El auge de la venta de juegos en distribución digital, algo acelerado rápidamente por la pandemia de 2020, está poniendo las cosas difíciles para el formato físico. En Reino Unido la cadena Tesco -tercera tienda minorista más grande del mundo- dejará de vender videojuegos en sus 2800 establecimientos en cuanto se agote su stock actual.
La noticia era previsible tras las agresivas ofertas realizadas a lo largo de todo el año y según informa Gamesindustry el único producto que continuarán vendiendo son las tarjetas de puntos o monederos digitales. Tesco lo ha explicado sin muchos rodeos: la decisión se debe a las preferencias de sus clientes hacia el entretenimiento en distribución digital.
El medio también recuerda que GameStop Ireland ha cerrado sus 35 tiendas.
Ahora la mayoría de ventas son digitales
Un análisis del mercado de Reino Unido confirma que la mayoría de ventas de los juegos se hacen en las diferentes tiendas digitales de consolas y PC. Los cuatro grandes lanzamientos de junio -Diablo 4, Final Fantasy XVI, Street Fighter 6 y F1 23- vendieron menos de un 18 % en tiendas físicas, y con juegos de menor renombre este porcentaje suele ser mucho más pequeño.
Gamesindustry también recoge las declaraciones de GAME UK sobre su reciente apuesta por los juguetes y juegos de mesa, un efecto por la caída en los videojuegos. "Has visto lo que sucedió con la pandemia, con la venta de juegos en digital creciendo más rápido de lo que habíamos previsto.
Los clientes se fueron a las tiendas online, y aunque algunos han vuelto, no lo han hecho todos. Puedes comprobar que el mercado online es el 75 % del total. Antes de la pandemia era el 45 %", comenta Nick Arran, jefe de GAME UK.