Tras recibir su Nueva Partida+ a finales de enero, The Callisto Protocol se acaba de actualizar con otra desafiante modalidad pensada para los jugadores más habilidosos: se trata del Modo Hardcore, un estilo de juego que ya está disponible junto con la versión 3.02 del juego de Striking Distance Studios y Krafton.
Ready for a tougher challenge in The Callisto Protocol? Hardcore Mode is now out and FREE for all players.
The Outer Way Skin Collection is also available to season pass owners.
For full details: https://t.co/r4kZofi9Ii pic.twitter.com/TXRZY46gT8— The Callisto Protocol (@CallistoTheGame) February 7, 2023
¿En qué consiste el Modo Hardcore de The Callisto Protocol?
El Modo Hardcore se describe como "una versión desafiante de la experiencia de supervivencia y terror de The Callisto Protocol, con la intención de llevarte a tus límites".
Entre sus características incluye mayor daño enemigo, disminución del daño cuerpo a cuerpo, aumento de la velocidad de la mutación de los enemigos y otros cambios como que la munición, la salud y los créditos son más difíciles de conseguir, además de que los enemigos no arrojarán botiquines. Como veis, será todo un desafío; os recomendamos tener nuestra guía a mano.
Junto a este nuevo modo también se ha añadido un Modo Hardcore Nueva Partida+, que requiere completar el juego estándar del modo Hardcore, y nuevos logros. El parche 3.02 también incluye novedades, cambios y mejoras menores, centradas en la solución de problemas y en optimizar aspectos como el ray-tracing de la versión de ordenadores. Podéis ver todos los detalles en las notas del parche oficiales.
¿Merece la pena The Callisto Protocol?
The Callisto Protocol está disponible en PS5, Xbox Series X/S, PS4, Xbox One y PC. En Vandal pudimos jugarlo para contaros en nuestro análisis que es "un juego que combina la ambientación de Dead Space con la jugabilidad de The Last of Us y, además, añade sus ideas propias, y que consigue ofrecernos una experiencia lineal propia de hace dos generaciones que muchos echamos de menos.
