Un futuro pacífico y seguro
Sony sigue con sus iniciativas como first party en el continente europeo, y ahora es el Studio Camden el que nos ofrece un interesante juego que llevaba año y medio en desarrollo, y había sido mostrado por primera vez en el E3 de Mayo de 2001: Dropship, un juego de acción que nos ubica en un futuro no tan lejano en el que existe una fuerza internacional de paz integrada por la mayoría de los países (una especie de Cascos Azules pero con bastante más presupuesto) llamada United Peace Force, que mantiene la paz y la seguridad "que tanto nos ha costado conseguir", según explica una muy bien realizada intro.
En esta época, alrededor del año 2050, se ha alzado un nuevo régimen por vías no democráticas en China, pero que por el momento cumple todos los tratados internacionales, por lo tanto no es públicamente malvada. A lo largo de la historia nos iremos enterando de las hazañas de este régimen chino, y se acabará convirtiendo en nuestro enemigo, pero antes tendremos que solucionar ciertas situaciones conflictivas en territorios como el Norte de África, Colombia o Kazajstán. En todas las ocasiones nos enfrentaremos con grupos terroristas terriblemente bien preparados, que cuentan con todo tipo de armamento, bases "bien montadas" y un ejército numeroso.
Naves de ataque, carga y descarga
Sin embargo, nosotros somos la UPF y estamos respaldados por todos los países del mundo, por lo que nuestra tecnología es superior y se manifiesta en forma de las llamadas Dropships, unas naves multiuso que sirven tanto para atacar como transportar tropas: y básicamente esa será nuestro cometido en la gran mayoría de las misiones: transportar tropas en pleno "territorio comanche" y dejarlas en lugares conflictivos, o recogerlas, además de atacar a los tanques, helicópteros, y demás enemigos que se nos pongan en el camino. Habrá muchas variaciones de este concepto, misiones en las que tendremos que escoltar a otras naves y defenderlas con nuestro imponente arsenal, misiones mixtas que comprenden ataque y recogida de tropas e incluso algunas donde dejaremos a nuestra nave de lado y pilotaremos un pequeño carro de combate equipado con una útil torreta. Finalmente, en otras ocasiones lo que haremos será dirigir un ataque desde tierra y aire hacia las instalaciones o vehículos enemigos.
Como podéis ver las misiones no se harán monótonas, y en ellas tendremos que hacer un buen número de cosas que nos ordenará el mando central o nuestros compañeros a bordo de la nave (todo ello en perfecto castellano). Hay que decir que en las misiones estarán ocurriendo cosas siempre, y nuestros compañeros nos estarán dando consejos u objetivos todo el tiempo.
Fracasaremos cuando el artefacto que pilotemos explote o cuando las unidades que defendemos sean vencidas por los enemigos. En este aspecto, aunque el juego tenga el funcionamiento de un arcade, Dropship es muy completo y variado.
Dos estados para cada nave
La parte principal del juego es el manejo de la aeronave y aquí el Studio Camden ha hecho un buen trabajo. Las diferentes Dropships que pilotaremos serán diferentes en cuanto a prestaciones tales como velocidad, aceleración, escudo y armamento, pero todas tienen un punto en común: Tienen dos estados, el "estacionario", en el que nuestra nave tendrá el comportamiento de, por qué no decirlo, un OVNI, y el "vuelo", en el que será como un avión del Ace Combat.
En el modo estacionario, que es el que usaremos para la carga y descarga de unidades (y recomiendo usar en algunas contadas situaciones de combate), nuestra nave moverse en todas las direcciones, moverse verticalmente sin problema, moverse hacia los lados e inclinarse en todas las direcciones. Tendremos una marcha hacia delante y atrás, aunque a poca velocidad, pues de lo contrario entraríamos en vuelo. Los mecanismos de movimiento vertical serán los que usaremos principalmente para despegar y aterrizar, aunque la función de aterrizaje se podrá hacer mediante una secuencia cinemática si la deseamos (gran acierto del equipo de desarrollo, pues en ocasiones resulta muy aparatoso aterrizar bien).
En el modo de vuelo, como ya dije, nuestro Dropship parece un avión del Ace Combat. El manejo es el mismo, aunque nuestra nave, por su gran tamaño, sea algo más aparatosa. Tendremos a nuestra disposición un "Afterburner" que sólo durará un rato pero que nos proporcionará una propulsión extra muy útil para llegar en el momento justo a donde se requiere nuestra presencia. Para habituarnos a los complicados controles de la nave tendremos un modo de entrenamiento donde aprenderemos pasito a pasito a manejar el pan de cada día de la UPF. Otros vehículos que controlaremos serán aviones de reconocimiento y ataque, que se manejan igual que el Dropship en vuelo, y vehículos terrestres que se manejan igual que cualquier juego de coches.
Gráficamente bueno
A nivel gráfico, Dropship muestra unos escenarios enormes donde no se observa pop-up, pero con unas texturas no demasiado variadas ni detalladas. Han sido modelados de forma fotorrealista basándose en terrenos reales, y el diseño de los escenarios es muy bueno, pero como ya he dicho las texturas resultan monótonas. El modelado de los vehículos es muy bueno, y los efectos especiales, como los de deformación por calor que lucen los aviones, el humo, el polvo y las explosiones también están a un buen nivel.
Excelente doblaje al castellano
En el aspecto sonoro, la música no se nota mucho pero está presente y ambienta muy bien la acción con temas similares a los de las películas de acción, con cambios de melodía cuando nos atacan y en diversas partes de la misión. Los efectos de sonido están muy bien, pero son las voces lo que llama la atención, siempre presentes y perfectamente dobladas al castellano (con algunas expresiones memorables como "Diantre").
Buen control, pero difícil de dominar
El control de la nave está muy bien pensado, pero debido a la cantidad de comandos –especialmente en el modo estacionario- muchas veces nos haremos un lío. Para ascender o descender pulsaremos L1+R1 y L2+R2, mientras que para movernos a los lados L1+L2 o R1+R2, además de controlar la inclinación con el mando analógico. Como comprenderéis, tantas combinaciones de botones, y combinarlas bien para "aparcar" la nave, es difícil de dominar aunque, ojo, no imposible, y tras un par de horas seremos unos maestros del modo estacionario. En cuanto al manejo del "vuelo" y de otros vehículos, es muy sencillo y no dará ningún problema.
Un buen juego
En definitiva, Dropship no será el título más vendido del Invierno ni un juego que todos recordaremos, pero si amplia un poco más el elenco de buenos juegos de PS2, cada vez mayor. Ofrece una buena cantidad de horas de diversión, está brillantemente localizado a nuestro idioma, tiene una buena idea y una buena factura técnica. Recomendado a los amantes de la acción y los shooters/simuladores.