Una de las últimas sorpresas que nos dejó el más reciente Nintendo Direct Partner Showcase fue el anuncio de The Adventures of Elliot: The Millennium Tales, una nueva aventura de rol y acción HD-2D para Switch 2, PC, Xbox Series X/S y PS5 que ya podemos probar en la nueva consola de Nintendo gracias a una inesperada demo limitada publicada justo tras su presentación. Por supuesto, en Vandal no hemos querido perdernos la oportunidad de sumergirnos en ella para traeros nuestras primeras impresiones con un título que, os vamos adelantando, nos ha dejado muy buen sabor de boca.
Aventuras y acción con aroma clásico
Dicho esto, lo primero que debéis saber es que estamos ante una aventura que bebe directamente de las entregas clásicas de The Legend of Zelda y de los ARPG que solíamos disfrutar en las consolas de 16 bits.
Aquí encarnamos a Elliot, un joven aventurero acompañado por un hada que recibe la misión de adentrarse en una antiguas ruinas descubiertas recientemente para descubrir lo que se oculta en su interior.
Aunque quisiéramos, no os podríamos contar mucho más sobre la historia del juego, ya que tras una breve secuencia de introducción nos dan libertad total para explorar este mundo de fantasía medieval y la narrativa desaparece para dejar que nos centremos en lo realmente importante: jugar.
A nivel mecánico lo cierto es que nos ha sorprendido la apuesta de Square Enix por mantener las cosas lo más simples posible, ya que en vez de elaborar un complejo o profundo sistema de combate repleto de pequeños sistemas que aporten profundidad, han preferido centrarse en ofrecernos algo tan sencillo como una espada, un arco, un saco con bombas y un escudo que si levantamos en el momento adecuado nos permite hacer una guardia perfecta para aturdir a los enemigos.
Con esto han conseguido que lo realmente importante a la hora de combatir sea nuestro constante reposicionamiento en el campo de batalla y el uso de las herramientas adecuadas para cada situación. Hay un buen puñado de tipos de enemigos distintos con sus propias peculiaridades y patrones, por lo que no todas las armas son igual de efectivas a la hora de hacerles frente. Por ejemplo, los hay que se dedican a huir de nosotros y atacarnos desde una distancia segura que nos pueden dar dolores de cabeza si decidimos perseguirlos para golpearlos con la espada, por lo que un buen flechazo suele ser mucho más recomendable contra ellos, mientras que también nos hemos encontrado con rivales acorazados cuyas defensas solo hemos logrado penetrar con bombas. Como decimos, unas peleas simples, sí, pero que funcionan muy bien y resultan de lo más entretenidas.
Pero si hay algo que realmente nos ha atrapado del juego y nos ha dejado con ganas de más es precisamente la exploración de su mundo. Si bien el mapa por el que nos hemos podido mover en esta demo no es especialmente grande, nos ha sido más que suficiente para comprobar que los escenarios están repletos de secretos y desafíos opcionales que hacen que merezca mucho la pena desviarse del camino principal.
Tan pronto nos encontramos con una mazmorra opcional que con una cueva que esconde un gran cofre del tesoro o un santuario donde nos invitan a superar pruebas de diferente naturaleza, como avanzar por un pasillo en el que no paran de dispararnos flechas o superar varias arenas de combate.
Lo más interesante de todo es que cualquier cosa que hagamos tiene su correspondiente recompensa y casi siempre son cosas realmente útiles. A diferencia de otros ARPG, aquí no existe un sistema de subida de nivel tradicional que nos permita mejorar a nuestros personaje a base de acumular experiencia eliminando enemigos, así que si queremos fortalecernos no nos va a quedar otra que explorar para encontrar magicitas, accesorios, mejores armas y expansiones para la cantidad máxima de flechas y bombas que podemos llevar. Además, superar las pruebas de los santuarios también nos permitirá aumentar nuestros puntos de vida de forma permanente.
Dentro de este sistema de progresión, lo más interesante son las magicitas. En esta demo tenemos un total de 25 puntos para equiparnos estos objetos y, tal y como podréis suponer, cuanto más potente o útil sea la ventaja que nos otorga una magicita, mayor será su coste de equipamiento, por lo que debemos jugar con ellas para definir nuestro estilo de juego y adaptarnos a lo que nos requiera cada situación.
A grandes rasgos funcionan de un modo similar a los Pictos de Clair Obscur: Expedition 33 (aunque sin la necesidad de "aprenderlos"), por lo que se convierten en un incentivo fantástico para explorar, ya que hay un buen número de ellas y no hemos parado de encontrar nuevas magicitas con las que personalizar a Elliot.
De igual modo, también nos ha gustado mucho el diseño de niveles, especialmente en las mazmorras, donde se juega constantemente con los niveles de altura, con diversos mecanismos y con las habilidades especiales de la pequeña hada que nos acompaña en todo momento, a quien podemos mover con el stick derecho y nos permite realizar acciones como teletransportarnos hasta su posición o correr a toda velocidad para movernos por plataformas que se derrumban a nuestro paso.
Además, a veces conecta con inteligencia las zonas interiores con las del mapa principal para obligarnos a adentrarnos a una cueva para buscar una salida dentro de la misma que nos lleve a una zona exterior que sería inaccesible de otro modo, por lo que tenemos mucha ganas de ver si este tipo de cosas se llegan a explotar en la versión final.
Quizá lo que más hemos echado de menos sea la presencia de puzles y rompecabezas, algo que creemos le vendría de lujo a su desarrollo. De igual modo el título nos ha parecido demasiado fácil incluso en su nivel de dificultad más alto, mientras que el jefe de la demo no creemos que esté demasiado inspirado, ya que hace gala de unas mecánicas muy predecibles y que hemos visto en infinidad de juegos.
Regresando a lo positivo, decir que a nivel gráfico es, tal y como cabría esperar de un juego HD-2D, una auténtica preciosidad, probablemente el título que más provecho saca hasta la fecha de este estilo visual, con unos escenarios repletos de detalles y efectos muy conseguidos, como uno muy curioso que simula la curvatura del planeta. Además, la dirección de arte es una maravilla y muy colorida, con un diseño de personajes muy bueno. Como curiosidad, hemos visto que el menú de opciones incluye cuatro configuraciones gráficas distintas y que hay una opción para modificar la calidad de las sombras, aunque en en la demo no nos han permitido tocar dichos ajustes y estos están bloqueados en "Alto".
Finalmente, la música nos permite deleitarnos con una serie de temas instrumentales de gran belleza que refuerzan el tono aventurero de toda la obra, aportando un ligero toque épico a nuestras andanzas. Los efectos cumplen con nota y el doblaje nos llega tanto en japonés como en inglés. Y sí, este juego sí está traducido al español, por lo que no correrá la misma suerte que Octopath Traveler 0 o la remasterización de Final Fantasy Tactics.
Una gran aventura aguarda en 2026
Una demo de apenas una hora de contenido (mucho menos si decidimos ir al grano) es insuficiente para valorar adecuadamente lo que aspira a ser una gran aventura de rol y acción, pero la primera toma de contacto con The Adventures of Elliot: The Millennium Tales nos ha resultado muy positiva y lo que hemos visto de su propuesta nos ha convencido, dejando entrever un título solido y con el potencial para tenernos pegados a nuestra consola o PC durante un buen puñado de horas pasando unos ratos estupendos. ¿Mantendrá el nivel su versión final durante todo el juego? En 2026, cuando se estrene, saldremos de dudas.
Hemos escrito estas impresiones tras descargar la demo en la eShop de Nintendo Switch 2.
























