Pocos remakes hay más esperados que los de las dos primeras entregas de Max Payne que está desarrollando actualmente Remedy Entertainment, dos títulos de acción muy queridos por los fans del género que regresarán próximamente.
Por desgracia, la información sobre este proyecto es muy escasa a día de hoy, ya que la compañía no ha querido soltar prenda todavía sobre estos remakes. Eso sí, ahora, en el nuevo informe financiero que Remedy acaba de publicar para sus inversores, se han confirmado algunos datos de interés que nos permiten hacernos una mejor idea sobre la escala de esta producción.
Unos remakes cuyo desarrollo progresa a buen ritmo
Siendo un poco más concretos, el estudio ha confirmado que los remakes de Max Payne 1 y 2 tienen un presupuesto muy similar al que tuvo Alan Wake 2. Si bien no se ha confirmado de forma oficial el presupuesto de este aclamado survival horror, las últimas informaciones apuntan a que fue de unos 70 millones de euros aproximadamente.
Además, aseguran que el equipo ha hecho avances significativos en su desarrollo durante los últimos meses y que esperan que el proyecto avance a la siguiente fase de su desarrollo durante la primera mitad de 2024. Lamentablemente, todavía no pueden hablar sobre fechas de lanzamiento, así que nos tocará seguir esperando.
Los remakes de Max Payne y Max Payne 2: The Fall of Max Payne se lanzarán como un único título para PC, PlayStation 5 y Xbox Series X/S, y utilizarán el motor gráfico Northlight, el mismo que se usó para juegos como Control o Quantum Break. Ambos juegos fueron desarrollados por la propia Remedy antes de que Rockstar Games se hiciera con la licencia para realizar su tercera entrega.
