La saga Dynasty Warriors lleva visitando nuestras consolas unos cuantos años, ofreciéndonos una buena ración de combates multitudinarios y una estética oriental muy marcada. Esta saga, que ha cosechado gran éxito sobre todo en Japón, nos ha ofrecido típicamente combates en los que nos deberemos enfrentar con enormes ejércitos. Tras varias secuelas y spin offs, el juego regresa a PSP (donde ya había aparecido con anterioridad) con algunos cambios que lo hacen más adecuado para el tipo de sesiones de juego de las portátiles. Estos cambios lo alejan ligeramente de lo que nos tiene acostumbrado la saga, aunque mantiene su esencia.
Dynasty Warriors: Strike Force deja de lado las batallas multitudinarias y se centra en combates más esporádicos y en un planteamiento más parecido al de un juego de rol tradicional, aunque dando gran importancia a multijugador. Y es que el juego se basa en poder jugar con hasta otros tres amigos y no tener que afrontar sólo la aventura (aunque podremos hacerlo si lo deseamos). Así, nos ha recordado bastante a lo ofrecido por la saga Monster Hunter, aunque con obvias diferencias, claro.
Al empezar nuestra partida, nos encontramos en un pueblo en el que podremos comprar armas y objetos, hablar con alguno de sus habitantes y, lo que es más importante, formar grupo con nuestros compañeros. Según se nos contó, según vayamos avanzando por el juego, el pueblo irá prosperando, apareciendo nuevos edificios y pudiendo conseguir nuevos objetos.
Los enemigos de este juego serán menos numerosos que en entregas anteriores, aunque supondrán un reto mayor, ya que se ha mejorado su inteligencia artificial. Esto hará que en cada momento nos enfrentemos con unos pocos enemigos, que aunque no nos pondrán las cosas excesivamente difíciles por lo general, sí que dejará de ser trivial el que los venzamos. A la hora de enfrentarnos a ellos, podremos atacarlos directamente o fijar el blanco en uno de ellos para facilitarnos la tarea, lo cual vendrá muy bien teniendo en cuenta que podremos combatir en el aire, donde se haría muy difícil acertar sin la opción de apuntar.
Algo que nos ayudará en nuestros combates será que según golpeemos a nuestros enemigos, iremos llenando una barra de energía que cuando esté al tope, nos permitirá transformarnos. Gracias a esta transformación, el aspecto de nuestro personaje cambiará al más puro estilo de los personajes manga, consiguiendo de esta forma un tremendo poder destructivo que durará unos minutos. Pasados esos minutos, la barra de energía volverá a vaciarse y tendremos que empezar a rellenarla de nuevo si queremos volver a transformarnos.
Hemos comentado antes que en el pueblo podremos comprar armas y objetos. Las primeras nos serán de gran ayuda, ya que nuestro personaje podrá llevar dos armas en cada momento, pudiendo alternar entre ambas cuando quiera. Esto hace que cada personaje pueda llevar las armas que quiera, no debiéndose limitar a las armas que le corresponden por trasfondo, algo que ocurría en anteriores juegos de la saga. Por otra parte, los objetos podremos usarlos durante el combate para recuperar vida o darnos alguna otra ventaja, lo que nos puede sacar de más de un apuro. Estos objetos serán especialmente útiles cuando nos enfrentemos a los jefes. Estos jefes podrán aparecer solos o rodeados de esbirros que nos compliquen más las cosas, y vencerles no será algo sencillo. Mención especial merece el enorme tamaño de esto jefes, que a buen seguro dejarán a más de uno con la boca abierta.
Afortunadamente tendremos nuevas habilidades para ponernos las cosas más fáciles, como saltar o volar. Estas habilidades se traducen en una mayor presencia de las plataformas en el juego, que hará que los niveles sean algo más complejos, ya que podremos jugar con las distintas alturas, algo que se usará incluso para presentar puzles. Esta novedad nos ha parecido muy interesante, ya que le da mayor variedad a los niveles y hace que no todo sea avanzar y matar. Por otra parte, la habilidad de volar nos recuerda a la vistosidad de películas como Tigre y Dragón, ya que además de para pasar por rapidez por una zona, nos permitirá entablar combates en el aire de lo más espectaculares.
Una vez superamos uno de los niveles, podremos volver a repetirlos para ganar experiencia y mejorar nuestras estadísticas y habilidades, de forma que podamos configurar a nuestro personaje como queramos, al más puro MMO. Eso si, tendremos que tener en cuenta que cuando volvamos a un escenario ya superado este verá su dificultad incrementada, de forma que siga siendo interesante enfrentarnos a él. Como decíamos, el enfoque del juego ha cambiado del estilo de batallas multitudinarias a batallas más centradas en pocos enemigos. Para ello, los escenarios también se han modificado, siendo más pequeños, de forma que la acción esté más centrada. En esta ocasión, los escenarios estarán divididos en zonas, aunque el tamaño de estas zonas es lo suficientemente grande como para no suponer un problema el pasar de una a otra.
El apartado visual del juego nos ha parecido bastante bueno. Guarda el estilo de los otros Dynasty Warriors, lo cual será una buena noticia para todos sus seguidores. El modelo de los personajes, tanto del protagonista, como de los enemigos, nos ha parecido muy bueno, y se mueven con gran suavidad. Mención aparte los modelos de los jefes, que tienen un tamaño bastante considerable. En la partida que jugamos, nos encontramos con una gran variedad de enemigos, por lo que parece que se está haciendo un gran esfuerzo en este sentido.
Como comentábamos antes, los escenarios están divididos en zonas aunque el paso de una a otra es bastante fluido. En esta ocasión, los escenarios son más complejos, debido a la parte de plataformas de la que hablábamos, algo por lo que nos vendrá muy bien la posibilidad de rotar la cámara que incluye el juego. Hemos de decir, que a pesar del considerable número de enemigos que habrá en pantalla, los escenarios son bastante detallados, y no apreciamos ninguna ralentización en la partida que jugamos, aunque tendremos que ver si ocurren en fases más avanzadas.
Aunque todo el juego puede jugarse en el modo de un jugador, la gracia es jugar en el multjugador. Hasta cuatro personas podrán jugar al mismo tiempo, enfrentándose juntos a la aventura. En este modo, el número de enemigos y su dificultad se adaptará al número de jugadores humanos que estén en la partida, por lo que aunque estemos acompañados, no podremos despistarnos ni un segundo.
Dynasty Warriors: Strike Force nos parece una buena propuesta para los amantes de los beat ’em up, especialmente para los que tengan otros amigos con los que jugar. Nos alegra que hayan tenido en cuenta las particularidades de jugar en portátil y hayan ofrecido un juego hecho a su medida, ya que de esa forma lograrán llegar a más público. Aún nos queda por jugar al juego en profundidad y ver si mantiene el mismo nivel durante todo su desarrollo, pero de momento nos ha convencido. Dynasty Warriors: Strike Force tiene prevista su salida en nuestro país el próximo 13 de abril.