Mario es uno de los personajes más conocidos del mundo de los videojuegos y sus juegos han vendido millones de copias y han hecho disfrutar a todo tipo de públicos. Es por ello que pocos juegos parecen más indicados que un Mario para acompañar el lanzamiento de una consola de Nintendo, aunque se trate de un juego 2D. En concreto estamos ante una nueva entrega de la subserie New Super Mario Bros., que ha cosechado un notable éxito en todas sus entregas (Nintendo DS, Wii y Nintendo 3DS), y que busca llegar a todo tipo de público. Hemos podido probar el juego, concretamente uno de los nuevos modos, y os contamos que nos ha parecido.
Lo primero que queremos destacar es el aspecto visual del juego, que aunque sigue la esencia de los anteriores juegos de la serie, si que ha mejorado notablemente, encontrándonos con diseños más elaborados, algo que se aprecia sin duda en los fondos, mucho más bonitos y complejos.
Es cierto que no nos encontramos con un apartado visual lleno de detalles como los últimos Rayman, pero si que se ve todo mucho más bonito, con más vida y todo ello sin perder la claridad que caracteriza a los juegos de Mario.
Uno más en la fiesta
La principal novedad de este nuevo Mario es el hecho de que puede ser jugado por hasta cinco jugadores en la misma consola, uno con el gamepad de Wii U y otros cuatro con el mando de Wii en horizontal. Los que llevan el mando de Wii tendrán la misma experiencia que en New Super Mario Bros. Wii, es decir, jugarán con Mario, Luigi y los Toad de la misma forma que en otros Mario, mientras que la novedad radica en el que juegue con el mando de WiiU, pues el verá la pantalla de juego y podrá interactuar con ciertas cosas, atontando enemigos o creando plataformas para ayudar al resto.
La idea es buena y es divertida, aunque hemos de advertir que ayudar a los demás es algo difícil, pues muchas veces por poner un bloque con buena intención provocamos la muerte de nuestros amigos, por lo que para evitar riesgos, el que lleva el mando con pantalla debe ser muy cuidadoso con donde ponerlos, lo que hace que su partida sea menos activa y corra el riesgo de aburrirse. Mucho más fácil y divertido es poner bloques para complicar las cosas a los otros jugadores, aunque nos tememos que quizás sea demasiado fácil y pueda arruinar alguna partida si los jugadores que controlan a los personajes quieren avanzar y el otro está con ganas de ponerles las cosas difíciles. Esto no tiene que ser malo, claro, pues seguro que provoca muchas risas, pero si que creemos que puede ser un problema para aquellos que busquen una experiencia más colaborativa.
En la partida que jugamos probamos el Boost Rush, un modo en el que la pantalla se mueve sola y debemos avanzar si no queremos ser devorados por ella. Una de las cosas más interesantes de este modo es que según vayamos cogiendo monedas la velocidad de la pantalla aumentará, por lo que cada vez será más difícil. Una de las cosas buenas de este modo es que al moverse automáticamente el scroll de la pantalla, es mucho más fácil para el que juegue con el mando de Wii U colocar los bloques donde quiera, pues cuando probamos el modo normal, el hecho de que la cámara dependiese de lo que hacían los otros jugadores (y por tanto, no podíamos prever su movimiento) hacia que un cambio brusco de dirección por su parte arruinase la colocación de un bloque.
Tan divertido como siempre
También pudimos probar algunas de las novedades jugables, como el nuevo traje ardilla de Mario, que nos permite darnos un pequeño impulso en el aire (agitando el mando) y planear o el bebé Yoshi de color rosa, que si agitamos el mando mientras lo tenemos cogido se hinchará y nos permitirá ganar altura. En el resto nos encontramos como que se mantiene la esencia de Mario, una muy buena señal, aunque se han incorporado enemigos y elementos nuevos que harán que no sea todo lo mismo. Además, el diseño de los niveles, al menos de los que probamos, sigue siendo tan bueno como siempre y estamos seguros de que el juego no defraudará a nadie.
New Super Mario Bros. U promete ser igual de divertido o más que otros Mario. Puede que su aspecto, similar a los de anteriores juegos de la serie (aunque bastante más cuidado) haga que la gente piense que es más de lo mismo, pero nosotros creemos que será un juego que aportará cosas muy interesantes. Lo cierto es que nos gustaría tener la versión final en nuestras manos para poder jugarlo a fondo y ver que tal funciona el sistema de ayudar con la pantalla del mando pero sobre todo porque tenemos la impresión de que va a ser un juego al que vamos a echar una gran cantidad de horas encantados.