de la historia reciente. Autores de El agente invisible, que se estrena mañana en Netflix tras un fugaz paso en cines -ambos defienden el streaming ahora con uñas y dientes-, ambos directores han dejado claro qué esperan de la cacareada Fase 5 del Universo Cinematográfico de Marvel y han argumentado los motivos por los que creen que la Fase 4 de esta historia conectada, muy criticada por los fans y espectadores, es buena y distinta a todo lo anterior. En una entrevista con The Hollywood Reporter se sinceran.
Los directores de Vengadores: Endgame defienden la Fase 4 y admiten que es diferente y rompedora
Los hermanos Russo, tras poner patas arriba el Universo Cinematográfico de Marvel, decidieron centrarse en el streaming y probar suerte en otros formatos. Dirigieron Cherry en Apple TV+ con Tom Holland, se encargaron de producir Tyler Rake para Netflix, y ahora, para la misma plataforma, han puesto toda la carne en el asador con El agente invisible, una superproducción de acción y espías con Ryan Gosling, Chris Evans y Ana de Armas. Ambos cineastas, en la lína de lo que han destacado desde la propia Marvel, han defendido lo arriesgado de la Fase 4 de estas exitosas películas y han negado que exista una falta de rumbo como muchos fans y espectadores afirman, con entregas y personajes que parecen tener muy poco que ver entre ellas.
"El éxito abrumador de estas películas ha hecho que representen algo quizá inalcanzable para otras, por el motivo que sea. No todas las películas tienen que gustar a todo el mundo”, ha defendido Anthony Russo. Joe Russo, por su parte, cree que el odio es un proceso inevitable entre los espectadores y que, de una forma u otra, todos hemos pasado por esa fase cuando éramos jóvenes.
Joe Russo va más allá y lo compara con su juventud y su obsesión por U2. "Cuando tenía 19 años me encantaba U2. Entonces empezaron a tener cierto éxito comercial, más allá de sus primeros días en MTV, y de pronto se convirtieron en la banda más grande del mundo", recuerda el cineasta.
"Y me dije 'odio a U2, estoy harto de U2'. Solo era mi ego tratando de definirse contra las masas. Más tarde, unos 10 años después, me dije ‘adoro U2, ¿por qué me puse así?’. Y lo superé. Parece algo juvenil. Todo es triste, cínico y pesimista. Estamos hablando de películas que los niños de 10 años ansían ver, que recordarán durante décadas porque estuvieron en el cine con su abuelo. No sé, dame un respiro”, concluía al respecto, dejando claro que la dirección de Marvel en esta Fase es distinta y que, simplemente, el público puede que esté pasando una fase. Ambos directores, en declaraciones para The Direct, han vuelto a decir lo que ya sabíamos: que Spider-Man: No Way Home fue su película favorita de esta etapa.
"Quiero decir, No Way Home fue increíble. Me encanta esa película, es una de las mejores experiencias que he tenido en el cine en mucho tiempo. Así que, ya sabes, me encanta lo diversa que se está volviendo Marvel. Adoro las decisiones que están tomando para nadar entre distintos géneros, desde películas de terror a comedias absurdas" concluían, afirmando que hay muchos riesgos creativos en esta nueva dirección de la empresa capitaneada por Kevin Feige.