Análisis de FlingSmash (Wii)
Desde que el año pasado Nintendo lanzó el nuevo periférico para Wii el Motion Plus, que mejoraba la precisión del mando, pocos han sido los juegos que lo han aprovechado y menos aún los que han requerido obligatoriamente el dispositivo para jugarse (la mayoría lo requieren de forma opcional). Afortunadamente para los poseedores de uno de estos Wii Motion Plus o para aquellos a los que interesaba el periférico pero no terminaban de encontrar ningún juego que les animase a adquirirlo, ha aparecido un nuevo pack que incluye un juego que hace uso del mismo y el nuevo mando de Wii con Motion Plus incorporado. La pregunta tras haber podido jugar a fondo con el juego es sí vale la pena por sí mismo o es un buen acompañamiento a aquellos que quieran aumentar la colección de mandos de la consola.
Un héroe muy especial
La historia del juego nos lleva a la idílica isla de Suria, donde un ejército de extrañas criaturas amenaza su paz, ya que quieren apoderarse de la Gran Palmera. En medio del caos, el rey recuerda la antigua leyenda en la que un héroe buscó unas pelas mágicas y consiguió repeler a los enemigos, aunque cuando consiguen sacar de su sello mágico al que esperan que sea su salvador, descubren con sorpresa que se trata de una bolita de aspecto gracioso.
Afortunadamente, muy pronto Citro, que así se llama el protagonista, demostrará sus habilidades y se lanzará a buscar las perlas.
Para jugar deberemos mover el mando en la dirección en la que queremos que Citro se mueva, rebotando con todo aquello que toque (y destruyéndolo de paso). La base del juego es recorrer un escenario, normalmente en sentido horizontal (aunque también hay fases en vertical) de derecha a izquierda si somos diestros y al revés si somos zurdos (es de agradecer que incluyan un modo de juego para todos), teniendo cuidado de no quedarnos muy atrás, pues si nos retrasamos en la pantalla, unos enemigos acabarán comiéndonos y perderemos una vida (según avancemos por los niveles, cada vez deberemos pasar menos tiempo retrasados para que intenten comernos). El control funciona bastante bien, respondiendo estupendamente a los movimientos que hagamos con el mando, aunque hay que tener en cuenta que no debemos agitar el mando sin más, pues de lo contrario se descalibrará el mando y deberemos volver a calibrarlo apuntando a la barra de sensores.
Por los escenarios nos encontraremos con un montón de cubos que nos irán estorbando, aunque la mayoría de ellos podremos destruirlos sin problemas, consiguiendo puntos con ellos. Además de llegar hasta el final del escenario, el objetivo será encontrar al menos tres medallones de los cinco que hay escondidos por el escenario, pues de lo contrario no podremos obtener la perla del nivel. Para ello deberemos romperlo todo y acabar con los enemigos que veamos para que no se nos escape nada, encontrándonos con algunos ítems que nos pondrán las cosas más fáciles, como uno que convertirá en diamantes todos los bloques, multiplicando los puntos que nos den, u otros que causen efectos diversos sobre Citro, como multiplicarlo, aumentar su tamaño o hacer que golpee con más fuerza. También nos encontraremos otros detalles, como bifurcaciones en las que tendremos que elegir la ruta o enemigos especiales que deberemos derrotar de una forma concreta.
Mueve el mando y alcanza el final
Cada mundo (y hay ocho en total) tiene tres fases normales y un jefe final, cada uno de los cuales tendrá su propia forma de vencerle. Algo que nos ha gustado bastante de juego es que en prácticamente todos los mundos ocurre algo que varía la jugabilidad, como que el protagonista de convierta en acero, se haga más pequeño o aparezcan elementos nuevos en los escenarios que cambien las cosas. Esto hace que así sea más variado el juego, ya que quizás el mayor problema es que aunque el concepto del título es bueno, llega un momento que sabe a poco y parece que le falte algo. No es que la fórmula no funcione, pero da la sensación de que por sí sola no es suficiente para sustentar todo el juego, sensación que aparece si estamos jugando una partida larga sobre todo.
El juego no es muy largo, ya que en menos de tres horas lo haremos terminado, pero lo cierto es que el hecho de que sus niveles sean relativamente cortos y al final de los mismos se nos dé una puntuación, hace que sea muy rejugable, sobre todo para sacar la máxima puntuación. Para ello podemos contar con la ayuda de un amigo, ya que podremos jugar en cooperativo con otro jugador (siempre que tenga el Motion Plus), haciendo que sea más fácil conseguir una mejor puntuación. Lo bueno de esto es que no sólo nos sentiremos mejor por conseguir el máximo rango, sino que iremos desbloqueando nuevas fases y minijuegos según vayamos superándonos, lo que sin duda da aún más incentivos para seguir jugando. La verdad es que el modo cooperativo es realmente divertido, aunque no todo el mundo pueda disfrutarlo debido al requisito de dos Motion Plus, y recomendamos que todo aquel que pueda lo pruebe.
Gráficamente el juego es bastante modesto, con un estilo muy colorido y desenfadado que no sorprende (ni lo pretende) en ningún momento. Debido al juego que se trata tampoco se exige demasiado, y tras una primera impresión algo confusa en la que no sabemos dónde estamos, pronto le cogemos el truco ya que el aspecto gráfico ayuda a comprender todo lo que pasa en pantalla (aunque no hubiese estado de más distinguir más aún los colores de los dos personajes en modo cooperativo). Los enemigos no son muy variados, y aunque en los distintos mundos nos encontramos con ambientaciones distintas, en casi todos los enemigos finales nos encontramos con el mismo escenario. Otro detalle que no nos ha gustado y que nos parece incomprensible debido a que no se trata de un portento gráfico, es que en determinados momentos en los que aparece un efecto gráfico especial, el juego sufre una caída de tasas por imágenes bastante notable, que aunque no llega a ser crítica a nivel de jugabilidad, si queda bastante mal.
El apartado sonoro es desenfadado y acompaña bien al estilo del juego, aunque las melodías no son especialmente buenas (aunque hay algunas excepciones) y nos encontramos con algunas bastante repetitivas que acaban cansando, sobre todo el tema principal. Afortunadamente los efectos de sonido mejoran el balance, siendo mucho más variados y pegando bastante bien con el tono general del juego.
Entretenido y con mando incluido
FlingSmash es un juego divertido que nos tendrá entretenidos, sobre todo si jugamos en compañía o si somos amantes de superar nuestras puntuaciones, pero que no terminará de gustar a todo el mundo. La base del juego, mover a nuestro personaje según agitemos el mando, funciona, pero se muestra limitada tras unos cuantos niveles. A su favor tenemos que es un juego ideal para echar partidas sueltas, que se puede jugar con un amigo (siempre que tengamos otro Motion Plus) y que nos invitará a picarnos por obtener la mejor puntuación ( a pesar de que se eche en falta un ranking online), por no mencionar que viene con un mando de Wii que trae el Motion Plus incorporado, lo que sin duda es más que suficiente para la mayoría. Puede que no sea un juego revolucionario, pero sin duda nos hará pasar buenos momentos y aumentará nuestra colección de mandos.