Los alemanes Piranha Bytes son los creadores de la serie de juegos de rol Gothic, una saga que tuvo mucho éxito con tres entregas y una expansión pero que por problemas de licencias perdieron el control sobre la marca, por lo que se decidieron a crear una nueva saga que se estrenaría en 2009: Risen. Un juego de rol y fantasía épica medieval con magia, dioses y titanes que a pesar de ciertos problemas técnicos gustó a los jugadores, gracias a una aventura profunda, una gran historia y mucha libertad para tomar decisiones y que estas influyeran en el desarrollo.
A principios de 2011 se anunció su secuela, y el universo Risen había sido tomado por una ambientación pirata muy atractiva, pudiendo navegar en aguas caribeñas de isla en isla.
Tras algún que otro retraso –hasta tres en consolas-, por fin salió para PC el pasado 27 de abril, manteniendo las señas de identidad de Piranha Bytes, con una aventura profunda, un argumento moldeable, una ambientación no muy explotada en los videojuegos y diferente, un sistema de combate mejorable, y lo que era peor de todo, diversos bugs y problemas técnicos que lo alejaban de un resultado notable, sin dejar de ser un buen título.
El primer Risen ya apareció en consola, concretamente en Xbox 360, con una conversión muy irregular, pero que pudo saciar la sed de este tipo de juegos para los usuarios de la plataforma de Microsoft. Este mes de agosto, casi con tres meses de retraso respecto a la versión de PC, Risen 2: Dark Waters va a llegar a consolas, Xbox 360 y PlayStation 3, con las mismas virtudes que la versión de ordenador, pero con todos sus defectos y algunos más, correspondientes al apartado técnico.
También la situación en el género está muy competida, en los últimos meses han aparecido juegos tan buenos como The Elder Scrolls V: Skyrim, Kingdoms of Amalur: Reckoning, The Witcher 2: Assassins of Kings en Xbox 360 –una genial conversión-, y Dragon's Dogma, por lo que no sabemos hasta qué punto los usuarios tienen todavía ganas y demandan más títulos de este estilo. Risen 2 tiene su propia personalidad y carácter, tanto por su ambientación pirata como por su sistema de juego, y creemos que podría tener un hueco si los problemas técnicos que hemos detectado en esta versión beta se solucionan.
La historia tiene un arranque muy sencillo y lineal, pero no hay que juzgarla por estas primeras horas, ya que poco a poco la trama y el desarrollo se van abriendo y dejando más libertad al jugador. La premisa es que un Kraken gigantesco está acabando con todos los barcos que se adentran en altamar de este mundo pirata, y sólo un héroe elegido puede acabar con él. Tendremos que abandonar nuestro cargo oficial en la Inquisición y adentrarnos en el mundo pirata, para conseguir un arma legendaria que pueda destruir a semejante monstruo.
Multitud de misiones secundarias, toma de decisiones que cambian el argumento, y un gran abanico de opciones para resolver una misma situación, ya sea sobornando, intimidando, convenciendo con nuestro don de gentes, cumpliendo alguna tarea que nos pidan o bien usando la fuerza bruta, conformando un juego bastante largo y con muchas horas por delante, además de rejugable. Es curioso cómo el dinero escasea respecto a otros RPG, y que no nos dan mascada la resolución de las misiones, sin flechas guía, y tendremos que apañárnosla para encontrar los lugares y sitios exactos donde cumplir los diferentes objetivos
El sistema de combate es uno de sus puntos más grises, usando el arte de la espada, armas de fuego y magia vudú, cuando se trata de combatir contra varios enemigos las pasaremos canutas, gracias un caótico sistema de fijación de objetivos. Los combos y los movimientos evasivos son muy limitados, y las animaciones un tanto anticuadas no hacen que los combates sean demasiado vistosos. Tenemos muy reciente en la memoria el genial sistema de combate Dragon's Dogma, que nos ha demostrado que un vasto y complejo título de rol también puede tener una buena jugabilidad a la hora de combatir.
Antes de entrar a hablar en profundidad de su apartado técnico en consolas, queremos dejar claro que hemos jugado a una beta para Xbox 360 que hemos recibido hace unos pocos días, y no sabemos exactamente su antigüedad, pero el juego, en estos momentos, se muestra en un estado muy precario. Queda un mes aproximadamente para que salga y sabemos que habrá elementos mejorados, pero sospechamos que no habrá un salto de calidad bestial, ya que los milagros en esto de la programación no existen.
Y si ya en PC os comentamos en su análisis que tenía unos errores de rendimiento muy importantes, aunque a nivel visual, en una imagen estática, era bastante bonito gracias a su ambientación y acertada dirección artística, esta versión de consola funciona peor todavía y encima se ve mucho más fea. Como siempre que probamos un juego vamos tomando notas en una libreta, apuntado puntos fuertes y negativos, y llegado un momento con Risen 2 eran tantos los defectos gráficos anotados que decidimos poner "los tiene todos". En serio, deficiencia gráfica o técnica que os podáis imaginar no falta aquí.
Tasa de imágenes por segundo bastante baja, sombras pixeladas, texturas en baja resolución, clipping, popping, al girar la cámara la imagen parpadea y la fluidez se resiente, animaciones toscas y pobres –y nos queremos hacer más leña de este apartado-, algunos tiempos de carga de más y demasiado largos, en fin, casi nada se salva. El modelado de los personajes es tan sencillo, en especial sus caras, y la gran mayoría de las texturas tan pobres, que por momentos parece que estamos ante un juego de la pasada generación, de PS2 o Xbox, más que de esta. La belleza de algunas estampas que tenía el título de PC aquí se pierden, y no se salva nada del apartado técnico.
Repetimos que hemos jugado a una beta y muchos errores se solucionarán o mejorarán, pero no queda demasiado tiempo para que el producto final esté en nuestras manos y nos mantenemos escépticos. Por lo demás un buen juego de aventura, rol y acción ambientado en un estimulante mundo pirata lleno de tesoros, ron, monos y muchos secretos y desafíos por descubrir. En un mes como el de agosto en el que no suelen aparecer demasiados títulos –aunque este año hay varias propuesta interesantes-, Risen 2 puede ser una buena opción para los amantes del rol en PlayStation 3 y Xbox 360, si sus problema técnicos no empañan demasiado el resultado final.