Hay pocas sagas que creen tanta disparidad de opiniones como Sonic. Con unos inicios arrasadores en Mega Drive y un vacío notable en Saturn tan sólo roto por juegos no tan importantes, su aparición en Dreamcast supuso su último momento de unanimidad en la crítica hasta la reciente aparición de Sonic Mania. Desde entonces se ha alternado entre proyectos que han gustado a mucha gente con otros que han gustado mucho menos, pero siempre con el ruido de fondo de los fans de Sonic, que son multitud, y aquellos que expresan constantemente que SEGA debería dejar descansar a la saga durante un tiempo.
En medio de este panorama la empresa de Haneda anunció el juego que nos ocupa bajo el nombre en código Project Sonic 2017 para las celebraciones del 25 aniversario de Sonic. Ya de inicio se pudo ver la presencia tanto de Sonic clásico como de Sonic moderno, una de esas ideas que también hemos podido observar en su competidor Mario gracias a la saga Mario & Luigi, y que nos hacen ver el juego como una especie de secuela de Sonic Generations, por mucho que su director, Takashi Iizuka, nos diga que son juegos totalmente distintos.
La presencia de Iizuka-san se debe a que el desarrollo del juego ha vuelto a corresponder al Sonic Team, quienes consiguieron buenas críticas tanto con Sonic Colors como con Sonic Generations, de quien de hecho emplean una versión mejorada del motor, pero que se habían hecho un poco al lado tras el relativo fracaso de Sonic Lost World, para que se intentasen cosas nuevas con Big Red Button y Sonic Boom, además de las versiones portátiles realizadas por Sanzaru Games.
La versión probada en la Gamescom lo cierto es que nos ha devuelto esas buenas sensaciones que nos provocó Sonic Generations en su momento, con esa mezcla de momentos más propios de un Sonic Adventures que de cualquiera de los juegos posteriores, así como de los Sonic más clásicos, pero en esta ocasión con gráficos poligonales.
La demo nos dejaba probar tres niveles, además de poder jugar en cooperativo. El primer nivel que jugamos se manejaba con el Sonic moderno, siendo al principio con la cámara trasera. El nivel está perfectamente diseñado para que, a poco que estemos algo acostumbrados a jugar a títulos de este estilo, sepamos llevar el flow de manera correcta, creando una sensación de velocidad constante y una diversión notable.
De hecho, sigue siendo válida la máxima de los juegos de Sonic en los que la cámara se posiciona detrás del personaje protagonista en la que, ante la duda, hay que continuar hacia delante que el juego ya nos guiará hacia el camino correcto.
Al cabo de poco rato el juego cambia hacia una cámara lateral, de manera que se parece mucho más a los Sonic originales, con multitud de detalles de fondos y todo tipo de artefactos que son, por así decirlo, marca de la casa. Nos encontraremos con aceleradores, reboteadores, bucles, espacios en los que nuestro querido puercoespín puede deslizarse de la misma manera que como lo hacían los protagonistas de Jet Set Radio (o el más moderno Hover) pero sobre sus propias zapatillas.
El juego en general funciona de manera bastante fluida, pero cuando nos encontramos a los enemigos muchas veces aparecen en grupos, y el ataque que hemos encontrado que funciona mejor es el de que se dirige de manera automática hacia ellos, lo que implica que cuando nos dispongamos a acabar con ellos puede que nos dediquemos un rato a ir de un punto al otro.
Con todo, este tipo de niveles la verdad es que parece que funcionan bastante bien. Al final de cada uno de ellos se nos otorga una puntuación, según la rapidez con la que lo hayamos superado, el número de anillos recolectados y otras variables, lo que puede picar al usuario a completarlos más de una vez para hacer puntuaciones más altas de las que se consiguieron en un comienzo. Si que os podemos decir que, si bien no parece que sea un juego realmente difícil, tampoco es especialmente fácil, y hay que fijarse con los movimientos que realicemos en muchas ocasiones para evitar perder anillos o vidas.
Por desgracia la parte en la que probamos al Sonic clásico fue mucho menos reveladora, ya que se trata de un combate contra el Doctor Robotnik. Al principio se trata de nuestro querido némesis montado en una nave de la que cuelga una bola, como en el primer enfrentamiento en la entrega origina de Mega Drive, e incluso nos encontramos con dos plataformas de apoyo, pero tanto la distancia entre la bola y la nave como la aparición de unos anillos hacen que se muestren claras diferencias en en el enfrentamiento.
Pero posteriormente, al ser derrotado, Robotnik acaba haciendo aparecer un terrible robot, y el verdadero duelo comienza. Hay que decir que parece mucho más difícil de lo que es, ya que va disparando rocas (que se puede romper al darles con el salto en giro) y unas piedras sobre las que tenemos que saltar para lanzárselas y de esa manera poder derrotarle. Pero además emplea un ataque de metralleta y otro con una especie de misiles, pudiendo ser esquivados con facilidad ambos dos.
La parte más novedosa de la demo ha sido la muestra de los avatares. En este caso hemos probado un nivel en el que podíamos elegir un par de personajes, uno llevaba un látigo y otro un lanzallamas. Pero a pesar de estos detalles que pueden parecer tan sorprendentes, se juega parecido, teniendo en cuenta que podemos cargar, por ejemplo, el lanzallamas, y usarlo cuando nos parezca conveniente. Pero a la hora de la verdad, el movimiento de desplazamiento en bola teledirigido ha seguido siendo el más práctico de todos.
¿Es suficiente lo probado para saber si este juego será un éxito o será un fracaso? Lo cierto es que no. A los aficionados a la saga Sonic seguramente les gustará, porque lo visto recuerda bastante a Sonic Generations pero con más añadidos, el cual resulta uno de los últimos juegos de Sonic que ha funcionado bien para casi todo el mundo.
Pero tanto los detractores de los últimos juegos del erizo como los que esperan que el Sonic Team se desperece, apostando por algo más acorde a las exigencias actuales en cuanto a juegos de gran presupuesto, seguramente consideren que lo visto aquí no es suficiente a pesar del buen nivel tanto a nivel visual como sonoro, además de lo ya conocido en mecánicas y diseño de niveles. La respuesta final cada vez está más cerca, ya que Sonic Forces se pondrá a la venta estas navidades en PS4, Xbox One, PC y Nintendo Switch.
Estas impresiones se han podido realizar probando tras probar el juego en su versión de PS4 en el stand de SEGA en la gamescom 2017.