Por fin hemos podido probar la nueva apuesta zombi de Valve Software y, ciertamente, no nos ha defraudado. Después de la excelente experiencia de juego multijugador que ofreciera la primera parte de la saga Left 4 Dead, esta pronta secuela (pronta y quizás un tanto precipitada, teniendo en cuenta el ritmo habitual al que la compañía suele dar luz verde a sus novedades) promete un aspecto mejorado y una mayor cantidad de modalidades de juego, las cuales, de hecho, vienen sobre todo a aumentar las posibilidades multijugador de la propuesta original.
La verdad es que todo apuntaba a que Left 4 Dead 2 se convirtiera, más que un título con nombre propio, en una actualización y mejora de su antecesor. De alguna manera, así ha sido, pues todo ha sido mejorado respecto a éste: la experiencia jugable, el aspecto gráfico y sonoro, el número de opciones y modalidades de juego, etc. Pero nos encontraremos ante un título que contará con suficientes novedades como para justificar su compra, tanto en el caso de que ya tengamos en nuestro poder la primera parte de la saga como en el caso de que no conociéramos la serie previamente.
Como ya nos llevan anunciando desde hace meses, la nueva entrega de la saga Left 4 Dead estará ambientada, para la ocasión, en el sur de los Estados Unidos, en los estados de Louisiana y Georgia. Por lo que hemos podido comprobar jugando a los dos niveles que ofrece la demo oficial del juego, esta ambientación ha sido muy bien desarrollada, constituyendo estéticamente todo un acierto. Sin duda, matar hordas de zombis entre los ambientes decadentes de zonas semidesérticas, o de puebluchos de mala muerte de casas uniparentales y suburbios repletos de desperdicios nos recuerda a cualquier producción clásica del "maestro" George A. Romero, haciéndonos sentir totalmente partícipes de una película de serie B al uso.
Si bien tendremos ocasión de interactuar con algunos detalles del escenario, resolviendo pequeños puzles o destruyendo según qué zonas para abrirnos paso, está claro que la interacción con el entorno no es lo más importante de la acción. En los dos niveles que hemos podido jugar en la demo del juego (localizados en Nueva Orleans, dentro del capítulo llamado "La Parroquia") tuvimos la oportunidad de asistir a una escena en la que teníamos que llevar a cabo uno de los "puzles" del juego: llegar hasta el interior de una zona acordonada y vallada para apagar la molesta alarma que alertaba a los zombis, cosa que provocaba que todos ellos se lanzaran directamente sobre nosotros. De hecho, a esto no se le puede llamar literalmente "puzle", pero sí nos hará plantear (rápidamente, eso sí) estrategias de equipo, en caso de que estemos jugando en multijugador, para que uno de nosotros llegue rápidamente al punto objetivo mientras el resto nos cubre las espaldas.
Y es que ahí radica la gracia del título, como pasara ya en la primera parte: en todo momento deberemos ir en cuadrilla, sin separarnos de los otros tres compañeros de equipo, sean éstos controlados por la máquina o por otros jugadores. En caso de que nos dé por ir de llaneros solitarios, nuestra suerte estará echada: moriremos pasto de cualquier horda de zombis hambrientos que pase por nuestro lado. Cada vez que juguemos a un nivel y volvamos a repetirlo, nos encontraremos con que el número de zombis que encontraremos y las localizaciones de los mismos serán sustancialmente diferentes, por lo que la experiencia de juego será cambiante y nunca sabremos muy bien a qué atenernos, exactamente.
Tendremos que tener cuidado de no activar alarmas sonoras de edificios o vehículos, lo que atraerá a todos los zombis de las zonas colindantes hacia nosotros, lo que realmente nos pondría en un aprieto. Aún así, el número de zombis que encontraremos en nuestro camino será enorme, y vendrán a nosotros tanto de manera dispersa como en intensas y tumultuosas hordas. Esos serán, sin duda, los momentos más divertidos del juego, aunque también los más estresantes, ya que habrán escenas en las que acabaremos disparando a todo lo que se mueve, sin saber muy bien qué es lo que estamos haciendo o a quién estamos dañando.
Eso sí, contaremos con un amplio arsenal de armas para enfrentarnos a los muertos vivientes, entre los cuales destacan por su reciente inclusión las armas de cuerpo a cuerpo. Éstas, sin duda, además de ofrecernos una alternativa a nuestras carencias de munición, hacen de la acción algo mucho más directo y divertido, sobre todo en las distancias cortas (como aquél anuncio de colonia...). Si bien reventarle los sesos a un zombi con una escopeta de caza puede ser muy divertido, aún más lo será hacerlo con una sartén, un bate de béisbol e, incluso, una guitarra eléctrica que sonará por simpatía cada vez que tope con algo sólido. También contaremos con armas arrojadizas, como cócteles molotov o bombas artesanas, que nos permitirán deshacernos de varios enemigos a la vez, aunque tendremos que cuidarnos mucho de no dañarnos nosotros mismos con ellas, dado que su precisión es mucho menor que la del resto de armas de largo alcance.
Las imágenes serán sangrientas y viscerales, sin duda, sobre todo en los enfrentamientos masivos a corta distancia. En el caso de que nos hagamos con alguna de las sierras eléctricas dispersas por alguno de los escenarios, la carnicería será apoteósica. Pero, a pesar de todo, para la ocasión contaremos con algo de historia, un ligero argumento que nos servirá para unir la acción de cada uno de los niveles y para seguir la evolución de los cuatro personajes protagonistas, a los cuales se les ha dotado de un poco más de relevancia en este aspecto, dando, en conjunto, una imagen más sólida en lo que atañe al desarrollo narrativo del juego.
Por otro lado, pudimos ver a nuevas incorporaciones dentro del plantel de enemigos, el cual viene a ser cada vez más variado y, por supuesto, peligrosos. Eso sí, los enemigos siguen siendo masas de carne que vendrán a atacarnos, sin más. De hecho, no se espera de un zombi que desarrolle un planteamiento estratégico de combate, ni mucho menos, pero la verdad es que la inteligencia de los enemigos brilla por su ausencia (cosa que no pasa con nuestros compañeros de equipo, en caso de que éstos sean controlados por la máquina, lo que nos congratula). Además de los zombis genéricos, deberemos confrontar Chargers, enormes monstruosidades deformes que nos arrollarán a toda velocidad (sin importar paredes o edificios, ya que los atravesarán sin problema), para luego agarrarnos y aplastarnos el cráneo a golpes sin piedad; o Splitters, asquerosos escupidores de veneno que, al morir, reventarán, llenando los alrededores de un líquido verde muy tóxico, del cual deberemos alejarnos a toda prisa si no queremos morir.
También encontraremos a Boomers, que explotarán violentamente al morir o al acercarnos demasiado; Joqueys, que intentarán subírsenos encima y controlar nuestras mentes, así como los clásicos Hunters y Witches que ya viéramos en la primera entrega de la saga. Al enfrentarnos a todos ellos, deberemos de tener muy en cuenta a nuestros compañeros de equipo, ya que de ellos depende nuestra seguridad. De hecho, en caso de que seamos apresados por alguno de los enemigos más poderosos, sólo podremos rezar porque alguno de nuestros compañeros se percate de ello y nos salve, ya que, en caso contrario, sólo podremos disparar alocadamente agonizantes, sin demasiadas opciones a sobrevivir. Por otra parte, tendremos niveles localizados temporalmente en diferentes momentos del día, siendo algunos diurnos, como los que hemos probado en la demo, o nocturnos. Esto influirá en cómo se comportarán los zombis, su nivel de violencia y algunos patrones de movimiento, cosa que deberemos de tener muy presente al iniciar cada nivel.
En la demostración pudimos sólo jugar al modo individual (acompañados por tres personajes controlados por la máquina) y al modo campaña cooperativa, en el que pudimos jugar con otros tres compañeros de equipo a los dos niveles ofrecidos. Aún así, contaremos con otras muchas modalidades de juego multijugador, como el modo Enfrentamiento o el modo Supervivencia, así como un Modo Realista y una modalidad llamada Jugar a la búsqueda, aún no disponibles en la demo. Aún así, lo poco que pudimos probar nos convenció de la valía del título y de cómo ha sabido mantener toda la diversión de la primera entrega, mejorando aún más, si cabe, la experiencia multijugador de la misma.
Poco nos falta ya para descubrir todos los secretos del juego, enterrados en algún lugar en los estados sureños de los EEUU. De hecho, los secretos deben de ser lo único que quede enterrado a estas alturas, pues todos los muertos han salido a la calle, dispuestos a destrozarnos y devorarnos si no nos hacemos cargo de ellos a mediados de este noviembre...