Quantic Dream parece haberse coronado con su última aventura, en la que, según muchos, pule su fórmula jugable basada en combinar narrativa, decisiones y cinematografía. Quizás este tipo de concepto es el que ha definido al estudio francés, aunque no siempre ha sido así. Hasta que encontró su camino, el equipo de David Cage probó con diferentes géneros y propuestas.
De uno de ellos, Quark, una aventura para Dreamcast bastante original, ya os hablamos en Vandal. Hoy vamos a recuperar otro proyecto del que apenas tenemos detalles pero que nos parecen tanto o incluso más interesante. Se trata de [B]last, también escrito como (B)last.
Allá por el año 2000, la nueva generación de consolas —las de 128 bits— abría nuevas puertas para muchos desarrolladores, y para Quantic Dream supuso una época en la que podían experimentar. Ahora iba a cambiar por completo de género, pasándose a los beat ‘em up. La idea era ofrecer una aventura de acción al estilo de otros juegos de la época, como Primal, pero ambientándose en un universo que combinaba todo tipo de referencias de mundos fantásticos y de ciencia ficción. Así, econtraríamos referencias que iban desde las obras de Lovecraft a Matrix.
Apenas hay materiales visuales del proyecto, pero los pocos que quedan nos parecen, cuando menos, muy curiosos. Tenemos personajes humanos con diferentes atuendos: algunos parecen una especie de ninja modernos, y otros visten armaduras futuristas. Las criaturas van desde unas propias de los juegos de fantasía medieval a otras que parecen sacadas de un juego de terror. Vemos demonios, seres humanoides e incluso lo que parece ser una criatura gigantesca que atraviesa las paredes de un pasillo con sus garras mientras intentamos huir.
Uno de los artistas que trabajó en él, Jérôme Renéaume, lo describe como un cómic de serie B donde todo estaba permitido. Criaturas gigantescas, gore, tentáculos, armas… Aseguraba que, a pesar de lo desproporcionado y absurdo que pueda sonar, no se quedaba muy lejos de lo que vimos después con otros juegos de la industria, y aseguraba que él le veía potencial para convertirse en un éxito.
El proyecto estuvo en marcha durante unos meses, aunque no sabemos realmente hasta dónde llegó a progresar. El propio Renéaume explica que no todo el equipo estaba muy a favor de [B]last, lo que, suponemos, propició que se centraran en el mencionado Quark que, como ya sabéis, también acabó cancelado. David Cage explicó que el estudio no tenía recursos para sacar varios proyectos a la vez, por lo que tienen también que centrarse en un solo juego.
[B]last desapareció sin dejar rastro, aunque tenemos algunas ilustraciones que al menos nos permiten imaginar su universo. Es bastante triste no poder encontrarlas a más resolución para poder rescatar más detalles de esta mezcla tan extraña como prometedora. No sabemos cómo habría sido la incursión de Quantic Dream en el género de los beat ‘em up hace casi dos décadas. ¿Los veremos cambiar de registro en el futuro?