Debo reconocer que, pesonalmente, vi con ojos escépticos el hecho de que Prince of Persia: The Sands of Time, un juego del que apenas se había hablado anteriormente, fuera coronado como uno de los mejores juegos del pasado E3, sorprendiendo a todos aquellos que no habíamos tenido oportunidad de jugarlo. Porque precisamente al jugarlo uno se da cuenta del increíble trabajo qe Ubi Soft está realizando con este título, y el enorme potencial que puede llegar a tener.
Se trata de una aventura en tercera persona, que pierde un poco la esencia del Prince of Persia original, pero se adentra en nuevos géneros que pueden dar mucho de sí.
Así, en la demo jugada durante el ECTS (la misma que el E3), hemos podido ver que el diseño de niveles estará orientado a los puzzles, pero las batallas serán frecuentes, así como la exploración y los plataformas.
Movimientos como caminar por las paredes, atacar de diversas maneras a nuestros enemigos o poder escalar todo tipo de superficies le aportan una variedad al juego digna de mención, que si puede ser mantenida a lo largo de todo el juego con puzzles desafiantes y un trabajo en los niveles promete diversión del más alto nivel.
Lo mejor de todo es que si la jugabilidad es asombrosa, el apartado técnico no se queda atrás. Sonido aparte, pues es imposible oir algo con el ruido de la feria, los gráficos destacan por su solidez y por los enormes escenarios que hemos podido ver. Las animaciones de nuestro protagonista están realmente logradas, y las luchas son un auténtico espectáculo. El único punto negativo que se le puede achacar a la demo es que en ocasiones el framerate bajaba considerablemente; sin embargo, esperemos que solventen este problema -bastante habitual por cierto en las betas-, pues el potencial del juego es altísimo, y fácilmente se pueda convertir en una de las grandes sorpresas de este año. No le quitéis el ojo de encima.