Previsto inicialmente para el mes de noviembre de este año, hace unos días Capcom anunció que se retrasaba, y finalmente hemos sabido que llegará a finales de marzo de 2012, una fecha menos saturada que este campaña navideña llena de juegazos. Desarrollado por los canadienses Slant Six Games, creadores de varias de las entregas de la saga SOCOM de Sony, este hecho tuvo que ser decisivo para que Capcom apostara por ellos, al tener experiencia previa en hacer juegos de acción cooperativa.
Un spin-off más de los muchos con los que ha contado la saga, esta vez en un juego de acción en tercera persona para cuatro jugadores, y que tras haber jugado con él hace unos meses, nos llamó la atención su ágil, frenética y divertida jugabilidad.
Ahora en el marco del Capcom Gamers' Day celebrado en Londres la semana pasada, hemos podido ver un nuevo código del juego con una localización inédita hasta ahora, y hemos podido jugarlo en profundidad, aunque no todavía junto a otras tres personas.
La historia nos sitúa temporalmente entre Resident Evil 2 y Resident Evil 3: Némesis, reinterpretando algunos de los sucesos ocurridos en ambos títulos. Todo el juego transcurrirá en la calles y edificios de Raccoon City en septiembre de 1998, en medio del caos causado por la propagación del T-virus, y nosotros encarnaremos a uno de los seis miembros de un equipo de elite de los Servicios de Seguridad de Umbrella (U.S.S.), que es mandado al lugar para tapar los hechos, ocultando y eliminando pruebas y testigos.
Antes de comenzar a jugar tenemos que elegir uno de los seis protagonistas. Vector, experto en reconstrucción de equipo y equipado con capacidad de camuflaje, Spectre, de la clase vigilancia y francotirador, Beltway, experto en explosivos, Four-Eyes, científico con la capacidad de preparar armas bio-orgánicas, Lupo, de la clase asalto y Bertha, médico del grupo. Cada uno cuenta con nueve habilidades únicas, así como distinto equipamiento y armas, que tendremos que desbloquear al no estar disponible todas las habilidades y armas desde el principio. El armamento es realmente enorme, hay muchísimas armas de cada tipo: pistolas, rifles de asalto, escopetas, metralletas, y unos cuantos tipos de granadas y minas.
Antes de probarlo, el productor Mike Jones nos mostró un nuevo nivel que transcurría en un laboratorio de Umbrella, una fase distinta a la que nosotros después jugaríamos. Al poco de entrar en estas instalaciones nos topamos con HUNK, un personaje ya clásico, demostrando que este Resident aunque jugablemente se desmarca de la serie tradicional, argumentalmente si intentará encajar en la historia de la saga. Dependiendo de los personajes que llevemos, estos interactúan de una manera u otra, teniendo distintos diálogos, algo que ocurre tanto en la acción como en las cinemáticas. Aunque de los protagonistas sabemos poco exceptuando su aspecto, parece que cada uno cuenta con una personalidad bien definida, como pudimos ver en las distintas conversaciones.
Cuando juguemos solos el resto de personajes estarán controlados por la Inteligencia Artificial del juego, y por lo que hemos visto hasta ahora, no parece que sea muy brillante, así que estamos seguros que la experiencia ganará muchísimo jugando junto a otras personas por internet. En esta demostración no aparecían zombis, y todos los enfrentamientos eran contra otros soldados, pareciendo un juego de acción en tercera persona más. Hay un sencillo sistema de coberturas que como pudimos probar funciona bastante bien, sin ni siquiera pulsar un botón el personaje se pega a los objetos tras los que queremos escondernos, y dejando de apretar el stick se separa. Muy sencillo pero que aparentemente funciona.
Hay tiros en la cabeza, los enemigos tienen las partes localizadas del cuerpo, por ejemplo a los zombis les podemos arrancar los brazos y las piernas, y junto a un completo arsenal de armas de fuego, también disponemos de hasta tres tipos de granadas, y como no podían faltar en un juego de acción actual, barriles explosivos. Como si no quisieran que olvidemos que estamos jugando a un Resident Evil, los objetos se muestran con ese clásico halo de luz de las últimas entregas, y al recogerlos y usarlos suenan exactamente igual, junto a otros efectos de sonido típicos. Podemos llevar sprays para curarnos, y también usar las plantas verdes para recuperar vida.
Los ataques físicos cuerpo a cuerpo también tienen su protagonismo, y dependiendo del personaje serán de una manera u otro, con un cuchillo, puñetazos, patadas, pero en las distancias cortas parece que serán muy letales y útiles. Pese a ser un juego de acción frenética, es sorprendente cómo a veces escasea la munición, y en más de una ocasión nos quedamos sin balas, teniendo que buscar y recoger las armas de los enemigos del suelo. Repartidos por los escenarios hay muchos coleccionables para recoger: discos duros, textos, DVD, pequeños ordenadores y hasta un mapache disecado llegamos a ver. Todo estos objetos nos otorgan experiencia al ser encontrados, por lo que será interesante explorar los escenarios, que sin ser muy abiertos y amplios, tampoco son excesivamente lineales, habiendo encontrado un buen equilibrio.
En ocasiones cinco personajes a la vez, en otras seis, hubo un momento en el que se separaron en dos grupos, parece que la compañía irá variando a lo largo del juego, aunque en todo momento solo podrán participar cuatro jugadores a la vez, y el resto serán personajes invitados manejados por la máquina. Si ya vimos en su día una muy buena intro en vídeo CGI en la que aparecían Claire y Leon, ahora volvimos a ver otras secuencias similares, por lo que parece no es un recurso solo para la intro, y este tipo de vídeos salpicarán la historia. Aunque puede parecer un poco anticuado a estas alturas usar este recurso, y no realizar todas las cinemáticas con el propio motor del juego, lo cierto es que se ven muy bien y no tenemos quejas.
Tras un buen rato avanzando por los laboratorios de Umbrella, el grupo de personajes se topó con un jefe, una horrible criatura, un tipo enorme y deforme, una especie de jorobado de Notre Dame con una enorme barra de hierro y unas intenciones nada amistosas. Casi sin inmutarse ante nuestros disparos, comenzó una frenética huida en la que teníamos que además, por si fuera poco, esquivar a los clásicos perros de la saga que hicieron aparición. Personaje que pillaba, personaje que mataba de un golpe, aunque también a través de ciertos eventos iba separando al grupo. Colocando minas, disparando a unas tuberías de gas que lanzaban fuego, la persona a los mandos iba huyendo como buenamente podía. En una de las ocasiones tiraba al protagonista al suelo y mediante un quick time event, rodando hacia un lado, había que esquivar el definitivo ataque con su barra de hierro.
Finalmente consiguieron librarse de ese monstruo y completar el nivel, enseñándote multitud de estadísticas, el rango obtenido en la partida, así como la experiencia ganada y el correspondiente ascenso de nivel. Al parecer el progreso se compartirá tanto si jugamos solos como online, por lo que cada partida servirá para obtener más experiencia y mejorar al personaje. Luego nosotros pudimos jugar en una fase distinta que transcurría por un edificio gubernamental, lleno de zombis y soldados, y ya con más calma pudimos apreciar muchos otros detalles.
El control como en la anterior vez nos parece muy bueno, ágil, sencillo e intuitivo, y no da ningún problema al moverse y al apuntar, y poco tiene que ver con el control de las últimas entregas, ni siquiera se parece al de la quinta, siendo mucho mejor aquí. Los gráficos son más que decentes, y la palabra que mejor los definiría es sólidos. Mucha sangre y gore, unos logrados efectos de iluminación dinámica bastante sorprendentes, y algunos detalles terriblemente escabrosos, como personas muertas y destripadas por los escenarios, estando la ambientación en general muy lograda. A destacar los detallados desmembramientos de los zombis, muy conseguidos con las partes del cuerpo bien diferenciadas. Entretenido y frenético, la mezcla de zombis y soldados hace que no tengas un segundo de respiro. Vamos cumpliendo distintos objetivos por los escenarios, activando algunos interruptores y dispositivos, y no parece vaya a existir ningún elemento más que no sea pegar más y más tiros.
Algo que no nos ha gustado nada, y que tenemos que destacar, es la inteligencia artificial, tanto de los aliados, pero sobre todo de los enemigos humanos, horrible. Con comportamientos totalmente absurdos, son presa del caos de lo que ocurre en pantalla, y a lo mejor se ponen a disparar a los zombis cuando nosotros estamos a su lado a dos metros disparándoles a bocajarro, y ellos siguen a lo suyo. Mil y un detalles en este sentido que podríamos comentar, y de aquí a que salga en marzo, esperamos que este aspecto se corrija y mucho, ya que podría lastrar el conjunto, que en todo lo demás está bastante bien acabado.
Jugando en cooperativo junto a otros tres jugadores parece que estará la gracia, pero también dispondremos de multijugador competitivo, aunque este modo todavía no lo hemos podido ver, pero parece que enfrentará a tres equipos divididos en el Servicio de Seguridad de Umbrella, las Fuerzas Especiales Americanas y la amenaza de los zombis y las armas biológicas (B.O.W.).
Un Resident Evil totalmente distinto y que sin prejuicios y acercándose a él como lo que es, un juego de acción cooperativo, no está nada mal. Queda por ver si sabrá dentro de su mecánica ser variado y no hacerse pesado, si tendrá una historia interesante, ver cómo conecta con lo ocurrido en los primeros Resident, pero su control funciona, su apartado técnico es muy competente, y en cooperativo por internet promete ser muy divertido. No parece que vayamos a estar ante un triple A, pero los amantes de la acción cooperativa, y de los zombis y el universo Resident Evil, no deberían perderlo de vista.
