El mercado del coleccionismo de videojuegos está alcanzando cifras que frecuentemente superan las decenas de miles de dólares. Ese ha sido el caso de un extraño cartucho de Super Mario Bros. 3 para NES, que se ha vendido a través de Heritage Auctions por 31.200 $. El precio no se debe a su estado impoluto o a que aún esté precintado, sino más bien a todo lo contrario.
Este Super Mario Bros. 3 es un prototipo que de algún modo ha abandonado las oficinas de Nintendo. El cartucho en sí es del Kid Icarus de NES, pero fue modificado para añadir los EPROM (ROM programable borrable, por sus siglas en inglés) del juego del fontanero. Sobre la etiqueta de Kid Icarus se puede ver escrito con rotulador "Super 3" y otras partes del EPROM pegadas con cinta adhesiva.
"Este prototipo fue hecho a partir de un cartucho destruido de Kid Icarus", se puede leer en la web de subastas para coleccionistas. "Partes del cartucho han sido cortadas para exponer los EPROM.
En cada sentido de la palabra, estos EPROM son el 'corazón' del prototipo, ya que contienen datos antes del lanzamiento de Super Mario Bros. 3".
Dos de estos EPROM tienen escrito, a mano, "SM-3" y "SMB3" con una fecha que indica "febrero de 1990" (el juego se lanzó en Estados Unidos el 12 de febrero de ese año). "Puede asumirse que esto indica que este cartucho es uno de las etapas finales del desarrollo del juego", continúa la descripción del producto. "'Super 3' ha sido garabateado en lo que parece ser rotulador azul en la parte frontal del cartucho en la etiqueta de Kid Icarus, de una manera que parece apresurada e informal por un empleado de Nintendo".
Un Super Mario Bros. de NES se vendió por 114.000 dólares
Este 2020 hemos visto cómo productos de Nintendo se han subastado por cantidades estratosféricas. Si ya el año pasado llamó la atención un Super Mario Bros. de NES que se vendió por 100.150 dólares, el mismo juego se vendió este año por 114.000 dólares. Además, un prototipo de Nintendo PlayStation se colocó por 300.000 dólares en subasta pública, aunque su dueño rechazó el año anterior 1,2 millones.