Análisis Outward, un viaje tan mágico como lleno de baches (PC, PS5, Xbox Series X/S, PS4, Xbox One)
El 2019 está siendo un año mágico plagado de sorpresas y proyectos a priori desconocidos que se están ganando un hueco en la biblioteca de los jugones en todo el mundo que, en esta ocasión, van a estar muy interesados (sobre todo si son aficionados a los RPG de la vieja escuela) en Outward, un título que nos propone un viaje lleno de libertad, grandes momentos y baches que afean una experiencia que podría haber sido inolvidable.
En Vandal hemos jugado largo y tendido a este título de Nine Dots Studios, una desarrolladora humilde a la que se nota que le ha faltado un mayor presupuesto para lograr que su ambicioso juego llegue a cotas más altas pero que, aun así, nos ha ofrecido una grata experiencia.
Libertad total para un aventurero normal
En Outward, tal y como contamos en nuestras impresiones, no seremos el descendiente de algún dios, un gran héroe o el hijo del dragón sino que, simplemente, seremos un habitante más del mundo con muy poca fortuna y una gran deuda de sangre que debe de pagar nuestra familia durante generaciones para compensar sus actos del pasado.
Con esta premisa y tras sobrevivir de forma milagrosa al hundimiento de un barco en el único golpe de suerte que nos ha regalado la diosa fortuna en toda nuestra vida, tendremos que empezar una aventura en la que apenas habrá líneas definidas apostando por la libertad total del jugador a la hora de escoger su propio camino.
No esperéis, por lo tanto, encontraros con un juego de rol con un montón de misiones principales y secundarias cada dos pasos que nos vayan guiando en nuestro camino más allá de una trama principal que no tardará en dividirse en varias subtramas permitiéndonos escoger la que nos resulte más interesante y algunas misiones secundarias que nos iremos encontrando en nuestra aventura de la mano de mercaderes o algunos personajes repartidos por las ciudades.
Esta libertad hace que Outward nos ofrezca una experiencia que, a nivel "rolero" es exquisita pero que, sin embargo, se ve un tanto empañada por un mundo que, a simple vista, está un tanto vacío, haciendo que los viajes puedan resultar un tanto tediosos sobre todo cuando tenemos que recorrer grandes distancias.
Esto no quiere decir que, en las diferentes zonas, no haya un buen puñado de mazmorras listas para explorar o secretos de todo tipo, el problema es que, a priori, no tendremos ninguna excusa para visitarlos más allá de nuestra propia curiosidad o de obtener unas monedas u objetos extra a modo de "farmeo".
Esto, unido a que la primera capa del mundo, es decir, el camino normal que nos llevará del punto A al punto B sin hacer rodeos, está falta de alicientes más allá de algunos enemigos de diversa índole nos da como resultado que el juego de en ocasiones nos dé la sensación de estar un tanto vacío a pesar de que, en realidad, hay bastantes lugares que podríamos explorar.
Tendrás que ser un superviviente
Uno de los aspectos más interesantes de Outward es el completo sistema de supervivencia que han añadido a la fórmula RPG teniendo que estar pendientes de todas las necesidades de nuestro personaje durante toda la aventura.
Tendremos que estar al tanto, como ya es clásico, de comer y beber, pero además también deberemos de protegernos del calor y el frío (con distinta ropa para cada situación, fogatas, pociones de resistencia, etc.), curar nuestras heridas y tener cuidado de no caer enfermos y sufrir poderosos penalizadores a nuestras características víctimas de resfriados, indigestiones u otros estados de alteración para nuestro personaje.
Para ayudarnos a sobrevivir y también en nuestros combates tendremos un poderoso sistema de creación de armas, armaduras, medicinas, pociones, fogatas, comida y otros utensilios que nos permitirán vivir un día más en este cruel mundo.
En líneas generales podemos deciros que este sistema de fabricación y que todo lo que rodea en torno a la supervivencia es, junto a la libertad, el mejor punto del juego, ofreciéndonos múltiples opciones y una mecánica compleja y divertida que atraerá a los jugadores más ambiciosos.
Un particular sistema mágico
Otro de los pilares realmente significativos de Outward es el particular sistema de magia que incluye el juego en el que los magos son una mezcla de habilidad natural para controlar las fuerzas de la naturaleza e inteligencia para estudiar alquimia y la fabricación de pociones y componentes mágicos en un sistema que, al menos para el que os escribe, es muy cercano al que nos podíamos encontrar en juegos de rol de lápiz y papel necesitando, además de nuestra habilidad mágica, de componentes y profundas investigaciones para poder utilizar ciertos hechizos.
En un principio nuestro personaje no podrá utilizar poderes mágicos y, si queremos dar la bienvenida a la magia en nuestra aventura, deberemos de dirigirnos a una imponente montaña que encontraremos en la primera zona de juego en de "activar" el maná "durmiente" en nuestro cuerpo, teniendo que explorar previamente una mazmorra para encontrar el camino, convirtiéndose este viaje para poder usar la magia en una gran aventura.
Una vez encontremos la Línea de Maná que nos permitirá activar nuestro poder mágico ddeberemos de afrontar una importante elección que será la de decidir cuánto sacrificamos del resto de nuestras características (vida y resistencia) para dar cabida al poder mágico en nuestro cuerpo.
A partir de aquí podremos comenzar a investigar y aprender diferentes hechizos y combinaciones de los mismos para derrotar enemigos, hacernos más poderosos o resistentes y, en definitiva, para contar con un arma o utilidad extra durante todo el viaje.
El combate y las incoherencias sus principales problemas
Pese a que como os decimos, Outward es un juego muy especial y atractivo para los jugadores aficionados al rol puro y duro, también cuenta con unos cuantos aspectos que no están al nivel del resto del juego, siendo uno de los principales escollos un sistema de combate demasiado básico y tosco.
El sistema en general es torpe y se acerca más al de juegos de hace una década que a lo que podríamos esperar de un título de hoy día, con animaciones un tanto básicas, problemas con la cámara cuando fijamos objetivos y fallos en algunos golpes que, a priori impactan pero que no hacen daño al adversario.
Además, unido a un sistema de combate torpe nos encontramos con que los enemigos en líneas generales serán muy difíciles de derrotar (sobre todo en los primeros compases del juego) para nuestro héroe, no siendo la dificultad en sí un problema sino esta dificultad unida a los fallos del combate lo que puede minar la moral del jugador.
Eso sí, no todo son pegas en el combate ya que nos encontramos con aspectos bastante interesantes como los preparativos que podemos realizar antes de cada encuentro como colocar diferentes trampas a las que atraer a los enemigos o desprendernos de nuestra mochila para poder esquivar los ataques enemigos con mayor facilidad, algo que se convertirá en esencial antes de cada encuentro.
Otro problema que tiene Outward lo encontramos a nivel de diseño, con situaciones un tanto absurdas o disparatadas como la que os contamos en su momento en las impresiones, en la que estando presos en una mina, podemos recoger nuestras armas y equipo con total impunidad sin que ningún guardia nos diga nada en una situación de lo más surrealista que estropea bastante una experiencia rolera de primer nivel.
Una experiencia 100% cooperativa
Un aspecto muy interesante de Outward es la posibilidad que tenemos de disfrutar del juego en compañía de otro jugador tanto a través de la red como de forma local con pantalla partida, enriqueciendo en sobremanera la aventura para ofrecernos una experiencia irrepetible en lo que a juegos cooperativos se refiere que amarán si se juntan dos amantes del rol más clásico.
Un apartado técnico con unas cuantas lagunas
Si miramos al apartado técnico nos encontramos con otro de los grandes puntos débiles de Outward ya que las texturas y efectos se alejan enormemente de la calidad que desearíamosen un título de este tipo en el 2019.
Esta carencia a nivel técnico contrasta con un diseño artístico notable, con algunos paisajes realmente bonitos a la vista a pesar de las texturas y con decisiones bastante buenas en lo que a la ambientación del juego se refiere.
En lo que se refiere a la interfaz el juego también palidece en sus menús poco atractivos.
Además, la adaptación al mando, al menos jugando a través de una NVIDIA Shield, nos ha parecido mejorable.
Pasando al sonido el juego cumple, siendo su banda sonora su mejor punto fuerte acompañándonos durante todo el viaje para hacerlo más ameno y metiéndonos de lleno en la experiencia con algunas piezas realmente buenas.
Conclusiones
Outward es un juego que nos ha dejado con un sabor agridulce, amándolo mientras somos conscientes de su potencial, su riqueza a nivel jugable y sus fallos, la parte amarga de este cóctel siendo capaz de estropear lo que, con un mayor presupuesto y algunos retoques, hubiera sido una experiencia magnífica.
Lo nuevo de Nine Dots Studios es una aventura muy particular que conquistará por la vía rápida el corazón de los roleros de la vieja escuela, de esos que empezaron jugando a rol de lápiz y papel y que se dejaron llevar más adelante en sus ordenadores o consolas de títulos tan ambiciosos como lo fueron Gothic u otras entregas clásicas del género.
De hecho, si venís de juegos de este estilo, probablemente Outward os vaya a enamorar a pesar de sus fallos que, ojalá, en un futuro, puedan corregirse con una segunda entrega en la que Nine Dots Studios pueda corregir sus fallos y contar con un presupuesto mayor para ofrecernos una experiencia a la altura de todo lo que nos quieren proponer.
Además, si tenemos la suerte de contar con un amigo con gustos afines a los nuestros, su modo cooperativo será capaz de ofrecernos una grata experiencia.
Hemos realizado este análisis con un código de descarga para PC proporcionado por Koch Media.