Japón como todo país en el mundo tiene una serie de visitas obligadas. Ya os hablé por ejemplo del santuario Meiji o el templo de Asakusa en Tokyo. Así, en la capital también tenemos el mercado de Harajuku, Akihabara, la torre de Tokyo, o en Kyoto una gran cantidad de templos y santuarios frecuentemente recomendados en las oficinas de turismo junto con otras ciudades como Nara, Nagoya, etc. Sin embargo, también como cualquier otro país, Japón tiene una serie de lugares algo más ocultos que no suelen estar en dichas recomendaciones e incluso alguno de ellos son desconocidos hasta por los propios japoneses. Os voy hablar de alguno de estos lugares, unos más famosos, otros menos.
Ushiku Daibutsu (el Buda de Ushiko). Mucha gente conoce y tiene como referencia al buda de la ciudad de Nara como la estatua más grande de Japón, sin embargo nada más lejos de la realidad. En la prefectura de Ibaraki se alza la estatua más alta de todo Japón, la tercera del mundo, con un total de 120 metros de altura y 4000 toneladas de peso. Sólo es superada por dos estatuas budistas de China y Myanmar (150 y 130 metros respectivamente). El viaje desde Tokio se puede hacer en el mismo día por un precio más que asequible y os aseguro que plantarse delante de esa monstruosidad es una experiencia inolvidable. Además, dependiendo de la época del año, alrededor del mismo se pueden observar varios tipos distintos de flores con colores muy vivos así como varios jardines y estanques. En fin, un paisaje maravilloso. Aparte, es posible introducirse dentro de la estatua y subir hasta el pecho del buda (85 metros) y ver una bonita panorámica del escenario y un pequeño museo interior. Eso sí, los miradores son meras cristaleras muy estrechas.
Dogo Onsen (Baños termales). Estos baños termales están situados en la ciudad de Matsuyama, en la prefectura de Ehime, en la isla de Shikoku. Cuenta con más de 1000 años de historia y está considerado como uno de los baños termales más viejos de todo Japón. El edificio está en plena ciudad, sin embargo ver la edificación con el diseño tradicional ya da que pensar que el lugar tiene su historia. Debido a mi problema en forma de tinta sobre la piel no he podido entrar al mismo, pero por conocidos os aseguro que también es una de las mejores opciones para visitar y relajarse. Tiene incluso un área reservada sólo para el Emperador y su familia. Si alguno ha visto la película El Viaje de Chihiro, Miyazaki cogió este Onsen como modelo para dicho film.
Isla de Utsukushima. Esta pequeñísima isla (30 kilómetros cuadrados) está situada en el Mar Interior de Seto, en la prefectura de Hiroshima. Está considerada como patrimonio de la humanidad por la Unesco y junto a ella, construido sobre el propio agua, tenemos el santuario de Utsukushima. Este templo estará más o menos invadido de agua dependiendo del estado de la marea. La isla además tiene un pequeño monte de más de 500 metros a la cual se puede subir casi a la cumbre mediante un teleférico y ver las increíbles vistas naturales y el santuario sobre el mar.
Nikko y Kamakura. Aunque estos lugares si pueden ser más conocidos, mucha gente suele hacer el recorrido Tokyo, Nara, Kyoto, Osaka y se olvida que desde Tokyo estos lugares pueden ser visitados en un día. Kamakura está a menos de una hora en tren y destaca su gran buda (aunque después de haber visto el de Ushiku el resto te parecen tremendamente diminutos) así como grandes concentraciones de la flor que podéis ver en la foto. Nikko por otro lado está un poco más lejos, en la prefectura de Tochigi y también cuenta con un gran número de templos y santuarios. Además allí se encuentra el mausoleo de Iemitsu Tokugawa (nieto de Ieyasu Tokugawa, fundador del shogunato Tokugawa tras la batalla de Sekigahara hasta la Restauración Meiji), además de un parque natural. Eso sí personalmente recomiendo ir en invierno, ya que suele nevar con asiduidad y las vistas de los bosques de bambú, templos y demás lugares gana exponencialmente en belleza.
Hakone. En la prefectura de Kanagawa. Aunque también es un lugar con cierto renombre, el relax y la tranquilidad son sus principales puntos fuertes, por lo tanto turistas más activos suelen olvidar este lugar en sus planes. Hakone destaca por su belleza natural, montañas desde las que se puede ver el Monte Fuji y sobre todo por sus onsen (baños termales, spas). Si bien es cierto que un buen Ryokan, con tu baño privado al aire libre y demás puede salirte por unos 200 euros la noche, imaginar estar a las 3 de la mañana en lo alto de una montaña, con unas vistas magníficas, viendo como nieva mientras tú te encuentras bien calentito introducido en un agua a más de 40º… ¿A que hay ganas de ir a Hakone ahora, no?
Bueno estos son algunos lugares básicos, algunos más conocidos otros no, pero un buen itinerario para salir de los clásicos viajes turísticos. Con seguridad iré informando de más lugares ocultos pero ahora creo que ahora tomare un buen baño…
