Análisis de Perimeter (PC)
Cuando los Mundos ya no pudieron sustentarlo, el Hombre creó las naves y las multitudes comenzaron a habitarlas.
Y en las naves comenzó su decadencia.
Viendo el estancamiento del Hombre en su ignorante y voluntario encarcelamiento, los Espíritus se apiadaron de su creación y volvieron en su forma corpórea. Como un rayo de esperanza, los Espíritus mostraron al Hombre el Alfa y el Omega de los mundos y lo colocaron en la vía de su propio destino. Así dice la leyenda.
Los Espíritus aún están con nosotros. Su serenidad y sabiduría nos guía, a nosotros, el pueblo de Éxodo. A través de los terminales oímos sus voces. Gracias a su clarividencia nosotros alcanzaremos nuestro destino.
Así pues, tres grandes facciones comienzan un viaje interestelar con un final muy confuso. Sólo saben que deben avanzar hasta encontrar un mundo perfecto, su paraíso. Éste es el motivo que les hace avanzar sin un rumbo claro y aguantar, año tras año, los incesantes ataques de una raza alienígena letal: los scourge. Estos seres proceden de las entrañas de los planetas y reaccionan a nuestra presencia, esto es, cada vez que los humanos pisan un planeta, los scourge aparecen para terminar con la existencia de los colonos. Pero para que todo quede más claro, vayamos explicando como se juega y cual será nuestra misión como legados en las diferentes naves que pueblan el juego.
Y no podemos empezar sino hablando de las grandes naves nodrizas. Estas serán las estructuras que deberemos proteger a toda costa. Si perdemos la nave nodriza lo perdemos todo.
Para protegerla tenemos dos opciones, crear un perímetro defensivo o bien, salir volando de la zona. Aunque con esta segunda opción tenemos un problema. La nave necesita suministro eléctrico que es generado por los generadores energéticos y encima su velocidad es muy lenta, por tanto, esta opción queda descartada en la mayoría de ocasiones.
Tras esto, pasemos a hablar de los aspectos fundamentales del juego, y primeramente nos centraremos en la terraformación y sus utilidades. Como ya explicamos en el avance que hicimos, Perimeter es un juego que centra todo su potencial en la modificación del terreno en tiempo real. Hay que moldear las superficies para poder establecer nuestras bases, como también podemos crear obstáculos para impedir que las tropas enemigas nos ataquen.
Todo esto puede parecer muy complicado pero nada más lejos de la realidad. Primero debemos crear a los generales de brigada. Estas unidades, junto a los constructores, serán los encargados de levantar todas nuestras defensas de una manera rápida y eficaz.
Y todo es tan sencillo como pinchar en el icono de terraformar y marcar la zona que queremos modificar. Seguidamente los generales de brigada lanzarán unas pequeñas maquinas que comenzaran a elevar o a bajar el nivel del terreno, todo para crear una especie de zona cero. Cuando lo tengamos todo hecho, los constructores podrán comenzar a crear estructuras, pero aquí entra en juego el tema del suministro eléctrico.
Antes de poder construir estructuras deberemos crear generadores de energía. Cuando estén creados, aparecerá bajo ellos una zona de un color distinto al del nivel cero. Es una especie de zona cristalina donde veremos los reflejos de todas las estructuras y nuestras unidades. Pues bien, todas las construcciones que queramos crear deberán situarse en torno a esa superficie. Por ese motivo será importante crear una buena red de generadores, pero no será el único. Estos generadores eléctricos también tienen la capacidad de crear campos de energía capaces de repeler todos los ataques enemigos. Por tanto poseen una doble función que tendremos que tener muy en cuenta.
Por último nos queda hablar del ejército que nos acompañará en las misiones, y como es habitual en este título, merece una explicación a parte para que quede bien claro como se creará. El concepto principal es que solamente podremos llevar un tipo de unidad en cada batallón. No es que vayamos a llevar un solo soldado, es que en Perimeter las unidades se fusionan entre ellas para crear diferentes tipos de unidad, por ejemplo: si queremos crear unidades subterráneas solamente tenemos que crear a siete oficiales y a tres técnicos para poder obtener una sola unidad subterránea. Pero que quede claro que en cualquier momento podéis deshacer la transformación y crear otro tipo de unidad, no estáis obligados a llevar siempre el mismo tipo de unidad.
En definitiva, tendréis que ir creando diferentes tipos de unidades básicas –soldados, técnico, oficiales- para luego ir uniéndolas y creando unidades de combate. En la partida solamente podremos tener cinco batallones de soldados; para crear los diferentes pelotones solo tenemos que crear una estructura –centro de mando- que nos permitirá ir creando nuevos grupos. Con todo esto ya conoceréis básicamente todas las opciones que ofrece este título de estrategia en tiempo real.
A partir de este momento la historia toma otro rumbo, ya no solo tendremos que combatir contra los scourge, ahora también debemos combatir contra otras naves que no dudarán un instante en mandar todo tipo de unidades. Es aquí donde deberemos ser listos y montar líneas defensivas poderosas y eficaces; tendremos que crear perímetros defensivos, pero no debemos depositar toda nuestra confianza en este sistema. Lo más importante es crear torretas de misiles, torres de ataque subterráneo, etc. Si basamos toda nuestra defensa en los perímetros es muy probable que nos quedemos sin suministro eléctrico y por tanto, perderíamos toda nuestra capacidad defensiva.
Perimeter es un juego que se centra casi exclusivamente en la defensa. Pocas veces tendremos que ir a atacar a los enemigos. Lo más normal es proteger la base y cumplir los objetivos, aunque habrá misiones en las que tendremos que enviar unidades subterráneas para que hagan su trabajo bajo las estructuras enemigas; todo un gustazo. Por tanto, todo aquel que espere un juego de batallas contra otras bases enemigas ya puede ir quitándose esa idea de la cabeza.
Eso sí, todo lo que os hemos explicado se desarrolla en unos entornos tremendamente detallados. Los desarrolladores han puesto especial atención por el diseño de los entornos. Se trata de mapas pequeños, o sea, los ataques estarán a la orden del día. Todos estos mapas representan algunas montañas con forma de dragones, o dibujos en las rocas característicos de las cuevas de Altamira; realmente impactan. Y es que el motor gráfico de Perimeter es toda una pasada. Primero debemos resaltar la capacidad de moldear todo el terreno en tiempo real: veremos como las montañas van perdiendo altura o bien, ver como nuestros generales de brigada rellenan pequeños agujeros con arena de otras zonas. Luego tenemos todos los detalles de los mapas. Os hemos citado algunos ejemplos pero solo basta con ver las grietas que surgen en el terreno antes de desmoronarse para darse cuenta de la potencia del motor gráfico.
Y por último, los efectos de luz y partículas: todos los haces de luz que generan nuestros rayos láser iluminarán el terreno, las explosiones levantarán una polvareda mientras iluminan la zona que afecta, amén de crear grandes boquetes que luego tendremos que rellenar con arena. No nos podemos olvidar de los momentos en los que el cielo se llena de misiles que van dejando un rastro de humo, es realmente impresionante ver como persiguen a los aviones hasta que impactan contra ellos haciendo que se desplome contra el suelo.
Todo en conjunto es casi perfecto pero todo este despliegue gráfico tiene un pero; el juego, incluso en máquinas potentes, llega a ralentizarse. Y no hablamos de pequeños tironcitos, no, hablamos de tremendas ralentizaciones que hacen que la acción vaya a cámara lenta. En cuanto al apartado sonoro solamente tenemos buenas palabras: Perimeter ha sido doblado al castellano de una manera impecable, sus melodías son pegadizas y con bastante calidad y los sonidos FX no desentonan en el conjunto general. Tal vez se podrían haber aumentado el repertorio de melodías, pero tampoco es algo muy molesto.
Todo esto convierte a Perimeter en un gran juego de estrategia. Su apartado técnico esta a la altura de las circunstancias y su modo campaña es realmente bueno. Los amantes de la ciencia ficción encontrarán en este título un universo bastante rico en detalles ya que su historia esta muy cuidada. Las misiones son bastante numerosas y algunas nos darán más de un problema. Pero aún habrá más; Perimeter posee un modo multijugador para hasta cuatro jugadores a través de Internet o bien, un jugador contra la maquina. Se trata de batallas en mapas de reducidas dimensiones por lo que la acción esta asegurada.
En definitiva, un gran juego que cumple con lo que se decía desde un principio. Se trata de un juego con ideas muy novedosas y todas estas ideas han sido plasmadas a la perfección en el título. El único problema que podemos encontrar es que no llega a enganchar tanto como lo pueden hacer los grandes del género, pero sin lugar a dudas, Perimeter es un juego que gustará a los veteranos de la estrategia.