Sony está celebrando los 108,9 millones de PlayStation 4 vendidas, unos números de récord aunque todavía distantes de los conseguidos por PlayStation 2. Mientras la empresa se congratula por los buenos resultados de su sistema de sobremesa actual, ya comienza a planificar lo que está por venir. Y PlayStation 5, la nueva consola que ofrecerá mejores gráficos y tendrá características avanzadas por como ray tracing y disco duro de estado sólido, es su máxima prioridad. Entre las incógnitas, el precio y la fecha de lanzamiento. Ahora Sony, a través de su máximo responsable de finanzas, Hiroki Totoki, afirma que el coste de venta al público de la consola no se ha decidido.
PS5 no tiene un precio final estipulado de momento
Hiroki Totoki, responsable de operaciones comerciales y de las finanzas de Sony, ha afirmado que la compañía todavía no está del todo segura del precio final al que se venderá PlayStation 5. La empresa está pendiente de un buen número de factores y elementos, como el precio de los componentes o la mano de obra, y quieren asegurarse de que pueden ofrecer un producto competitivo y a buen precio, algo vital de cara a tener éxito en las primeras semanas. "Primero, debemos controlar de manera exhaustiva el costo de la mano de obra", comentaba Totoki. "Y en estos momentos debemos tener en cuenta cuántas consolas podemos preparar para la salida del producto, por lo que tenemos que trabajar de forma especial en la producción y las ventas, preparando el volumen correcto de unidades a distribuir a medida que lancemos el sistema", remarca en relación a los costes operacionales de llevar el sistema a los consumidores.
"Lo que no está muy claro en estos momentos es porque estamos decidiendo cosas, por lo que es muy difícil discutir algo sobre el precio ahora mismo, y dependiendo del nivel de precio que decidamos, es posible que tengamos que determinar alguna promoción y cuánto costes estamos dispuestos a pagar por ella", remarca en relación a las posibles variantes que se pueden dar conforme se acerque el momento de designar un coste final al dispositivo. "Así pues, es una cuestión de equilibrio", matiza Totoki.
"Y por eso, porque todo se trata de un equilibrio, es muy difícil decir nada concreto en este momento, pero cuando afirmo que todo es una transición cómoda y suave, es porque estamos eligiendo todo de forma óptica y precisa, y queremos dar el mejor equilibrio en términos de beneficios a lo largo de la vida útil y el ciclo comercial del producto", concluía, en relación a la transición que vivirá la empresa cuando la nueva PlayStation se ponga en el mercado. La quinta máquina de sobremesa se espera para la campaña navideña.
El factor de China, los aranceles y el coronavirus
El pasado verano, la guerra comercial entre Estados Unidos y China preveía un aumento del coste de fabricación de las nuevas consolas, pero ambas potencias llegaron a un acuerdo el pasado diciembre que frenó el aumento de precio y que abrió un nuevo horizonte. Los gobiernos de Donald Trump y Xin Jinping confirmaron que ahora los precios de los componentes y el ensamblado de las consolas como PS5 y Xbox Series X sería menor, aunque el coronavirus de Wuhan podría dañar el desempeño de la economía asiática, con parones en las fábricas y escasez de mano de obra. Los analistas han adelantado un impaco económico muy negativo para 2020 que podría afectar al mundo entero, pues China representa el 18% del PIB mundial.
