Cada año que pasa la diferencia entre los gráficos que vemos en los videojuegos y las imágenes reales se hace más fina siendo cada vez más difícil distinguir lo que es real y lo que es un juego, algo que se ha enfatizado en 2023 con algunos anuncios de videojuegos que incluso han creado polémica al hacer pensar que estábamos ante imágenes reales.
En Vandal vamos a repasar algunos de estos juegos y a contaros por lo que, a pesar de ser proyectos independientes desarrollados por pequeños estudios, lucen con un aspecto tan cercano a la realidad a pesar de no tener un gran equipo detrás para darles vida.
La magia de Unreal Engine 5
Hay algo que los tres juegos de los que os vamos a hablar en esta noticia tienen en común y es su motor gráfico que no es otro que Unreal Engine 5.
Este motor creado por Epic Games está especialmente ideado para ser multiplataforma, fácilmente escalable y sencillo de utilizar.
Se trata de uno de los motores gráficos más avanzados del mercado que además es muy accesible para pequeños desarrolladores ya que en la mayoría de los casos su uso es gratuito y Epic Games solo pide un porcentaje de los ingresos a partir de que un videojuego genera más de 1 millón de dólares en ventas, momento en el que Epic Games comienza a cobrar un 5 % por haber utilizado su motor gráfico.
Este motor gráfico además tiene un montón de herramientas a disposición de los creadores entre las que para nosotros destacan Lumen, un ambicioso sistema de iluminación en tiempo real que es clave por el tratamiento de la luz en el realismo de estos videojuegos y que nos daba muestras de su potencial en esta demo técnica:
También se han añadido otros sistemas como el Full-Body IK para que los personajes interactúen de forma más natural con el entorno, mejoras een las animaciones o un sistema de físicas llamado Chaos Physics para lograr una mayor precisión y realismo en todo lo que vemos en estos videojuegos.
Además, Unreal Engine 5 también cuenta con un montón de librerías de materiales como Quixel y sus Megascans gracias a las cuales los desarrolladores pueden tener acceso a un amplio abanico de materiales tremendamente realistas a nivel visual con un precio muy ajustado (incluso gratuito en algunos casos).
Todo esto unido hace que estos estudios no necesiten tener invertir mucho tiempo, dinero o personal para comprar (o crear) un motor gráfico potente o dar vida virtual una gran cantidad de elementos gráficos como paredes, árboles, o rocas, ya que cuentan con un amplio catálogo de recursos a su disposición, siendo mucho más asumible para un estudio pequeño el poder crear un videojuego con un gran apartado gráfico.
Unrecord
Entrando ya en ejemplos concretos, el primer juego que hizo levantarnos del asiento por su fotorrealismo este año fue Unrecord, un título que se presentó en el mes de abril y que está siendo desarrollado por un pequeño estudio francés llamado DRAMA. El uso de la iluminación es particularmente inteligente en su primer tráiler y era fácil que cualquiera que no viese el juego en una pantalla medianamente grande pudiera confundirlo con imágenes reales de una cámara corporal de un policía.
En cuanto al videojuego, en este título vamos a tener que tomar el papel de un detective que debe de resolver varios casos y aunque su vídeo inicial se centra en la acción lo cierto es que sus creadores apuntan a que la carga narrativa será más importante que los momentos de disparos.
Bodycam
Cogiendo el testigo de Unrecord nos llega BodyCam que apuesta por la misma perspectiva de cámara corporal que vemos en el juego anterior y también por una temática de acción "policial" pero si el juego de DRAMA es una historia para un jugador, esta obra de Reissad Studio es un título multijugador competitivo con unos gráficos de aúpa en el que aseguran que cada bala cuenta:
Paranormal Tales
Por último tenemos Paranormal Tales, un juego de nueva generación que comparte con los dos ejemplos anteriores los gráficos hiperrealistas, el motor Unreal Engine 5, utilizar una perspectiva desde una cámara corporal y estar siendo desarrollado por un pequeño estudio independiente.
Eso sí, en esta ocasión lo que nos va a proponer es una historia de terror en la que la exploración jugará un papel clave y que se ha creado como una especie de evolución del emblemático P.T. de Kojima. Desde luego, es otro de esos juegos que tenemos ganas de ver aquí en Vandal.
