Análisis de Blades of Time (PS3, Switch, PC, Xbox 360)
Las apuestas suelen ser arriesgadas en el mundo de los videojuegos. En una industria que comienza a pecar de conservadora en muchísimos aspectos, y en la que un fracaso a las espaldas suele pesar y ponderar más que un éxito, el estudio que arriesga y lanza una idea completamente nueva al mercado, no siempre las tiene consigo. El estudio ruso Gaijin Entertainment (os sonará por haber dado a luz a dos de los títulos más redondos y brillantes de los últimos tiempos del género de aviación en consola Birds of Prey y Birds of Steel) nos presenta ahora su propia idea y concepto de "hack and slash", pero de una forma que muchos jugadores considerarán atractiva y fresca. Pero, ¿es suficiente?
Las espadas del tiempo
Blades of Time es la secuela de un juego prácticamente desconocido para el gran público llamado X-Blade. Como continuación espiritual, en Blades of Time heredamos algunas de las mecánicas y aspectos de aquél (aparte de a su fémina protagonista), pero lo cierto es que apenas hay nexos de unión con aquél título, y de haberlos, la verdad es que no están del todo claros. Sea como sea, el título nos revelará su argumento base al poco tiempo de arrancar. No esperéis grandes alardes argumentales o complejos giros de guión. Básicamente, nos relatará una correcta historia donde encarnaremos a Ayumi, una buscadora de tesoros que acabará viajando a un mundo extraño y desconocido llamado "Dragonland" (obviaremos todos los nombres, que no sabemos si por problemas derivados de la traducción, pero lo cierto es que son poco o nada originales) tras un extraño ritual.
También, durante dicha introducción, conoceremos a Zero, un fiel compañero que nos ayudará en algunas partes del juego y que nos acompañará en algunos compases de la aventura. Poco o nada más os podemos decir del argumento más allá de que irá desvariando en ridículas y poco inspiradas tramas políticas entre los diferentes reinos existentes y es que, pese a que Gaijin Entertainment ha querido dotar a su juego de ínfulas de producción épica, la historia no es muy allá.
Blades of Time compila los aciertos y defectos de la mayoría de juegos de su género. El núcleo jugable del título de Gaijin Entertainment contiene una serie de novedades bastante interesantes, y que lo hacen destacar de entre la retahíla de productos similares. En base, diremos que Blades of Time ofrece los consabidos movimientos y cabriolas que esperamos en el control, pero que a su vez, y como si de un título de disparos se tratase, se nos permiten usar armas de fuego. Sí, como estáis leyendo. La mezcla es bastante impactante al principio, ya que estas armas no es que sean anecdóticas.
Tienen un peso contrastable en los combates, y en algunos aspectos, sobre todo cuando vayamos consiguiendo armas de mayor calibre, resolverán situaciones en un abrir y cerrar de ojos. Pero, pese a estos destellos de originalidad, en la mayoría de las ocasiones, el uso de las armas de fuego disponibles en Blades of Time será algo secundario. La disposición de algunos niveles, y el tamaño o la forma de atacar de la mayoría de los enemigos tampoco invitan a que las usemos, exigiéndonos una respuesta instantánea para atacar o defendernos. En estas disyuntivas, un ataque certero y físico con nuestras katanas, será más efectivo, seguro y fácil, que el usar el cañón y el calibre de turno.
En líneas generales, el control sobre Ayumi, nuestra protagonista, es correcto. Así, sin más. Al igual que en otros juegos coetáneos, tendremos el repertorio de movimientos jerarquizados alrededor de los consabidos ataques ligeros y los poderes especiales habituales, que podremos ir mejorando con la utilización de los Altares y las almas de los enemigos que vayamos derribando. No pasará demasiado tiempo para que estemos realizando las típicas acrobacias alrededor de las criaturas que nos irán asediando, pero será cuando comencemos a encontrarnos con grupos numerosos de enemigos cuando ciertos fallos que al principio no se vislumbraban, harán acto de presencia.
Aunque el movimiento de Ayumi es fluido, nos daremos cuenta que, al contrario que otros juegos de la competencia, encadenar varios golpes con las katanas de Ayumi, costará lo suyo. Habrá ocasiones en las que creeremos que falta un último golpe de gracia, y es que nuestro personaje se quedará bloqueado durante una pequeña fracción de segundo entre combinación y combinación de golpes, evitándonos una fluidez en los combos que en niveles y compases superior del juego, será esencial. Esto se puede obviar (dentro de unos límites) si Blades of Time tuviera o contara un motor de impactos o una serie de movimientos de esquive bien implementados, pero lo cierto es que ninguno de los dos apartados son destacables, dejándonos una sensación poco placentera al jugar. Otro de los añadidos, y en los que supuestamente se basa gran parte de su encanto y distinción, es el uso de los "desdoblamientos" o "viajes en el tiempo".
Blades of Time nos permite, llegado el caso y la ocasión, retroceder en el tiempo unas cuantas fracciones de segundo, algo ideal a la hora de enfrentarnos con algunos enemigos o para resolver cualquiera de los (escasísimos) puzles o plataformas que encontraremos en el devenir de la aventura. En la teoría suena bastante interesante, pero en la práctica, el sistema no cuaja en absoluto. Además, apenas se utilizará en contadas ocasiones (disparar con varios clones a un enemigo más fuerte de lo común en el mejor de los casos), con lo que su uso práctico se queda en el olvido, diluyéndose a lo largo de la partida. El apartado jugable, que en teoría, y dada que la historia y la ambientación nos dice muy poco, debería ser el aspecto más destacable de un juego como Blades of Time. Desgraciadamente, no lo es. Una vez más, y en una sensación de desidia enorme que invadirá al jugador y al juego a los pocas horas, acabaremos asimilando las supuestas novedades de una forma demasiado rápida, olvidándonos de ellas al poco tiempo. Y eso, no beneficia en absoluto al título.
Como nota curiosa, destacar el modo multijugador competitivo/cooperativo del que hace gala Blades of Time, donde elegiremos diferentes arenas en las que enfrentarnos a interminables oleadas de enemigos y en las que deberemos destruir las posiciones defensivas de los mismos con un pequeño grupo de aliados bajo nuestro cargo. Encontrar partida es difícil, quizás por los problemas de distribución (el juego es complicado de encontrar en nuestro país), pero si tenéis la suerte de poder echar un rato vía internet con algún amigo o contacto, lo cierto es que lo pasaréis bien. No es muy allá, pero el modo entretiene.
Apartado técnico
Blades of Time quizás no sea la panacea gráfica perfecta, ni mucho menos, pero dado el nivel de algunos de los exponentes del género, y la calidad que tiene en algunos de sus detalles gráficos, lo cierto es que luce bastante bien a nivel general. El cambio de dirección artística le ha sentado de maravilla, y tras dejar el estilo "cartoon" y anime del primer X-Blades, Gaijin Entertainment ha decidido apostar por un corte más realista y plausible, ganando muchos enteros con la transición. Ahora los modelados de los escenarios y los personajes gozarán de una mayor consistencia, especialmente en los enemigos, cuyo aspecto destacará en varios momentos de la aventura.
Buenas texturas, algún que otro elemento de iluminación decente y poco más, dan como resultado un apartado correcto y lo suficientemente trabajado como para no desentonar. En el sonido, y descontando su poco inspirada banda sonora, queremos destacar el doblaje en español. Quizás no esté del todo pulido (notamos cierta desincronización labial) pero el hecho de prestarse a traducirlo, ya es todo un detalle por parte de Konami.
Conclusiones finales
Vamos a ser directos: Blades of Time nos ha dejado fríos. Gaijin Entertainment parece no haber puesto la suficiente pasión ni detalle o esmero a la hora de ofrecernos el juego, dejando demasiado huérfanos ciertos apartados del título que a la postre, son muy importantes. Descontando su poco inspirada historia, el apartado jugable no pasa del aprobado justo, con algunos fallos básicos en las mecánicas muy importantes, que convierten el juego en algo desesperante en algunas ocasiones. Ni siquiera las novedades introducidas (el uso de armas o los viajes en el tiempo) son suficientes para alegrar o mejorar el resultado final, con lo que acabamos teniendo un juego poco interesante de jugar por su historia y su control.
Técnicamente correcto, con algún que otro detalle interesante, Blades of Time es un juego al que parece haberle faltado un tiempo extra de post-producción y maduración. Sea como sea, y aunque el grueso de jugadores no vean en el título algo interesante, las intenciones de Gaijin Entertainment son bastante loables, y quizás, en el caso de que seamos unos verdaderos fanáticos del género, Blades of Time pueda perecernos interesante. En el caso contrario, repetimos, hay opciones mucho mejores a considerar.