Análisis Darkwood, un terrorífico juego de supervivencia (PS4, Switch, Xbox One)

Hace un tiempo os hablamos de Darkwood –se lanzó en 2017 tras varios años en Acceso anticipado-, un terrorífico juego independiente que sin necesidad de cámaras subjetivas, sustos gratuitos y gráficos hiperrealistas puso los pelos de punta a la comunidad de PC. Ahora nos llega a consolas –PlayStation 4, Nintendo Switch, Xbox One- y promete volver a hacer que nuestra estancia en un oscuro bosque sea incómoda y perturbadora.

La premisa de Darkwood en consolas es la misma que en el original. El prólogo nos pone en situación con una angustiosa puesta en escena, vista cenital y cámara alejada del protagonista, donde exploramos interiores de casas ruinosas o el mapa del bosque. Entre juegos de luces y sombras, empezaremos a descubrir los muchos peligros de la zona, y que en nuestras manos está sobrevivir con los escasos recursos que vamos encontrando.

Supervivencia al límite

En nuestro análisis de la versión para ordenadores os detallamos el juego, que cuenta con elementos aleatorios y por tanto hace cada partida un poco diferente. La idea general es que desde nuestra cabaña, el lugar que podríamos considerar seguro, vamos a ir explorando un pequeño mundo abierto. Acid Wizard Studio ha reducido la ayuda al mínimo, incluso el mapa ofrece vagas descripciones, así que depende de nosotros orientarnos y decidir nuestro siguiente paso.

Durante el día el objetivo es conseguir recursos de las ruinas que se encuentran entre la arboleda. Por supuesto hay animales salvajes que no dudarán en atacarnos si nos localizan, trampas y setas venenosas dispuestas a restar salud. Nuestra visibilidad sólo es buena en la zona iluminada por la linterna o la antorcha, lo que hace que debamos prestar mucha atención a los sonidos de nuestro alrededor. ¿Hay perros salvajes cerca? ¿Es un alce que nos intenta embestir o alguna criatura de pesadilla?

Muchos de estos recursos pueden ser combinados y transformados para conseguir nuevos objetos de ayuda, curación o armas. Hay un sistema de combate bastante sencillo, pero no esperes una velocidad frenética al estilo Hotline Miami, es mucho más lento y natural, además de limitado por una barra de cansancio. Realizar algunas tareas, como la artesanía o interactuar con ciertos objetos también consume algunos segundos que, si estás cerca de alguna amenaza, te pueden dejar vendido.

Por la noche nuestra intención debe ser regresar a la cabaña, pues el bosque se hace mucho más letal. Con el material acumulado podremos reparar puertas y ventanas, apuntalar, poner barricadas, colocar trampas o por lo menos mover muebles que obstaculicen el paso a las criaturas del lugar. El bucle de la jugabilidad está claro: obtener energía, objetos útiles, conseguir algunas habilidades, sobrevivir para ver un nuevo día y encontrar pistas que nos den más contexto a la situación del mundo o nuestro próximo objetivo.

Como ya os contamos, Darkwood no es un juego sencillo ni para jugadores impacientes. Es comprensible sentirse perdido durante los primeros minutos e incluso horas hasta que entiendes el funcionamiento de este mundo y los trucos para esquivar a la muerte. Sin embargo a veces esta ausencia de direcciones claras para avanzar en el juego puede frustrar un poco, y si bien explorar el entorno para recoger madera o combustible nos facilita pasar otro día con vida, en ocasiones necesitaremos claves o llaves que desbloqueen nuevas zonas del mapa, y eso significa vagar por el bosque experimentando un poco. Es parte de su encanto, pero no gustará a todos.

De entrada en el modo normal ya ofrece un buen desafío, pero hay varios niveles de dificultad para todos los gustos, incluyendo alguno que añade muerte permanente para aquellos que deseen sufrir de verdad.

Una ambientación de 10

Pocos juegos desde los Silent Hill han explotado la tensión del ambiente como Darkwood, salvando algunas excepciones como los títulos de FromSoftware. A simple vista esta producción no parece demasiado impactante, y no lo es a nivel técnico, pero el detallado arte para criaturas grotescas, cabañas abandonadas, campos o pasajes subterráneos terminará por dejarnos una sensación muy poco agradable.

La agobiante atmósfera te mantendrá en tensión en todo momento gracias a la oscuridad y diseño del sonido. Muchas veces tenemos silencio, roto únicamente por el ruido de las pisadas en la tierra o el crujido de una rama; un sugerente acompañamiento sonoro que también cuenta con música inquietante. Que no os engañen las imágenes: Darkwood es más angustioso que la mayoría de superproducciones que podáis encontrar en el mercado actual.

La versión para consolas

Lo primero que hay que señalar es que debuta con textos en español, algo que no sucedió en PC, donde la traducción llegó meses después de su lanzamiento –y esa fue precisamente una de nuestras quejas en el análisis original-. La historia se narra mediante documentos, pero también al conocer a ciertos personajes, donde a veces hay selección de preguntas o posibilidad de mercadear. Y por supuesto, facilitará que todos los usuarios sepan lo que están examinando o fabricando.

En cuanto al juego con pad, una de cal y otra de arena. Para el combate podríamos decir que es incluso mejor que el manejo con teclado y ratón, pero estas situaciones no son un aspecto vital en Darkwood. En cambio sí pasaremos mucho tiempo navegando por menús e interactuando con objetos, y aquí la interfaz delata claramente su origen de PC. Al principio nos va a costar manejar algunos objetos, pues hay que dar más pasos de los aconsejables para abrir una puerta con una llave, pero no es un juego hecho para jugar con prisas.

En la versión probada –PS4 Pro- hemos notado que sufre algún pequeño problema de rendimiento –utiliza la tecnología de Unity, que ya en el pasado ha mostrado no ir muy fino en consolas-. Nada importante, pero para tratarse de un juego 2D no parece que los efectos gráficos justifiquen los pequeños tirones que se aprecian de vez en cuando.

Conclusiones

Es muy fácil entender el éxito de Darkwood: es una experiencia terrorífica que con pequeños detalles resulta innovadora. Quizás no tanto en las mecánicas de la supervivencia, vistas de una u otra manera en otros muchos juegos de moda, pero sí gracias a la logradísima ambientación que le da una personalidad única, que va calando poco a poco hasta llegar a los huesos. Temática, jugabilidad y argumento funcionan a la perfección.

Además, este es uno de esos juegos donde la aleatoriedad encaja bien en la propuesta, porque por muchas partidas que juegues nunca podrás jugar confiado. Aunque tenga algún aspecto mejorable, o sea más recomendable jugar en PC por la gestión de inventario, Darkwood es capaz de atrapar y asustar al jugador como pocos títulos consiguen.

Hemos realizado este análisis en PS4 Pro con un código que ha proporcionado Acid Wizard Studio.