Análisis de Sam & Max: The Devil's Playhouse - Episode 2: The Tomb of Sammun Mank (PC)
El dúo dinámico de policías freelance ya lleva bastante tiempo entre nosotros. Después de que Telltale Games se hiciera con los derechos de los personajes, el estudio se puso manos a la obra para resurgir un legado que quedó anclado en la década de los noventa. Para bien o para mal, el resurgir de estos peculiares personajes dio lugar a varias temporadas de risas y puzles enrevesados, con multitud de situaciones cada cual más hilarante que la anterior, haciendo las delicias de no sólo los aficionados a las aventuras de Sam y Max, sino también a los amantes del género. En esta ocasión le toca el turno al segundo capítulo de la tercera temporada de aventuras, temporada que incluye diversas novedades con respecto a las anteriores y que ofrece un punto de vista completamente diferente -la visión extraordinaria y megalómana de Max-, así como una jugabilidad más acorde con los tiempos que corren.
Después de un notorio primer capítulo en el que se presentó un nuevo conflicto para dar pie al guión que se desarrollará en los siguientes meses, tenemos ante nosotros The Tomb of Sammun-Mak, el segundo capítulo de la temporada que viene con un poco más de dinamismo que el anterior, sentando las bases jugables de la obra y con una retrospectiva más que cómica e hilarante para el jugador.
Es hora de conocer a los antepasados de nuestros protagonistas, que, como no, mantienen esa frescura y la esencia de los personajes actuales. Curioso, cuanto menos.
Reviviendo el pasado
La acción del segundo capítulo sucede varios minutos después del final del capítulo piloto de la temporada. Sin querer desvelar demasiados detalles de la trama, tan sólo explicaremos que nuestros personajes encuentran un proyector con varias cuatro de películas, que, casualmente, están protagonizadas por los antepasados de Sam y Max. Al ver los films, y gracias a los recientes poderes de Max, el dúo de policías pueden revivir las aventuras de sus predecesores, conociendo más detalles sobre los personajes y descubriendo más secretos de la caja de juguetes del diablo, uno de los objetos principales de la trama. De esta manera pasaremos a controlar a los antepasados de los protagonistas, manteniendo, como no, el estilo de juego y descubriendo algunos detalles divertidos -como que el único cambio entre el Sam actual y su antepasado sea el bigote- que sirven de precedente para conocer el trasfondo de la historia.
Uno de los aspectos más importantes de este episodio es el hecho de que podremos alternar la película en cualquier momento, es decir, no estamos ante la típica aventura lineal, sino que podremos cambiar la línea del tiempo en cualquier momento. De hecho, uno de los atractivos del capítulo es que la gran mayoría de puzles están pensados para ser completados alternando entre realidades, viendo los objetos del momento y descubriendo cada detalle para poder completar las cuatro partes de la que se compone la obra. Muy innovador y fresco, puesto que quizá uno de los elementos que más negativamente dieron que hablar, sobre todo en la primera temporada, era que todos los capítulos se parecían inevitablemente entre si, cosa que en esta tercera temporada no ocurre en ningún momento.
El estilo de juego sigue la estela de su predecesor más actual, controlando a los personajes con el teclado y seleccionando los puntos de interés con el ratón. También es posible controlar todo el juego con el ratón únicamente, aunque al tratarse de un videojuego en 3D algunos ángulos quedan muertos y la experiencia de juego puede volverse un poco inestable, sobre todo para el jugador poco experimentado y que se encalle con facilidad. Contaremos, de nuevo, con personajes extras -mención especial a la pequeña Amelia Earhart, una famosa aviadora de la época- que aportarán su granito de arena y que servirán como pretexto para saber qué tenemos que hacer durante la aventura. Recibiremos ayuda por parte de algunos mientras que por otros seremos requeridos para poder avanzar en la aventura; típico e indispensable dentro del género.
Por otra parte nos encontramos con un problema que, posiblemente, será solucionado en la versión final del videojuego. Y es que, a diferencia de otros capítulos, en The Tomb of Sammun-Mak no es posible avanzar entre los diálogos, lo que implica escuchar todos y cada uno de los diálogos una y otra vez. No sería un problema si no tuviéramos que revisitar lugares cada dos por tres, por lo que si no se arregla para la versión definitiva del capítulo es posible que más de uno acabe agobiado y dejando el videojuego aparcado un tiempo.
Los puzles no son excesivamente difíciles, pero sí rebuscados. Jugar con las cuatro realidades le ha dado a Telltale Games una visión completamente diferente a la hora de desarrollar los puzles. En esta ocasión nos encontramos con puzles más complejos y rebuscados, aunque los más aficionados al género no encontrarán ningún tipo de problema a la hora de avanzar por la aventura. Eso sí, los novatos que no hayan seguido la época dorada de las aventuras gráficas no sólo se perderán en los puzles, sino también en las multitud de referencias a películas y videojuegos del pasado en las que siempre se han apoyado Sam y Max.
Como ya dijimos en anteriores capítulos, el apartado técnico de la obra se mantiene al mismo nivel, mejorando algún detallito o perfilando algún personaje para conseguir un acabado mejor. Sin embargo, el motor gráfico comienza a resentirse, y los años no pasan en balde para nadie, por lo que sería interesante, ya para la siguiente temporada seguramente, que Telltale Games explotara al máximo las capacidades del hardware, y más aún teniendo en cuenta que la obra aparece también a la consola de sobremesa de Sony. Por otro lado, la música sigue manteniendo su estilo, aunque esta vez con motivos mucho más añejos dado el guión del capítulo, acompañando a la ventura en todo momento y mezclándose con unos actores de doblaje -en inglés, por supuesto- que son, sin ningún tipo de duda, la guinda del pastel. Por el momento el juego se encuentra únicamente en inglés mediante descarga digital, aunque se lo más probable es que, al terminar la temporada, se haga una recopilación de capítulos y aparezca en las tiendas habituales de videojuegos, como ya ha sucedido con las anteriores temporadas.
Bien encaminados
La temporada no podría haber empezado con mejor pie. Después de un capítulo con suculentas novedades, como controlar -como si de un juego de acción se tratara- a Max, vemos poco a poco como va perfilándose la trama principal de la temporada. La retrospectiva ofrecida por Telltale Games nos deja con un muy buen sabor de boca, puesto que no escatima en recursos a la hora de presentar nuevos retos y conflictos reinventándose una y otra vez, algo muy difícil teniendo en cuenta la periodicidad de los capítulos y del sistema de juego, muy anclado al pasado. La obra aparecerá en breve tanto para ordenador como para el sistema de descarga de PlayStation 3, por lo que los más fieles al género no deberían perderse el capítulo. Lo peor de todo, sin embargo, es que la gran mayoría de fans de la serie que no estén familiarizados con el inglés tendrán que esperar a poder vivir las nuevas aventuras de nuestros personajes favoritos, puesto que por el momento tan sólo podremos disfrutarlas en inglés. Eso sí, con subtítulos.