Análisis de Dead Rising 2: Case Zero XBLA (Xbox 360)

Parece claro que la nueva moda que está por llegar a la distribución digital es la de ofrecer juegos específicos para estas plataformas que hagan las veces de preludio, complemento, o vete a saber, de lanzamientos "grandes" en distribución física. Estos juegos mantendrán las claves jugables básicas del juego que le seguirá, captando así la atención del público, ofreciéndole una buena muestra del mismo, e invitándole a pensar que si se lo ha pasado bien con éste, que le ha costado relativamente poco, por qué no apostar por el juego completo, más adelante, cuando llegue a las tiendas en unas semanas. Capcom ha hecho esta apuesta con Dead Rising Case 0, pero otras compañías ya están sumándose al carro… quizás era de esto de lo que otras hablaban cuando se comentó eso de las "demos de pago".

Pero más allá de todas las reflexiones que nos invita a hacer sobre la industria del videojuego y sus mecanismos actuales de modelos de negocio y publicidad, lo cierto es que mientras los juegos que se ofrezcan sean como éste, no hay razones para quejarse. Al menos, no demasiado. Este lanzamiento es exclusivo para Xbox 360, aunque Dead Rising 2 llegará también a PC y PS3, y sirve como antecedente directo del mismo. No será necesario para disfrutar de Dead Rising 2, pero es un complemento más que interesante. No daremos detalles clave de la historia de ninguno de estos dos juegos, pero está claro que la experiencia completa no se limitará ya al título en sí (y sus -en ocasiones sin escrúpulos- contenidos descargables), sino a este tipo de adelantos. Al menos, eso es lo que, más o menos, sucede aquí.

Lo interesante es que, por ejemplo, este Case 0 realiza una mejor labor de ponernos en situación que Dead Rising 2, con una secuencia inicial mejor planteada. Luego, la narrativa avanza mucho más en el juego físico, claro, pero está claro que la limitación de espacio ha servido para que en Capcom se planteen mejor cómo contar las cosas desde el principio, pese a ser igualmente in media res.

En cualquier caso, nos veremos obligados a luchar contra hordas inabarcables de zombis mientras intentamos conseguir Zombrex para la pequeña Katey, un planteamiento jugable calcado al de Dead Rising 2, del que también toma elementos como el uso del reloj, o el ciclo horario para la inyección de la medicina que debe impedir que la pobre niña se convierta en zombi.



El sistema de control es el mismo: Recogemos objetos con B, cambiamos el que tenemos en la mano con los botones laterales de la parte superior del mando, y golpeamos con X (si lo pulsamos más tiempo, damos un golpe fuerte). Igualmente, hay que estar atentos a los objetos que se marcan con un icono de llave inglesa, pues son los que nos servirán para combinarlos con otros y realizar armas nuevas, en ocasiones estrambóticas, pero siempre mucho más poderosas que las estándar.



Aquí nos movemos por un pueblecito al que llegamos mientras huimos de esta amenaza zombi, pero algún superviviente con pocos escrúpulos nos roba el coche y deja abandonados en el mismo, sin Zombrex para Katey, ni muchos recursos, en apariencia, para nuestro protagonista, un tipo duro que va a hacer lo que sea necesario para conseguir la medicina. Still Creek es un lugar no muy grande, pero lleno de casas y edificios, y con una población zombi enorme y en aumento.



Pese a todo, el mapa resulta muy útil para localizarnos en el pueblo, sobre todo según avanzamos y recibimos los objetivos para las siguientes misiones. Debemos destacar, especialmente, el efecto logrado en la avenida principal, que se recorre íntegra, sin cargas, y está infestada de zombis hasta niveles extremos, lo que resulta visualmente impresionante. El motor empleado es claramente el mismo que en el juego físico, y el tamaño el juego no es precisamente pequeño (con las restricciones que había en Xbox Live Arcade hasta hace incluso relativamente poco, teniendo en cuenta asimismo que el tamaño máximo permitido de los juegos ha ido aumentando gradualmente, habría sido completamente imposible), lo que contribuye a que sea una experiencia de juego idéntica, a todos los niveles, a la de su venidero "hermano mayor."

Sin embargo, adolece de un problema visual severo en forma de popping exagerado: es posible que a pocos metros haya una furgoneta, y simplemente aparezca de repente como si nada. Los zombis no, por suerte, pero otros elementos del escenario no es que se generen torpemente en un horizonte de dibujado muy cercano, es que aparecen en tus narices sin más. Algunas texturas son de resolución algo baja, las sombras se generan con píxeles enormes en ocasiones, pero son fallos menores que no afectan a la jugabilidad. Encontrarse corriendo en una dirección a la desesperada y que de repente te encuentres con un obstáculo ante tus narices mientras un par de centenares de zombis vienen a por ti… resulta molesto.



Eso sí, no hay que hacerse ilusiones: Case 0 pretende ser un aperitivo, y eso es lo que es. Sin resultar corto, la verdad es que sí se percibe como algo escaso, pese a ofrecer una variedad de misiones y objetivos reseñable. Como en el juego completo, hay que sumar PPs, puntos que nos permitirán alcanzar mejoras, que se van adquiriendo por matar zombis, pero también por realizar objetivos secundarios, como cuando nos encontramos a supervivientes. Sumar puntos para mejorar a Chuck es importante, por lo que no siempre hay que huir de los zombis, teniendo en cuenta que es imposible por completo eliminarlos a todos.



En líneas generales, lo que nos encontramos es con un capítulo adicional de Dead Rising 2 que se distribuye digitalmente, y una buena manera de que el contador de zombis eliminados no empiece en cero cuando metamos el juego por primera vez en nuestra consola. La primera sensación es que es muy corto, y lo cierto es que la extensión no es una de sus virtudes, pero puede ofrecernos cerca de hora y media de juego, lo que lo sitúa en realidad por encima de las previsiones iniciales. No es demasiado, pero se compensa con un precio comedido y bajo para los estándares de estos lanzamientos, situado en 400 puntos Microsoft (4,80 euros), lo que parece destinado especialmente a que todo el mundo le dé una oportunidad y descubra las virtudes del lanzamiento venidero.



Como juego independiente, sin embargo, lo cierto es que Case 0 hace aguas en frentes importantes. Para empezar, no es una experiencia independiente, algo obvio, pero que puede extrañar a la gente; por otro, presenta algunos defectos visuales (que hemos reseñado antes) que no se dan en Dead Rising 2, por lo que quizás haya gente que prevea esos errores en el título físico, dada la intención claramente publicitaria (y con inspiración de demo) de este juego descargable. Eso, en todo caso, es juzgarlo por cosas que no es, pero hay que tener en cuenta que en pocas ocasiones nos hemos encontrado una propuesta de este calibre en cuanto a sus intenciones comerciales, y es posible que pasen meses y varios lanzamientos más (de ésta y otras compañías) hasta que el público se muestre receptivo y comprensivo con este tipo de propuestas.

Conclusiones

Lo que más destaca de Dead Rising 2: Case 0 es que estamos ante una muestra descargable del juego que nos llegará en formato físico a finales de septiembre. Es un concepto fresco, pues no es una demo, pero desde luego está destinado a mostrar exactamente qué es lo que puede ofrecer al público Dead Rising 2. La historia se cierra razonablemente bien, aunque enlaza completamente con este juego, por lo que no es autoconclusivo, y eso quizás no guste a parte del público, con razón. Está orientado, por tanto, al público que ya está interesado en Dead Rising 2, o que estando muy interesado todavía no ha decidido su compra: este aperitivo muy probablemente les convenza, pues es un estupendo botón de muestra. Le falta enjundia, entidad propia, pues su concepción de producto satélite le ha lastrado en exceso en este terreno. Resulta entretenido, y por lo que cuesta ofrece una buena dosis de diversión.