Sam Raimi es uno de los mejores directores y productores de cine. Generalmente, todo lo que toca triunfa, es de una gran calidad y consigue encandilar a los más variados espectadores. Cuando le encargaron dirigir las primeras películas de Spider-Man, marcando para siempre una nueva etapa en el cine comercial proveniente de Hollywood, todo lo salió a las mil maravillas. Al menos durante las dos primeras películas de su trilogía sobre el arácnido. Spider-Man 3 fue criticada por suponer un evidente bajón en calidad con respecto a las dos anteriores, y eso marcó al cineasta.
Durante años, rechazó volver a Marvel por aquella mala experiencia. Aunque la tercera entrega de las aventuras cinematográficas de Peter Parker fue un éxito de taquilla sin igual, finalizando una etapa para Tobey Maguire en la gran pantalla, Raimi y los suyos fueron señalados por bajar el listón dejado por la excelente Spider-Man 2. Por eso, cuando le ofrecieron volver al género de los superhéroes con Doctor Strange in the Multiverse of Madness, algo con lo que Marvel Studios soñaban desde hace algún tiempo, dudó. Así lo ha relatado en una entrevista a Collider.
Sam Raimi dudó: no sabía si volver al universo de Marvel
"No sabía que podía afrontarlo de nuevo, no quería volver al cine de superhéroes, el final que tuve fue terrible al haber sido el director de Spider-Man 3", arranca el cineasta. "Internet ardió durante meses, a la gente no le gustaba esa película y me lo hicieron saber", prosigue. "Así que, como es lógico, fue difícil hacerme a la idea de regresar al género.
Sin embargo, descubrí que había una oportunidad de hacer las cosas bien con Doctor Strange 2. Mi agente me llamó y me dijo: ‘están buscando un director en Marvel para esta película y surgió tu nombre. ¿Estarías interesado?’ Y pensé: ‘Me pregunto si todavía podría hacerlo’. Este tipo de películas son realmente exigentes", añade el realizador.
"También he de decir que siempre m gustó mucho el personaje de Doctor Strange. No era mi preferido, pero estaba entre mis héroes favoritos. Me encantó la primera película, pienso que Scott Derrickson hizo un trabajo increíble. Entonces acepté el trabajo. Dejaron al personaje en un gran lugar para trabajar con él. No pensé que haría otra película de superhéroes. Simplemente sucedió", admite Raimi. De hecho, Benedict Cumberbatch, quien protagoniza el filme como Hechicero Supremo, considera que Multiverse of Madness es la cinta de superhéroes en solitario más ambiciosa que ha hecho jamás, comparándola con No Way Home y dejando claro hasta qué punto se avecinan cambios profundos en la Fase 4 de Marvel.
En la misma línea, Elizabeth Olsen, que encarnará a la Bruja Escarlata en la película, cree que además de una cinta de aventuras muy grande es bastante 'terrorífica', por lo que esta hipotética colección de multiversos y hechiceros de gran poder, promete ser una de las citas ineludibles para los aficionados a las películas de superhéroes. Doctor Strange y el multiverso de la locura se estrenará en cines el 25 de marzo de 2022.