Los juegos basados en películas nos han dejado auténticas obras maestras y auténticas chapuzas a lo largo de la historia, pero son una parte casi imprescindible de la industria. Aunque ahora está la licencia de Iron Man está en manos de Sony, los derechos del famoso superhéroe han pasado por varias manos, como las de Sega y Activision. En el caso de esta última, nos dejó un juego cancelado que hoy queremos recuperar aprovechando el lanzamiento de las últimas aventuras del alter ego de Tony Stark para la realidad virtual.
Entre 2003 y 2005, Z-Axis (conocidos posteriormente como Underground Development, y creadores de títulos como Dave Mirra Freestyle BMX o Aggressive Inline) estuvieron trabajando en un título para PlayStation 2 y Xbox protagonizado por el superhéroe, y que se conectaría narrativamente a la película de Marvel, que originalmente estaba prevista para 2006.
Aunque no tenía título definitivo, este Iron Man iba a ser un título de acción en tercera persona, que además tenía algunas ideas muy interesantes. La primera (algo que, en cierto modo, acabó haciendo el juego de Sega que sí llego al mercado) era potenciar el perfil inventor de Tony Stark y darnos la posibilidad de crear nuestras propias armas. Obviamente, habría ciertas limitaciones, pero podríamos combinar diferentes partes para diseñar nuestro arsenal y combinarlas a nuestro gusto para convertirnos en una máquina indestructible.
El proyecto de Z-Axis también tenía planeados diferentes momentos en primera persona, como una especie de disparo de precisión o diferentes puzles. Entre la selección de puzles, tendríamos que hackear dispositivos realizando minijuegos o alinear varios engranajes holográficos que se correspondían con el entorno para «encajar» el escenario. Otra habilidad interesante era la de poder levantar y manipular objetos con nuestras habilidades magnéticas, como si de telequinesia se tratara, o lanzar un potente rayo que rebotaba en las paredes, y podríamos usar ambas podríamos usar tanto para los puzles como para el combate.
Una de las prioridades del estudio era hacernos sentir dentro de la armadura, de ahí la posibilidad de combinar la primera y la tercera persona, pero, además, querían añadir una capa adicional de personalización, y estudiaron añadir una opción para poder usar nuestra propia música como banda sonora del juego, cargándola en el casco del traje. Imaginaos que comienza la acción, Iron Man le da al play, y empiezan a sonar nuestros temazos. Suponemos que esta característica habría sido exclusiva de Xbox, u opcional para los poseedores del disco duro de PS2.
Otro aspecto a destacar era el diseño de escenarios, con multitud de alturas en incluso zonas con gravedad modificada a lo Super Mario Galaxy que nos permitía movernos por las paredes de escenarios circulares. Estas eran ideas, al menos, planeadas durante los primeros meses de desarrollo, aunque no sabemos cuántas se llegaron a implementar en versiones más avanzadas, o las nuevas que se concibieron mientras trabajaban en el título.
Después de varios años en desarrollo, Activision decidió cancelarlo, pero por razones ajenas al juego. Marvel había retrasado la película, y suponemos que el coste de extender los derechos de la licencia y tener que reconvertir todo el trabajo a PlayStation 3 y Xbox 360 no les era rentable. En 2006, Sega se hizo con la licencia, y no sería hasta 2008 cuando por fin debutarían tanto la cinta como un nuevo juego, totalmente diferente del de Z-Axis.
Siendo honestos, el estudio americano sí que llegó a lanzar otro juego de superhéroes, X-Men: The Official Game, con una recepción muy mediocre, lo que despierta ciertas dudas sobre la hipotética calidad de este Iron Man. Quizás, Z-Axis no llevó muy bien la transición de los juegos de deportes extremos a las aventuras de superhéroes. En cualquier caso, es una pena que no tengamos ningún vídeo de la jugabilidad para valorar mejor un título que, estamos seguros, avanzó bastante en su desarrollo, si bien al menos quedan algunas pantallas para recordarlo.