Elite Boss Tech, un equipo de desarrolladores de software para hacer trampas en Destiny 2 y otros videojuegos con modos multijugador, ha acordado pagar 13,5 millones de dólares por daños y perjuicios a Bungie tras un largo proceso judicial que se ha extendido durante casi un año (vía Kotaku). El grupo compartía a través de su sitio web un software de trampas para el shooter de Bungie, algo que llevó al estudio a demandarlos por infracción de derechos de autor.
La desarrolladora se encuentra actualmente enzarzada en múltiples demandas contra varios sitios web que publican sin su consentimiento software de trampas que desequilibra las partidas de Destiny 2. El pasado 9 de junio, Robert James Duthie Nelson, propietario de Elite Boss Tech, admitió que su software de trampas añade una "superposición gráfica" no autorizada en el juego que implementa un código de terceros en el código con derechos de autor de Bungie, lo que constituye una "obra derivada no autorizada". Nelson y su equipo se han comprometido a no crear ni distribuir nunca más ningún tipo de software que infrinja los derechos de Bungie.
El software eludía las medidas de seguridad de Bungie
Por otro lado, Nelson aceptó que su software de trampas eludía las medidas tecnológicas específicas que Bungie había creado para el juego con la intención de controlar quién podía acceder a qué archivos específicos. El hecho de haberlas eludido constituye, como os podréis imaginar, una violación directa de la DMCA.
Según los documentos judiciales, el software para hacer trampas se descargó unas 6765 veces y cada descarga equivale como un dispositivo de elusión independiente e infractor. Si multiplicamos el número de descargas por "los daños legales de 2000 dólares por violación", el pago total es de 13.530.000 dólares.