Análisis de Sniper Elite: Nazi Zombie Army (PC)

Recurrir a los nazis y/o a los zombis para crear un juego puede ser una de las decisiones menos originales que se pueden tomar hoy en día en el sector, pero eso no quiere decir, ni mucho menos, que el producto tenga que ser malo. Hay quienes afirman que ya está todo inventado, y otros que piensan que lo importante es la diversión. De un modo o de otro, Rebellion nos trae un nuevo juego de la saga Sniper Elite, pensado para ser considerado un spin-off o título independiente, que llega de manera exclusiva a ordenadores a través de Steam.

Sniper Elite: Nazi Zombie Army ofrece lo que promete con su título, pero avisamos ya a los aficionados de la saga que este episodio ofrece un desarrollo distinto, pensado para tomarse menos en serio. Argumentalmente no encontraremos grandes sorpresas.

En 1945, Adolf Hitler ve cómo están perdiendo la batalla, por lo que decide recurrir a su última y más poderosa arma: "El Plan Z", que levantará a todos sus soldados caídos. Los nazis y el ocultismo siempre han ido de la mano, por lo que dentro de toda la fantasía que rodea a este juego, tiene un mínimo de lógica histórica para los más dados a estas ciencias.

La apuesta de Sniper Elite: Nazi Zombie Army es algo distinta a la de Sniper Elite V2. La acción más calmada y pausada, la estrategia y la paciencia pasan a un segundo plano, en favor de una acción más dinámica y más pensada para el público general. Desde una perspectiva en tercera persona, encarnamos a un francotirador que, equipado con distintas armas, recorre distintos escenarios ambientados en la Segunda Guerra Mundial combatiendo con los difuntos soldados nazis que vuelven a la vida.

Como comentamos, Sniper Elite: Nazi Zombie Army se centra en un desarrollo más dinámico, en el que se intercalarán secuencias de francotirador con otras en las que nos obligarán a defender el lugar en el que nos encontremos con todo nuestro arsenal. El juego da total libertad al jugador para afrontar las situaciones, pero el jugador más experimentado sabrá cuándo recurrir a una u otra técnica. Así, en las partes pensadas para combatir con el rifle francotirador podremos apostarnos en la mejor ubicación, calcular el viento y la distancia, y volar cabezas con total precisión, mientras que en las partes más defensivas tendremos que recurrir a minas y armas cortas para menguar las fuerzas de las hordas atacantes.

Cómo afrontar una situación lo determinarán también los distintos tipos de enemigos. A pesar de lo que podamos pensar, no sólo encontraremos zombis prototípicos, lentos y con menos luces que un túnel oscuro. También habrá otros más inteligentes y con poderes especiales, que se desplazarán por el escenario para dispararnos desde los puntos más críticos, otros kamikazes rodeados de bombas listos para inmolarse, o incluso esqueletos que, ¡sorpresa!, no podemos matar salvo que acertemos en su corazón. Así podremos replantearnos nuestra estrategia –que ya rara vez pasa por el sigilo– para, por ejemplo, destruir un grupo de zombis explotando a uno de los kamikazes.

Una de las mejores adiciones para este título es, sin duda, el modo para cuatro jugadores. Por si algún aficionado aún espera encontrarse un Sniper Elite volvemos a recordar que la acción cobra mayor protagonismos. Así, es posible colaborar entre cuatro jugadores para cubrir todos los frentes. Esto es especialmente útil cuando defendemos nuestra base, ya que, por ejemplo, uno puede cubrir los enemigos desde la ventana, otro liquidar a los que se le escapan al anterior, y los otros, ofrecer soporte y colocar trampas. Esta mecánica nos anima a cambiar distintos tipos de armas, a movernos para recoger munición, etcétera, y le da mayor variedad a la partida.

El juego ofrece distintas configuraciones de dificultad, que no sólo aumentan la resistencia de los rivales, sino el realismo y las ayudas que recibimos a la hora de disparar con el rifle francotirador. Por supuesto, también permite jugar en solitario. aunque no hemos visto una reducción sensible de la dificultad o el número de enemigos en función del número de personas que jueguen de manera simultánea, algo que puede complicar ciertas secciones en el modo un jugador. Además ofrece una amplia variedad de rifles, pistolas, granadas, minas, etcétera, que podremos ajustar antes de cada partida.

Visualmente, el juego cumple con creces. Es muy similar a Sniper Elite V2, lo que realmente es algo positivo. No podemos esperar grandes alardes, pero encontraremos personajes detallados –con mención especial para la Kill Cam, cámara que nos muestra nuestra mejores muertes, incluyendo cómo reventamos órganos o cráneos–, buenos efectos de iluminación y partículas, y detalladas texturas. No son tan impresionantes las animaciones, aunque realmente, hay poco que se pueda hacer en estos casos. Es interesante mencionar cómo, cuando intentamos matar a los zombis "básicos" desde una determinada distancia, su particular balanceo al caminar hacer que acertar pueda complicarse de manera muy desafiante.

El aspecto sonoro no es excesivamente destacable, pero se adapta con corrección a las situaciones. El ruido de cada arma, los gritos guturales de los zombis, las explosiones, o incluso aguantar nuestra respiración para hacer que un disparo sea lo más preciso posible, añaden esa dimensión tan discreta e imprescindible sin las que un videojuego no sería lo mismo.

También consideramos mencionar algunos aspectos a mejorar, como por ejemplo, los escenarios. En general, son muy lineales, y muchas veces sentimos que nos están llevando de un lado a otro por el mero hecho de entretenernos. Las situaciones, por su parte, no son en exceso variadas, y pueden llegar a hacerse repetitivas para el que busque una experiencia siempre cambiante. Por último –aunque esto no es necesariamente culpa del juego–, acertar en la cabeza rival desde una distancia importante a través de internet puede ser un auténtico caos si se juega con ‘lag’, por lo que si vais a jugar con amigos, aseguraros de que la conexión es lo más estable posible.

Conclusiones

El caso que nos ocupa demuestra que, sin ser la panacea de la originalidad, se puede ofrecer un título interesante, capaz de divertir, y añadiendo nuevos aspectos sobre su base original, la de Sniper Elite V2. Un salto más pensado a la acción y a un público más amplio, con un divertido cooperativo y muchas posibilidades. Guarda bastantes horas de juego –que dependerán de la habilidad de cada uno– y se perfila como una elección idónea para quienes la saga principal les resulta muy pausada, o para quienes necesitan un juego con el que pasar un buen rato con amigos. Para estos últimos, por cierto, hay un paquete de cuatro licencias al precio de tres en Steam.